Victoria Onetto: "Vidal habla muy bien, pero la escuchás y no se le cree nada"
La actriz y referente política peronista pasó por Diagonales, para contar su carrera y su nueva labor siendo Secretaria de Cultura en la ciudad de Avellaneda, donde defiende sus ideales
Victoria Onetto hoy es una mujer multifunción, no solamente hace brillar su vocación como actriz, sino que demuestra su capacidad como Secretaria de Cultura y Promoción de Artes en la Municipalidad de Avellaneda. La militante peronista, identificada con el kirchnerismo pasó por la sección Íntimo de Diagonales y se animó a contar abiertamente su vida personal y laboral.
Durante una hora de charla, narró de qué manera se dio su infancia sin la posibilidad de contar con su padre, un militante político que fue asesinado por la policía mientras ella estaba en el vientre de su mamá; la importancia de su abuela Lili Massaferro -dirigente política peronista- para su vida; el comienzo de la trayectoria como actriz y la importancia de Jorge Ferraresi, actual intendente de Avellaneda, en su carrera política donde lleva un plan de trabajo basado en la gestión.
Además, destacó las figuras de Néstor y Cristina como referentes políticos ideales para el gobierno del país, criticó y cuestionó los ideales del actual Presidente de la Nación, Mauricio Macri y su equipo de trabajo; y confesó que las soluciones a los problemas en Argentina se darían con el regreso de las políticas populares.
¿Cómo estás hoy?
-Muy bien. Feliz de estar en el camino correcto, aprovechando la oportunidad que me dio Jorge Ferraresi de ser la Secretaria de Cultura y Promoción de las Artes en Avellaneda. Cuando te hablo del camino correcto, te lo digo porque ayer recordaba un discurso que dio Cristina (Kirchner) en la Plaza y decía: “Los que queríamos vivir en una patria libre y soberana teníamos que seguir el camino de las ideas, del estudio, de la formación, de la solidaridad, de pensar en el otro”. Nosotros vamos por ese camino el camino correcto, el de los gobiernos nacionales y populares para lograr la justicia social, la seguridad, la inclusión la soberanía política, económica. Tenemos que saber que, a la larga o a la corta, este camino nos va a llevar nuevamente a ser gobierno en nación y en provincia.
¿Qué recordas de tu infancia?
-Ahí agarramos una etapa de psicólogo (risas). Yo tengo una niña de 12 años que se llama Eva, ella fue una niña muy buscada y querida, y sin dudas, hoy es la razón de mi vida y el motor para que me despierte todos los días, porque es transformador ser mamá. Cuando comparo las infancias de ella con la mía, veo qué distintas que fueron, porque uno siempre trata de darle a su hijo lo que uno no tuvo y como yo no tuve a un papá, lo que más quise es poder brindarle la experiencia de crecer con un padre presente. Mi marido es un padrazo y verla a ella en su relación con su papá, hace resignificar un montón de cosas de mi infancia que me perdí junto a mi padre.
"Mi marido es un padrazo y verla a ella en su relación con su papá, hace resignificar un montón de cosas de mi infancia que me perdí junto a mi padre"
Tu papá fue asesinado por la policía en 1971. ¿Le encontras una respuesta a ese hecho?
-La respuesta es el hoy. Si yo me estoy animando a ocupar este lugar, un lugar de poder y de lucha, tiene que ver con seguir el legado de mi padre y de un montón de militantes que perdieron la vida en los años más nefastos de la Argentina. Representando un grupo de personas que no han podido ni desaparecernos, negarnos y ocultarnos. Lo que vivo hoy, me pone contenta, porque mi padre estaría orgulloso de mí. Mi presente habla de ese pasado que tuve, de esa historia que tengo. Hay que seguir reconstruyendo los pasados y las historias para volver a proyectarnos en un futuro donde temas como la memoria, la verdad y la justicia vuelvan a ser temas de estados, sobre todo cuando uno ve a estos gobernantes que gobiernan negando la historia, tratando de lograr una amnesia colectiva: negando los símbolos patrios, no festejando las fechas patrias, no pudiendo salir a la calle porque están gobernando en contra del pueblo. Nosotros que estamos del otro lado queremos vivir en un país libre, justo y soberano, ese pasado significa mucho.
"Si yo me estoy animando a ocupar este lugar, es por el legado de mi padre".
