La oposición se prepara para capitalizar la revuelta de la Bonaerense
La oposición considera que Axel Kicillof quedó desfigurado y la policía bonaerense “le saltó el alambrado”, tanto a él como a Sergio Berni. Los principales dirigentes de Juntos por el Cambio se entusiasman con lo que consideran una pérdida de liderazgo político del gobernador, y consideran que Alberto Fernández se vio obligado a resolver un problema de escala provincial “manoteándole la plata a los porteños"
La oposición salió al cruce del decreto anunciado por Alberto Fernández que le saca a la Ciudad de Buenos Aires el 1,2% de la coparticipación. Frente a la consulta de Diagonales, los principales dirigentes de la oposición aprovechan para ahondar en la herida y acusan a Kicillof de “incapacidad” para administrar sus cuentas, y sostienen que tanto él como el ministro de seguridad Sergio Berni aparecieron recién a último momento, “escondiéndose detrás del Presidente”. Reiteran la “cerrazón del gobernador Kicillof” y “la poca experiencia de su gabinete”. “El día que surja otro problema en la provincia de Buenos Aires, van a ir a la Quinta de Olivos a golpear la puerta”, sostuvieron a Diagonales cerca del ex ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo.
La principal respuesta política al anuncio del Presidente vino del jefe de gobierno porteño. Horacio Rodríguez Larreta hace rato está en el ring, pero finalmente se levantó del banquito de la esquina, y decidió señalar al Presidente de romper “la convivencia política”. Larreta brindó una meticulosa conferencia de prensa en la que sostuvo un discurso sentimental, planificado al detalle. Sin margen de error. Allí anunció la inconstitucionalidad del anuncio presidencial, y que llevará la pelea por sus recursos a la Corte Suprema de Justicia. Es evidente que se vio obligado a esta puesta en escena, confrontativa, a partir de un recorte económico que lo afecta desde el día 1. Una fuente muy cercana a la ex gobernadora María Eugenia Vidal avaló la decisión del jefe de gobierno, y sostuvo: “de un día para el otro Alberto Fernández tiró todo por la borda y actuó de una manera mucho más cristinista. Sin lugar a dudas, que Cristina Fernández gane la pulseada tendrá consecuencias políticas y sociales”.
En esta misma sintonía, el día viernes, Horacio Rodríguez Larreta firmó un decreto a partir del cual le ordenó al Procurador General de la Ciudad, Gabriel Astarloa, presentarse ante la Justicia para reclamar la inconstitucionalidad. Al respecto, el vicejefe de gobierno porteño, Diego Santilli declaró ayer por la mañana en radio Mitre: "El amparo será presentado en los próximos días, entre lunes, martes o miércoles". Luego agregó: "La decisión de quitar los fondos es intempestiva, anticonstitucional y unilateral". Es cierto que los recursos son un tema fundamental en tiempos en donde la recaudación fiscal ha caído en picada, y la inconstitucionalidad -bajo la interpretación de la Corte Suprema de Justicia- parece ser su única esperanza. Es por eso que la bronca de los dirigentes de Juntos por el Cambio proviene de que se vieron afectados por un problema bonaerense. De esta forma, cerca del senador nacional Martín Lousteau, sostuvieron: “la provincia recibiría la misma cantidad de dinero que el total del resto de las provincias. Ahora sí va a quedar en claro cómo gestiona Kicillof”. En este mismo sentido, frente a la repregunta de Diagonales por el tipo de resolución que encontró Fernández, agregaron: “El Presidente cedió al conflicto bonaerense manoteándole la plata a los porteños”.
Es así que las palomas dentro de Juntos por el Cambio se posicionan entre la victimización y una nueva oportunidad política. Un lugar desde el cual el jefe de Gobierno porteño intenta capitalizar la ruptura del noviazgo con Alberto Fernández y ordena sus patitos en fila. Vidal, Ritondo, Jorge Macri, Martín Lousteau, todos parecen acompañar a Larreta. Por momentos, parece de otro tiempo la poca discrecionalidad bajo la cual en enero de 2016 Macri aumentó a la ciudad, vía DNU, la coparticipación de 1,4 al 3,75 por ciento. Sin embargo, eso es cosa del pasado. Los privilegios de la cuna del PRO.
Por su parte, el intendente Jorge Macri fue una de las figuras utilizadas en la puesta de escena del Presidente en la conferencia de prensa brindada en la Quinta de Olivos. Salió en primera fila en la mayoría de imágenes transmitidas, pero se mostró muy sorprendido frente al anuncio presidencial. Acompañado del intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela; y del intendente de Lanús Néstor Grindetti, se sintió traicionado por el accionar del Presidente. Diagonales conversó con una figura muy importante cerca del intendente, y sostuvo: “el Presidente hizo de gobernador porque ni Kicillof ni Berni salieron hasta última hora”, y agregó: “que haya ganado la pulseada Cristina Kirchner, y su fijación con atacar a Larreta, pone en aprietos a todo Juntos por el Cambio”. Además, cerca del intendente se mostraron desconcertados con el papel del gobernador, e insistieron: “¿Cuál es el rol del gobernado? Jorge fue a la Quinta de Olivos decenas de veces, y cuantas más veces Alberto Fernández le dice “amigo” a Axel Kicillof, más desfigurado queda”.
Por su parte, Alejandro Finocchiaro, quien fue candidato a intendente de La Matanza, es otro de los dirigentes de Juntos por el Cambio que desde su distrito está pidiendo pista en la provincia de Buenos Aires. Diagonales conversó con él y se mostró preocupado por el accionar de la policía Bonaerense. Sin embargo, Finocchiaro hizo referencia a la falta de liderazgo del gobernador Axel Kicillof. Así, sostuvo: “Esto no refiere a un problema económico simplemente, sino que es un problema de conducción política. Tanto de parte del gobernador como de su ministro de Seguridad”. En este mismo, sumó: “Esto te demuestra que el gabinete de Kicillof tiene muy poca experiencia, y evidentemente no conocen la provincia”.