En un año de gobierno de Mauricio Macri se perdieron entre 290 y 410 mil empleos en Argentina

El INDEC publicó que para el cuarto trimestre de 2016 la desocupación alcanzó al 7,6% de la población. Ahora bien, dado que en el segundo y cuarto trimestre 2016 se había registrado un desempleo del 9,30% y 8,5% respectivamente este nuevo dato fue presentado como una victoria de las políticas públicas del macrismo. El Centro de Economía Política Argentina (CEPA) elaboró un informe en donde se sostiene que la medición actual está subestimada ya que la desocupación se encuentra entre 7,8% y 8,8%. Desde el CEPA se realizaron dos críticas concretas

Primero, el 7,6% de desocupación presentado para el cuarto trimestre de 2016 resulta positivo si se lo compara contra los trimestres anteriores, pero esta lectura es errada dado que no tiene en cuenta los factores estacionales que afectan el trabajo. Lo correcto es comparar estos nuevos resultados con el mismo periodo del año anterior, análisis que resulta imposible dado que la nueva gestión del INDEC decidió no publicar ningún dato desde diciembre 2015 hasta mediados de 2016. Con el objetivo de analizar como evolución la tasa de desocupación desde que asumió Cambiemos el CEPA reconstruyó la serie a partir de los datos de la dirección de Estadísticas y Censos de CABA.

Grafico 1 Evolución de la tasa de desocupación en Ciudad de Buenos Aires (según encuesta Trimestre de Ocupación e Ingresos ETOI., de la Dirección General de Estadística y Censo de CABA y de los 31 aglomerados urbano a nivel nacional (según EPH-Indec).

En el grafico 1 puede observarse que la serie reconstruida en la línea punteada de color verde establece como punto de partida de Mauricio Macri al frente del Estado Nacional un 5,4% de desocupación. Por tanto, se puede concluir que entre el cuarto trimestre de 2015 y el mismo periodo de 2016 las políticas de Cambiemos hicieron crecer el desempleo 2,2 puntos, generando que 270 mil personas perdieran sus puestos de trabajo.

Ahora bien, en segundo lugar, también se cuestiona que el 7,6 % de desocupación sea metodológicamente correcto. El nuevo informe del INDEC tiene como fuente la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Esta encuesta tiene como ventaja la capacidad de recuperar los cambios el mercado de trabajo informal, algo que otras mediciones al estar centradas en el empleo registrado no pueden recolectar. Pero bien, como toda encuesta, está realizada en base a proyecciones de población que le permiten inferir conclusiones al resto del universo, es decir al resto de la sociedad. Desde CEPA se argumenta que las modificaciones hechas a las proyecciones, a partir de aumentar la representación de los adultos y de reducir la presencia de jóvenes hicieron que disminuya artificialmente la desocupación. 

Grafico 2 Cambios en la composición etaria de la población muestra de EPH-INDEC, 31 aglomerados urbanos, segundo trimestre 2015 versus segundo trimestre 2016.

Esto ocurre dado que la tasa de desocupación es una división entre lo desempleados y la Población Económicamente Activa (PEA); y esta última es la suma de los ocupados y los desempleados que están activamente buscando empleo. Por tanto, al retirar jóvenes de la proyección, menores de 16 años que en su mayoría no son ocupados ni están buscando empleo, se genera que crezca la PEA de manera estadística. A modo de ejemplo, si la PEA es de 100 personas y 10 de ellas no encuentran empleo la desocupación seria de un 10%, pero si la PEA ahora estuviese compuesta por 125 personas los mismos 10 desocupados solamente representarían el 0.8%. Este ejercicio, argumenta el equipo de CEPA, permite entender cómo las modificaciones sobre la composición interna entre jóvenes, adulto y adultos mayores al interior de la proyección redujeron la tasa de desocupación.

A su vez, existe otro elemento que el informe resalta. En el cuarto trimestre se registró una drástica caída del desempleo sin que las condiciones económicas generales hayan mejorado. 

Como puede verse en el cuadro anterior, efectivamente se registra una caída en la cantidad de desocupados para el cuarto trimestre de 2016 de 132 mil casos menos, pero en el mismo periodo la PAE disminuye en 149 mil personas. Esto significa que, por un lado hubo una reducción en la cantidad de personas que, como explicamos previamente, están ocupadas o se encuentran buscando trabajo (PAE); y, por otro lado, que la caída de la tasa de desocupación está relacionada a esta baja en la PAE y no a la creación de empleo genuino. Continuando con el ejemplo anterior, con una PAE de 100 personas se tendría una tasa del 10% de desocupación si 10 estuviesen buscando empleo. Pero si de 2 de esas 10 decidiesen dejar de hacerlo la desocupación seria ahora del 8%.

El INDEC argumenta que de un periodo al otro 149 mil personas se retiraron del mercado de trabajo debido al efecto desaliento. El mismo es un fenómeno por el cual una persona desempleada ante reiteradas frustraciones en el mercado de trabajo elige la inactividad y cesa su búsqueda de trabajo dejando de ser, al menos estadísticamente, un desempleado. Lo particular de este fenómeno es que el mismo se da en el largo plazo y luego de muchos intentos fallidos. Por el contrario, en el corto plazo y ante la caída del empleo y el poder adquisitivo son más las personas del grupo familiar las que se lanzan al mercado de trabajo en busca de apalear esta merma en los ingresos haciendo crecer, por tanto, la Población Económicamente Activa. 

De esta manera la medición que registró un descenso de 2,2  puntos que en el cuarto trimestre 2016, sin creación de empleo genuino, resulta al menos cuestionable.

Desde CEPA se proponen dos nuevas estimaciones de desempleo la estimación A corrige las modificaciones a las composiciones etarias al interior de la proyección y la estimación b corrige el efecto desaliento.

De esta manera la estimación de la desocupación que se propone desde el Centro de Economia Política Argentina (CEPA) es menos favorable para el gobierno que la que realizó el INDEC. En un año de gestión de Cambiemos se habrían generado entre 290 mil y 410 mil desempleados nuevos.