Cine Logan, la historia del menos mutante
Por Juan Manuel Caravello. La historia de un hombre que ya no pasa sus mejores días pero que por algún motivo debe volver a ponerse la ropa de héroe
Oscar Wilde decía que la mejor manera de superar una tentación es ceder ante ella, así que aquí voy Logan es la mejor película de superhéroes que he visto. Listo, ya está. Algunos me dirán que Christopher Nolan que hizo Batman tiene películas notables; es cierto, que la actuación de Heath Ledger como The Joker, de acuerdo, de acuerdo, lo admito son muy buenas. Pero Logan tiene algo más, puede algún lector enojarse, pero Logan parece una de superhéroes escrita por Cormac McCarthy.
Wolverine-Logan es sin dudas el personaje preferido de la mayoría entre los X-Men y tenemos que concordar en que si bien las películas de X-Men son bastante buenas, las dos anteriores de la saga de Logan eran, por ser generosos, decididamente malas. Lo he dicho en anteriores columnas, el cine debe generar emoción, la que quieran pero no nos puede dejar sin conmovernos; las anteriores nos podían sorprender o sobresaltar, pero el cierre de la historia del mutante más violento del universo Marvel conmueve, gente que llora en una de estas películas no es común, para no decir que nunca lo vi, hasta ahora.
La película cuenta la historia de Logan, ya grande, achacoso, más humano que mutante, cuidando a Charles Xavier, a esta altura nonagenario, viviendo en un lugar sucio y abandonado en medio del desierto. Logan paga sus medicamentos y comida trabajando de chofer de limousine, una especie de remisero de lujo. Los primeros minutos transcurren así, en un mundo donde no nace un mutante hace veinticinco años, hasta que irrumpe la necesidad de una última misión que el héroe por su destino mismo de héroe debe aceptar.
Saquemos el pochoclo de esta trama, es la historia de un hombre que ya no pasa sus mejores días pero que por algún motivo debe volver a ponerse la ropa de héroe; hemos visto amigos muchas películas con variantes de esta historia, ya lo sabemos, películas de vaqueros, de agentes secretos, de detectives, de artistas, todos teniendo que aceptar su última misión fuera de tiempo y forma. Pero en todas esas historias que tanto nos gustaron el héroe no tenía garras de adamantium y se regeneraba después de una golpiza o un tiro.
Logan es la historia del menos mutante de los mutantes viviendo una aventura humana si somos capaces de quitar los aditivos, claro. Ahora bien, los aditivos están, hay acción, peleas, sangre, cabezas rodando, autos chocando, "tiros y cocha golda", también hay emoción genuina y ese es el verdadero aditivo, lo otro, cualquier película del género lo tiene.
Tal vez llegamos al punto de que la industria genero el cine de súper héroes para adultos que también quieren emoción, que envejecimos al ritmo de los súper héroes, que también tenemos achaques y buscamos la misma identificación que cuando niños y adolescentes con ese Wolverine que podía todo y ahora cada vez puede menos. En todo caso aprovechemos este momento para ver estas películas antes que el próximo volantazo de la industria vuelva a los héroes adolescentes con acné.