Dijiste actriz, ¿dónde se empieza a desarrollar esta carrera con los años?
-Siempre fui una chica muy hiperquinética. Una niña que no paraba de hacer cosas. Iba a una escolaridad simple y cuando tenía libre hacía danza, vóley, tenis, patín, teatro y canto. Todo lo que quería hacer lo hacía, mi mamá corría atrás de mí. Además, vengo de una familia de artistas, entonces siempre estuvo muy presente en nuestra familia. Arranqué a trabajar a los trece años, de casualidad porque acompañé a un amigo mío de la primaria a un casting que él tenía en ATC, en un programa que se llamaba “Chicas y Chicos van”. Me acuerdo que el productor me preguntó si me animaba a hacer el casting de cara rota –como hago todo en la vida-, le dije que sí y me eligieron. Desde ahí arrancó todo. Luego de comenzar a trabajar me gustó, comencé a estudiar y empecé a estudiar, mi primera maestra fue Cristina Banegas y siguieron grandes maestros.
¿Qué recuerdos te quedan de ese comienzo?
-Lo que me queda como recuerdo es entender que la falta hace a la acción, porque a los 14 años mi mamá se separó de un segundo matrimonio y realmente se quedó sola. Ahí empecé a sentir que había una necesidad económica y eso hizo que yo accionara, salí a buscar laburo por una cuestión de necesidad y ya a los 16 años tenía una independencia económica que ayudaba en mi casa. Hoy con los años, veo que el darle todo a los hijos les restas esa posibilidad del deseo y la necesidad de querer algo y luchar para conseguirlo. Mi camino no fue color de rosas, yo me acuerdo que me tomaba el micro, tardaba una hora y media para llegar al lugar de grabación y lo hacía feliz de la vida y una cosa fue llevando a la otra. Nunca paré de laburar, mis años más fértiles de laburo fueron de los 20 a los 30, donde fue el reconocimiento popular sobre todo a través de la televisión en programa con mucho rating. Siempre lo recuerdo con alegría porque fui, soy y seré una mujer muy positiva en todas las acciones y vivo con alegría. No tengo una personalidad melancólica, hay problemas voy hacia delante para encontrar la solución, pero siempre estuve muy sensible a la hora de estar conectada con mi deseo de querer lograr cosas a corto y largo plazo. Esto que estoy viviendo ahora es algo que vine a buscar y lo estoy logrando.
"No tengo una personalidad melancólica, hay problemas voy hacia adelante".
Tu papá y tu abuela militaron en el peronismo, ¿pero de qué manera prendió tan fuerte en vos?
-Yo creo que al peronismo lo llevo en la sangre. La herencia militante la recibí a través de lo que fue el asesinato de mi padre en 1971, porque él fue un militante político y luego mi abuela se convirtió en una militante muy importante de la rama peronista, dio su primer discurso en el ‘74 en el Luna Park, después estuvo muchos años exiliada hasta que 1983 pudo volver gracias a la recuperación de los derechos humanos. El reencontrarme con mi abuela me hizo entender un montón de cosas, reconstruir una historia y empecé a tomar conciencia. A su vez, a partir de la llegada de Néstor al poder me fui encariñando más con el peronismo. Porque el Menemismo, todos vivíamos en una burbuja, pero cuando apareció Néstor comencé a entender que algo estaba pasando y que me estaba llamando la atención, que era un llamado a involucrarse en política, sobre todo para los jóvenes y me terminó de caer la ficha con la muerte de él.
"Creo que al peronismo lo llevo en la sangre"
"Cuando apareció Néstor (Kirchner) comencé a entender que algo estaba pasando"
Háblame de tu abuela
-Ella me cambió la vida. Cuando se fue yo tenía dos o tres años y no tengo ningún recuerdo de niña, pero cuando volvió, yo ya había iniciado mi carrera como actriz. Ella se instaló en un campo en Cañuelas y se casó con Marcelo Laferrere, quien había sido director de radio “El Mundo” y te contaba historias de cómo había entrevistado a miles de personas. Yo me acuerdo que estaba trabajando en “Clave de Sol” pero agarraba mi primer autito y me iba al campo porque necesitaba estar con ella para que me cuente cosas. Ella se convirtió en mi fan, porque en la juventud, ante de meterse de lleno en política por el asesinato de un hijo, había sido actriz y trabajaba con el nombre de Lili Gacel, estuvo en la película que se llamó “La Casa del Ángel” en la cual había ganado un premio con un personaje que había hecho. Entonces hicimos una conexión muy importante. Cuando debuté en el Teatro, me acuerdo que ella me acompañó muy de cerca, estuvo en las funciones, me daba consejos. La verdad que tuvimos muchos años muy unidas y reconozco muchas cosas de mi abuela, en mi hija. Mi hija es rubia, ojos celestes y mi abuela era igual. Cuando nació Eva dije es Lili. Ella está muy presente en mi historia y más en estos momentos donde uno no se imagina lo que estamos viviendo con un gobierno de derecha y la verdad que entiendo mucho más un montón de cosas.
