Por la pandemia, ahora el FMI recomienda invertir en salud pública
Ante la avanzada del coronavirus, el organismo financiero emitió un mensaje para sus países miembros
Lejos de sus recomendaciones habituales de ajuste, esta vez el Fondo Monetario Internacional recomendó ahora a sus países miembros aumentar la inversión en salud pública, preservar la estabilidad financiera y aplicar estímulos fiscales, ante la avanzada del virus Covid-19.
El documento con la firma de su titular, Kristalina Georgieva, el FMI consideró que es necesario "aumentar la confianza y proporcionar a la estabilidad a la economía global", ante la incertidumbre que genera a pandemia.
"Las medidas de contención, combinadas con un monitoreo temprano, disminuirán la tasa de infección y la propagación del virus. Los Gobiernos deberían continuar y ampliar estos esfuerzos para llegar a las personas más afectadas y empresas", señaló el organismo.
“La prioridad número uno en términos de la respuesta fiscal es garantizar un gasto de salud de primer orden para proteger la salud de la gente, cuidar a los enfermos y frenar el avance del virus. No puedo hacer suficiente hincapié en la urgencia de intensificar las medidas de salud y en la necesidad de asegurar la producción de suministros médicos para que la oferta esté a la altura de la demanda”, indicó Georgieva.
En otro orden, pidió aplicar "medidas de política macrofinanciera", que "suavicen y acorten el impacto económico". "Deberían ser puntuales y estar focalizadas en los sectores, las empresas y los hogares más afectados", indicó.
Como tercera medida en tanto, el FMI indicó que "se necesitará también suficiente liquidez para neutralizar los riesgos para la estabilidad financiera".
Finalmente, respecto a la política monetaria indicó que los bancos centrales deberían "aliviar las condiciones financieras y garantizar el flujo de crédito para la economía real".
En ese sentido, el organismo señaló que los bancos "tomaron medidas coordinadas decisivas sobre la flexibilización monetaria y apertura de líneas de intercambio para disminuir las tensiones del mercado financiero mundial.
“En el futuro, puede ser necesario cambiar las líneas a las economías de mercados emergentes", apuntó. "Por lo tanto, la acción política de los bancos centrales en los mercados emergentes y las economías en desarrollo necesitarán equilibrar el desafío especialmente difícil de abordar las reversiones del flujo de capital y los productos básicos choques", completó el Fondo.