A pesar de las declaraciones de Vidal, el 32% de femicidios del año ocurrieron en su provincia
Fuertes críticas desde sectores que denuncian el vaciamiento de políticas de prevención de violencia de género. La situación se agrava en territorio bonaerense
El desfinanciamiento en la Línea 144 para atención a víctimas de violencia de género, el ajuste en el presupuesto del área y el cierre de programas clave para protección de las mujeres fueron algunos de los puntos con que señalaron “doble discurso” en María Eugenia Vidal, ayer indignada en Twitter por el caso de Thelma Fardín y Juan Darthés.
Mientras tanto, las cifras en la Provincia de Buenos Aires son alarmantes, según estadísticas desarrolladas por la organización feminista Mumalá, se evidencia que, a noviembre de 2018, “de los 216 femicidios ocurridos en el país, el 32% ocurrió en la provincia de Buenos Aires”. Desde el organismo señalaron que en años anteriores la cifra se mantenía en 25%, por lo tanto, en territorio de Vidal el problema ha ido en aumento.
Respecto del rol de Cambiemos frente a tal escenario, la organización explicó en un informe que el “Gobierno Nacional destinará en el Presupuesto 2019 la suma de 234,3 millones de pesos al Instituto Nacional de las Mujeres (INAM), organismo encargado de la aplicación de la Ley 26.485”, es decir, “tan sólo $11,36 por mujer”.
Dicho presupuesto -remarca el documento- con la inflación proyectada, “implica una retracción del 18% con respecto al presupuesto asignado en 2018. Asimismo, los fondos destinados al monitoreo del Plan Nacional de Acción disminuyó de 50 millones en 2018 a 32 millones para 2019”.
En sus twits, la gobernadora aseguró que “desde el Estado estamos acompañando para que las mujeres no estén solas” y agregó: “Tenemos la aplicación Seguridad Provincia para que las víctimas de violencia puedan hacer denuncias anónimas y sin ir a la comisaría, y la línea 144”.
En tanto, desde la representación gremial de ATE en el área de la Línea 144 salieron al cruce de inmediato hacia la mandataria debido a los despidos y precarias condiciones de trabajo que fueron denunciando en el transcurso del último año. “No siempre existen las políticas necesarias para que las mujeres puedan tener el acompañamiento en el territorio. El servicio de atención no funciona las 24 horas por falta de recursos y las mujeres que salen a la madrugada pasan la noche en un comisaría o hospital porque no hay lugar”, inidicaron.