Ya hablamos de Victoria Onetto actriz, ¿cómo arranca esta nueva función?
-Arranca en realidad desde el nacimiento de mi hija, con 33 años, donde puse un parate en mi profesión. Eva fue una niña muy deseada y me dediqué a su crianza, porque era algo esencial para su vida. Al decidir bajar un cambio con la profesión, pero con la obsesión que tengo por la vocación de actriz, empecé a producir mis propios espectáculos y a entender que tenía la capacidad para hacerlo, gestionar y a entender al teatro, sobre todo, no solo como una herramienta para entretener sino como una herramienta para abordar problemáticas o temas que uno quería transmitir. En esos primeros ocho años de mi nena, realicé un montón de obras en las cuales se tocaron temas que yo quería expresar, por ejemplo, de maternidad, con una obra que se llamaba “Posparto” y terminamos en calle Corrientes. Ahí me di cuenta que yo tenía esa habilidad de gestionar, pero cuando hablo de gestionar es de producir y de hacer y poner en hechos lo que uno sueña y quiere realizar.
Cuando fue la derrota del peronismo, yo entendí que lo que iba a venir no iba a estar bueno, pero nunca me imaginé que iban a ser tan mentirosos. Entonces en el 2016, me dije que era el momento de formarme, de ponerle un marco y reconocimiento a lo que yo ya venía realizando que era gestionar mis propios espectáculos y entender el teatro como una herramienta de transformación social. Hice el posgrado en FLACSO de “Gestión de política culturales y de comunicación”, logré tener el título y luego de eso vine a buscarlo directamente a Jorge Ferraresi, porque es un dirigente con un cuadro político increíble, al cual admiro por su ética, porque nunca cambió el camino como otros dirigentes.
"Nunca imaginé que este Gobierno iba a ser tan mentiroso"
Lo vine a ver, me recibió, le conté que le proponía hacer un ciclo de teatro abordando la problemática de género porque fue el trabajo de mi tesis final, me dijo que sí, lo hicimos y con lo meses comencé como coordinadora de contenido del teatro. Un día vino la propuesta de Jorge de que quería jerarquizar el área de cultura, haciendo una Secretaria de Cultura, lo consulté con mi marido y le dije que sí. Y acá estamos.
Ni bien asumís, Eduardo Feinmman en su programa fue muy duro con la decisión de Ferraresi de darte a vos este cargo. ¿Cómo lo analizas con el tiempo?
-Ladran Sancho… Señal que cabalgamos. Si el enemigo te vigila es porque vamos por el buen camino. No fue ni la primera, ni seguramente será la última vez que reciba ataques, pero esta vez con todo el apoyo, no solo del intendente, sino con todos los compañeros y compañeras de acá, en Avellaneda. Sin dudas, fue una demostración más de un ataque que tenía que ver con una violencia machista, misógina, patriarcal. Porque todos los comentarios eran a través de mi figura como actriz. Como meretriz – actriz, prostituta. Qué mérito –justamente los hacedores de la meritocracia- puede tener esta actriz; como si actriz fuera un insulto para ocupar ese rol o desempeñarse en el cargo. Entonces creo que quedaron muy expuestos, yo los dejé hablar dos o tres días y cuando mostré mi formación se tuvieron que callar.
¿En ese momento te sentiste mal o al contrario, fue un trampolín y te dio fuerza?
