Gimnasia jugó mal y sin merecerlo se trajo un punto del Ducó

Gimnasia tenía que hacer valer el punto conseguido ante Vélez y no lo hizo y desdibujo la buena imagen realizada en el debut del 2020. En su visita a Parque de los Patricios empató 1-1 ante Huracán por la fecha 18 y no logró escalar en los promedios.

El comienzo del partido, marcó que del partido no sería para nada fácil para el Lobo. A los 2 minutos, Rodrigo Gómez recibe una pelota en tres cuartos de cancha en ofensiva, elude a Maximiliano Coronel que salió a cualquier lado, se acomodó para la derecha y sacó un delicioso remate al ángulo desde afuera del área para vencer a Jorge Broun que solamente voló para la foto.

Luego de gol, comenzó el desconcierto del equipo de Maradona con movimientos en la cancha sin sentidos. José Paradela -tuvo otro flojo partido-, que inició jugando por la derecha, pasó a la izquierda y después al centro, Pérez García -demostró que desde lo físico le falta- se movió del centro a la izquierda, luego a la derecha y Maxi Comba -de bajo nivel- también comenzó a rotar.  Todo en cinco minutos. 

Estos cambios constantes, dejaban sin respaldo a Harrinson Mancilla -corrió para todos lados y mal- y el Globo hacía lo que quería. La pregunta es ¿lo practicaron en la cancha o fueron improvisaciones?, la segunda opción corrió con ventaja.

Lo único bueno para el Tripero, entre tantos quilombos, fue que la primera que tuvo, la aprovecho. Jhonathan Agudelo -el mejor junto a Fatura- recibió un pase de Comba, la guapeó ante la marca de Romat, quedó  cara a cara con Antony Silva y definió cruzado para poner la parda.

Después del gol, Gimnasia desapareció definitivamente en la primera parte por sus desprolijidades tácticas, pero corrió con la fortuna. Primero con una salvada de Broun (¿cometió penal?) al quedar mano a mano con Nicolás Cordero y luego travesaño le impidió el grito de gol a Norberto Briasco que se encontró con la pelota en su cabeza luego de un mal cálculo de Coronel.

En el segundo tiempo, el Lobo salió con un 4-4-2 claro con Paradela al lado de Mancilla, pero nada mejoró. Es más, jamás entró en partido. A los 10 minutos, Briasco dejó en el caminó a Matías Melluso -le ganaron todo el partido la espalda- lanzó el centró, Ojeda remató y Fatura tuvo una tapada cinco estrellas, pudo reflejos.

Ni los ingresos de Horacio Tijanovich, Nicolás Contín y Eric Ramírez por Pérez García, Barrios (nuevamente jugó mal, lejos del arco rival) y Comba, le dieron un cambio de cara. Sobre el final, el conjunto de Israel Damonte, que hasta el momento no ligó la cuota de suerte como entrenador, pudo llevarse la victoria en una pelota parada, pero el cabezazo de Nicolás Cordero, se estrelló en el travesaño.

Gimnasia sumó un punto, pero dejó pasar un partido que debía ganar sí o sí. Retrocedió en el juego, en lo táctico y sobre todo en la actitud que es clave para su contexto adverso. Ahora jugará una final directa ante Patronato, donde solo es importante conseguir la victoria. 

Sin dudas, la semana en Abasto tendrá mucho trabajo porque volvió a demostrar, como a lo largo del 2019, que es un equipo con dos caras.

Formaciones:

Huracán: Antony Silva; Gonzalo Bettini, Nicolás Romat, Lucas Merolla, César Ibáñez (Javier Mendoza); Mauro Bogado (Joaquín Arzura) ,Mariano Bareiro; Norberto Briasco, Rodrigo Gómez, Martín Ojeda (Sebastián Ramírez); y Nicolás Cordero. 

DT: Israel Damonte.

Gimnasia y Esgrima La Plata: Jorge Broun; Maximiliano Caire, Paolo Goltz, Maximiliano Coronel, Matías Melluso; Harrinson Mancilla; Matías Pérez García (Horacio Tijanovich), José Paradela, Maxi Comba (Erik Ramírez); Lucas Barrios (Nicolás Contín) y Jonathan Agudelo. 

DT: Diego Maradona.

Goles: 2´PT Rodrigo Gómez (Huracán) y 10´PT Jhonathan Agudelo (Gimnasia).

Amonestados: Ibáñez, Bareiro y Briasco (Huracán). Goltz, Coronel, Melluso, Mancilla, Paradela, Agudelo y Tijanovich (Gimnasia)

Árbitro: Silvio Trucco.

Foto: La Nación