A pesar del conflicto con Vidal, Astillero Río Santiago podría acordar con Venezuela la reactivación de obras
Una delegación de trabajadores y un ingeniero intentarán destrabar la construcción de dos buques, hoy estancada por la falta de inversión sufrida en la empresa estatal. Además, solicitarán un “perdón” por las multas por retrasos
En el marco del conflicto que los trabajadores del Astillero Río Santiago mantiene con el gobierno de María Eugenia Vidal por falta de inversión, una delegación de la empresa naval argentina viajará a Venezuela para destrabar la producción de los buques Eva Perón y Juana Azurduy, pensados para la nación gobernada por Nicolás Maduro.
Según sostienen los trabajadores, la falta de créditos de Provincia para adquirir insumos generó el estancamiento de las obras acordadas con Venezuela, cuyos plazos vencidos de entrega ya han generado multas de 20 mil dólares diarios contando desde el 1 de diciembre. En ese sentido, la comitiva de la empresa naval buscará renegociar los pagos acordados con la firma estatal venezolana Petróleos de Venezuela SA (PVSA), al mismo tiempo que solicitará un “perdón” de los 20 mil dólares diarios de multa que deberá afrontar la Provincia.
Durante la última visita de representantes venezolanos en nuestro país, los trabajadores del ARS plantearon la posibilidad de establecer un mecanismo que permita solucionar la situación. Allí, plantearon que PVSA podría adelantar un porcentaje del monto total acordado por el Eva Perón, cuya obra está finalizada en un 97%. Esta propuesta habría sido aprobada por el interventor de la empresa naval, Daniel Capdevila.
Por otra parte, la dirigencia de ATE en la empresa ha denunciado que varios contenedores con materiales, como válvulas, caños o cuplas, se encuentran “detenidos en el Puerto de Buenos Aires y sin ser retirados por ARS, lo que ocasiona ya un acumulado de más de un millón de pesos a la Aduana”.
El conflicto de Astillero Río Santiago con la gestión de María Eugenia Vidal tuvo su punto de mayor delicadeza a mediados de este año, cuando el Gobierno insinuó la posibilidad de generar despidos masivos e incluso cerrar la empresa, aduciendo que “generaba pérdidas”. La maniobra desató un descontento general que culminó con movilizaciones masivas en La Plata y una cruda represión.
La reunión de las delegaciones argentina y venezolana se concretará la semana próxima. Cabe señalar que, a pesar de las complicaciones financieras, el ARS pudo concretar esta semana la restauración del buque ARA King para la Armada Argentina, que será entregado el próximo 14 de diciembre.