-Obviamente que cuando hay una embestida mediática tan fuerte, se sufre. En un principio, no lo puse en mi persona porque la envestida, la crítica y el ataque fue en realidad a un dirigente que toma esta decisión como Jorge Ferraresi, que tiene una convicción política enorme y una fidelidad y lealtad a Cristina, al Kirchnerismo. Y para ellos ser kirchnerista es un insulto. Si ser kirchnerista es querer vivir en un país libre, justo, soberano; si ser kirchnerista es pensar en el otro por creer en la cultura del encuentro, en la cultura de la igualdad, de la inclusión entonces sí, seremos kirchneristas. Y fue algo que me dio más fuerza porque no pensé que les importaba tanto mi persona; entonces, si me atacaron tanto, salió en todos los medios, no pararon de hablar es porque evidentemente la visibilidad que yo le puedo dar al área y al cargo les molesta, justamente porque la cultura es luz, revela, critica, emociona. Y aparte, los procesos hablan por sí solos.
¿Qué importancia le ves al rol de la mujer en diferentes cargos directivos y sobre todo de gestión?
-Creo que la decisión de un intendente de designar a una mujer en el cargo de Secretaria de Cultura en Avellaneda, es un paso muy positivo. En este Municipio, está el Intendente, la Jefatura de Gabinete y catorce secretarías y la mitad de las secretarías está ocupada por mujeres. Entonces, esto habla de una decisión del intendente de gobernar para lograr esa igualdad que las mujeres seguimos pidiendo, por lo cual seguimos luchando. Y yo creo que este año con la revolución de las mujeres y con todo lo que pasó con la lucha por el aborto seguro, legal y gratuito se vio algo en la calle que para mí fue uno de los hechos más simbólicos de doce, trece, quince años. Se dieron cuenta que la única manera de conquistar derechos o de resguardar los derechos ya adquiridos es a través de la lucha popular. Y ese empoderamiento de las mujeres es muy fuerte, es una marea que es imparable porque por más que este año no haya salido a favor la ley no nos vamos a detener hasta conseguirla.
"El empoderamiento de las mujeres es muy fuerte, ,es una marea que es imparable"
¿Cómo ves el rol de María Eugenia Vidal en la política?
-Me parece que la tienen muy resguardada, no sale a muchos lados, me parece que la crisis, política, social y económica que estamos viviendo es tan fuerte y que es tan fuerte el contraste y el comprobar sobretodo, para el votante de Cambiemos, que le mintieron, que fueron estafados electoralmente,porque claramente en el día de hoy los tres ejes de Campaña que eran unir a los argentinos, pobreza cero y vivir mejor en la revolución de la alegría no las han cumplido, sino que han tomado medidas antipopulares para que la gente viva peor,para desunir a los argentinos porque lo único que hacen es generar más odio para que la sociedad se siga dividiendo y de alegría, la verdad no tiene nada. Mintieron todo: aumentaron las tarifas, devaluaron. Realmente la gente está asfixiada, no puede más. Entonces,María Eugenia es una gobernadora que habla muy bien, pero la escuchás y no se le cree nada; todo lo que dice se nota que es mentira porque no lo puede sostener. Vidal es Macri. La realidad es tan fuerte,que no se puede tapar el sol con una mano y lo ves en las encuestas de la provincia de Buenos Aires.
"Vidal habla muy bien, pero la escuchas y no se le cree nada"
¿Culturalmente retrocedió Argentina?
-Tengo acá el presupuesto para 2019. Es a la baja en todos los aspectos y en muchos casos significa anular el área. Dicen una cosa y hacen completamente lo contrario. Achican todos los programas culturales, sacan subsidios, cierra programas; en todas las cajas y en todas las áreas bajan el presupuesto 30, 40, 70 % y en algunos 100. Quieren achicar la cultura porque les molesta la cultura. La cultura es hablar las cosas y criticar, y a ellos les molesta la cultura.
¿Hoy la solución sería nuevamente Cristina?
-Para el día de la lealtad hubo dos actos bien diferenciados, uno en Tucumán y otro con los intendentes. Sin dudas la soluciónes la unión. Nadie puede ser portero de discoteca que diga vos si, vos no. Y cualquier armado es con Cristina.
¿La única solución para sacar la derecha es un peronismo unido?
-Un gran frente electoral con un peronismo unido.
¿Tenías pensado terminar trabajando en algo así?
