Gestapo bonaerense: El testimonio de un exjefe de Seguridad del Bapro complica a Vidal
La Comisión de Inteligencia del Congreso indagó a Mariano Albito, quien sostuvo que “nunca hubo cámaras de seguridad” en la sala de reuniones salvo en esa ocasión
Avanza la investigación en la causa por la mentada “Gestapo judicial” del macrismo y un nuevo testimonio complica aún más a María Eugenia Vidal. Se trata de Mariano Albito, ex jefe de Seguridad del Bapro, quien declaró ante la Comisión Bicameral de Inteligencia del Congreso, y sostuvo que “nunca hubo cámaras de seguridad instaladas” en la sala de reunión de la entidad bancaria, excepto por aquella ocasión del año 2017.
“Esa afirmación confirma que las cámaras fueron puestas por la AFI”, añadió el legislador del Frente de Todos, Eduardo Valdés. De este modo, se amplía cada vez más la teoría de una operación de espionaje ilegal montada por la propia Agencia Federal de Inteligencia durante el período de gobierno de María Eugenia Vidal.
La reunión de la Comisión Bicameral con Albito se realizó en el edificio del Bapro ubicado en San Martín y Bartolomé Mitre, en el microcentro de la Ciudad de Buenos Aires. Las declaraciones se dieron en el marco de la investigación sobre el accionar de una “mesa judicial” bonaerense durante la gestión de Vidal, digitada con el objetivo de hostigar y perseguir a figuras del sindicalismo y referentes opositores.
Esta hipótesis fue corroborada a partir del hallazgo en la AFI del video del encuentro del ex ministro de Trabajo, Marcelo Villegas, con empresarios y agentes de inteligencia, donde se lo escucha al ex funcionario bonaerense mencionar una “Gestapo” para espiar y avanzar sobre referentes gremiales. La expresión de Villegas hacía alusión al nombre de la policía secreta del nazismo.
“Es muy valorable la conducta tanto de la empleada de ceremonial que vino ayer (por el martes) como la de hoy del gerente de seguridad del banco. Creemos que la gente que no tiene nada que esconder se presenta y no pide postergación”, fueron las palabras de Valdés, con un guiño a la actitud del procurador Julio Conte Grand, quien pidió postergar su declaración y realizarla por escrito.