Tras los incidentes producidos en los aledaños del Monumental, la CONMEBOL decidió trasladar la final de la Libertadores a Europa, para mayor seguridad. Sin embargo, sorpresivamente, el gobierno español mandó una carta a la República Argentina para que la Nación mande a sus mejores policías para que el Santiago Bernabéu esté fuertemente custodiado de cara a la 'Superfinal' de la Copa Libertadores.

El pedido se dio a conocer a través de una carta de oficio, el Ministerio del Interior español pide "solicitud cooperación policial argentina... debido a la magnitud del evento a desarrollar y al control de los hinchas de ambos equipos".

Así, encabezados por Guillermo Madero, Director Nacional de Seguridad en Espectáculos Futbolísticos, ira personal especializado más efectivos de Gendarmería y Policía Federal, que llevarán 100 teléfonos para controlar a los hinchas y capacitarán en el lugar a la Policía Nacional  de España. Vale recordar, que para el partido que resolverá el campeón de América, en Europa... Viajarán 10.000 hinchas argentinos (cinco de cada equipo) y no podrían asistir las barras. 

A su vez, de estos todos los gastos del traslado se hará cargo el gobierno español.

Ahora, la pregunta es: ¿Para eso movieron la sede? Para qué se pide personal de seguridad de acá que, se supone, no está capacitada para actuar en consecuencia como afirmó el Presidente del ente Sudamericano de Fútbol, Alejandro Domínguez. Una mudanza que sigue sin encontrar sentido...