-No lo pienso como en terminar, esto es un inicio. Es una posibilidad que se me está brindando y que estoy honrando con mi voluntad de trabajo, soy una mujer que le pongo el lomo a todo lo que hago y con mucha humildad, aprendiendo en el día a día. Me encanta lo que estoy haciendo, vengo entusiasmada, soy feliz. Cruzo el puente Avellaneda, llego y es como una isla.Nos vamos a independizar dentro de poco (risas). Cuando tenemos obras acá en el Teatro Roma, yo las recibo y la energía de la gente: “Vamos Victoria”; “VivaPerón carajo”; “Vamos a volver”. Yo creo que si tengo estas ganas de todo es porque lo que se vive en Avellaneda es realmente maravilloso.
"Me encanta lo que estoy haciendo en Avellaneda, soy feliz"
¿Qué objetivos tenes?
-Mi objetivo es el día a día. Demostrar mi gestión a través de los resultados de trabajo. El año que viene vamos a estar en campaña y Jorge (Ferraresi) es muy fuerte, Avellaneda tiene una población de 400 mil habitantes y él tiene una aprobación del 70% y una intención de voto de casi el 50%. Camina por la calle, se va a tomar un café en la esquina antes de venir al teatro, es un tipo muy querido y respetado y lo bancan un montón. Y lo bancan porque es un dirigente que gobierna para que la gente realmente viva mejor,todos los programas que tiene en Avellaneda son maravillosos: está entregando 50 mil bicicletas para los chicos de las escuelas públicas. Ves toda la ciudad plagada de bicicletas verdes, les da los anteojos a todos. Todos los programas del kirchnerismo que cerraron los macristas, Ferraresi los tomó y los está haciendo en Avellaneda. La gente lo ve y lo valora.
¿Ahora con lo todo lo que pasó desde que Macri es Presidente, se valoran más los doce años de kirchnerismo?
-Yo creo que me hice kirchnerista ahora… (muchas risas). Yo nunca trabajé para el kirchnerismo. Uno cuando puede ver la historia, más allá de valorar más por lo que se está perdiendo y por los riesgos de seguir perdiendo derechos adquiridos, creo poder contextualizarlo en un momento histórico porque no solamente es lo que pasó en esos doce años del kirchnerismo,tuvieron que ver con la política argentina, sino que era una política regional,donde Latinoamérica vició un momento muy interesante, no nos olvidemos cuando se le dijo que no al ALCA a Bush, eso fue grandioso. El avance neoliberal, no solo se ve en Argentina, pasa en toda la región, basta con mencionar lo que pasó en Brasil. Entonces creo que no hay que subestimar al adversario por llamarlo de alguna manera porque sin dudas representan los intereses internacionales y de las grandes empresas, y sin dudas de los gobiernos del Norte. No voy a criticar a cuál o tal persona del gobierno, sino al modelo, creo que este modelo por el cual está representado el macrismo tiene que ver con una intención de los Estados Unidos y las grandes potencias de meterse a dirigirlos gobiernos locales.
Actriz y Secretaria de Cultura. ¿Cómo llevas las dos carreras?
-Necesito una doble. De hecho, como no tengo nada que hacer, voy a hacer Microteatro en noviembre. Yo le pedí tres cosas a Jorge (Ferraresi) cuando le dije que sí:una, quiero seguir trabajando desde el Teatro Roma, que la secretaría sea en el Roma. Es un teatro de 1904, patrimonio nacional, cultural, arquitectónico,histórico; está todo puesto en valor. Es una cosa de locos. Otra cosa que le dije a Jorge, yo a mi carrera de actriz no la voy a abandonar, si aparece algo,obviamente no voy a hacer una tira todos los días.
Analizando todo. ¿De qué te arrepentís?
-De nada, cero. No me arrepiento de nada. Aún de los errores que puedo haber cometido, creo que uno de los errores aprende. Cuando pienso en los trabajos que hice, y digo cómo hice está película, cómo hice esto, pero no me arrepiento de nada. Uno es lo que es gracias a su historia y estoy muy feliz me acepto. Lo importante es la pasión, cómo uno encara las cosas: levantarte a la mañana y tener un objetivo, tener ganas, salir contento, hacer las cosas con vocación. Siempre les digo a mis compañeros que el hacer -de gestionar- es hacer, y en ese hacer uno puede cometer errores y les digo en las reuniones –tengo cuatro direcciones que dependen de la secretaría-, seamos muy generosos con los aciertos y los logros y seamos piadosos con los errores también.
Victoria Onetto es…
-Una mujer empoderada.