Francisco Apaolaza, al correr de atrás en la idea de Gabriel Milito, era uno de los hombres que se podía ir de Estudiantes en estos próximos días  con el fin de buscar rodaje  futbolístico. Pero su salida al fútbol europeo, que parecía estar encaminada, se cayó.

Asteras Trípolis de Grecia, era el club que lo buscaba pero en las últimas horas cerró la llegada Gerónimo Barrales, el ex delantero de Gimnasia que ya había tenido un paso por el club e hizo cambiar todo los planes.

Ahora, el jugador que viene de estar a préstamo de Patronato, donde jugó poco ya que estuvo lesionado, espera que se refloten ofertas de clubes de la segunda división de España e Italia que buscaban contar con sus servicios.  

El mercado de pases en Europa cierra a fines de este mes y por el momento Pancho aguarda que su teléfono suene, sino quedaría sin rodaje constante al menos por seis meses.