El ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, se refirió a los rumores de su salida del cargo y posterior ruptura con el Frente de Todos. Fiel a su estilo, reconoció tener diferencias al interior de su espacio pero aclaró que daría una explicación "después de la elección". Así dejó abierta la duda. 

"Tengo una responsabilidad. Después de las elecciones, si quiere, hablamos", manifestó Berni en una conferencia de prensa a medios televisivos. 

Y agregó que "soy un soldado que da las peleas que hay que dar".

Las declaraciones del ministro de Seguridad se producen luego de que, tras unas fuertes diferencias que tuvo con el jefe de bloque del Frente de todos en Diputados, Máximo Kirchner, comenzara a barajarse su renuncia al cargo. 

Respecto a esta posibilidad y en alusión al conflicto que mantuvo con el hijo de la vicepresidenta, Berni dijo que "no está en mi concepto bajar los brazos. Eso no quiere decir que no tenga diferencias. No son de ahora".

Sumado a esto, el funcionario bonaerense atraviesa una fuerte ola de inseguridad en el conurbano bonaerense y mantiene serias diferencias con intendentes y funcionarios del gobierno nacional. "Estas discusiones son muy acaloradas dentro del espacio político que represento. No es cuestión de peleas, es cuestión de miradas distintas sobre el abordaje de distintos problemas. Y uno de ellos es la inseguridad", expresó. 

"La lealtad es un camino de ida y vuelta, no solo con quien puede ser el conductor del espacio político. Es también con mis convicciones y mi vocación. La lealtad de las convicciones, últimamente en política decimos una cosa y después decimos otra", concluyó.