A escasos días de los cierres de listas, todos los flashes apuntan a la conformación de las listas nacionales, los nombres que las encabecen y las negociaciones entre las principales figuras del Gobierno para terminar de definirlas. Qué lapicera pesará más, cómo coexistirán las visiones del Presidente Fernández y la principal líder del espacio, Cristina Fernández de Kirchner, qué lugares tendrán La Cámpora, el massismo, los Intendentes del PJ, el sindicalismo y los movimientos sociales, son las preguntas que llenan los títulos periodísticos de la semana.

Sin embargo, menos conocida y menos atendida que la rosca por los lugares en esas listas nacionales, la renovación de diputados y senadores provinciales también es parte de la estrategia oficial, que aspira a mejorar los números actuales y construirse una mejor plataforma de gobierno para los próximos dos años. Números y actores para la Cámara baja, sección por sección.

¿QUÉ SE RENUEVA?

La Legislatura de la Provincia de Buenos Aires se compone de un total de 92 diputados y 46 senadores, que se dividen como representación de las ocho secciones electorales de la Provincia. La renovación de bancas alterna por secciones cada elección, y este año se ponen en juego 46 de diputados por las secciones Segunda, Tercera, Sexta y Octava, y 23 de senadores por la Primera, Cuarta, Quinta y Séptima.

Sostener o ampliar: el objetivo del Gobierno bonerense en Diputados

La actual conformación de la Legislatura muestra un panorama muy parejo entre oficialismo y oposición, con una leve mayoría del Gobierno en diputados y una marcada supremacía opositora en senadores. En concreto, en la Cámara Baja, sumando los propios más aliados la administración Kicillof cuenta para los votos con 46 bancas, mientras que la oposición junta 43. A la inversa, el Senado provincial encuentra al Gobierno con 20 escaños propios contra los 26 opositores. De ese total, el peronismo renovará 22 escaños en Diputados y 7 en el Senado, mientras que el macrismo se juega 19 legisladores en la Cámara baja y 16 en la alta.

Este mapa legislativo carga de una importancia mayúscula la elección de este año, más allá de los flashes para las listas nacionales, puesto que es la oportunidad para el oficialismo de reordenar un tablero de ajedrez que hoy le resulta más una traba que un trampolín para sus iniciativas, y que es el fuerte de la resistencia de Juntos por el Cambio en la Provincia. Además, la alianza opositora debe revalidar los números de su mejor elección, la del 2017, por lo que el Gobierno bonaerense tiene mucho para ganar. Pero el poroteo es complejo, implica muchos actores locales además de los grandes sectores que conforman el FdT, si bien la unidad es el eje para este año, nadie quiere regalar nada.

DIPUTADOS, SECCIÓN POR SECCIÓN

La Cámara baja representa la disputa más pareja. Allí, tanto el FdT como JxC deberán revalidar 21 bancas cada uno. Las cuatro restantes en juego corresponden una al Frente de Izquierda, dos al interbloque opositor Cambio Federal (el sector de Rogelio Frigerio, Emilio Monzó y Gustavo Posse), y una al espacio oficialista 17 de noviembre. Pero en cada territorio las discusiones para el armado de listas son diferentes.

La Segunda sección es una gran oportunidad para el oficialismo, así como un posible foco de conflictos internos. La oportunidad surge del hecho que es la única sección del interior de la Provincia donde el FdT logró imponerse al macrismo el 2019, y de conseguir una segunda victoria al hilo sumaría un diputado más a los que ya ostenta. Escenario para nada menor, considerando que se trata del corazón sojero de la Provincia, que venía siendo uno de los núcleos amarillos. Pero, la contracara, es que hay muchos sectores que atender. Al trío habitual de kirchnerismo, massismo e intendentes, hay que sumarle en este territorio las aspiraciones de Sergio Berni. El Ministro de Kicillof, que más de una vez hizo públicas sus diferencias con la gestión del Presidente, suena como posible candidato y desde su entorno afirman que “los leales tenemos derechos a disentir”. Ese disentimiento podría ser el plantear una interna, cuando la línea oficial es unidad hasta que duela.

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Otros factores a atender: los Intendentes Ricardo Casi (Colón), Ricardo Alessandro (Salto) y Carlos Puglelli (San Andrés de Giles) no tienen reelección en 2023. Este último, miembro del Frente Renovador, también es uno de los nombres que más suena. El massismo también intentará retener el lugar de la actual legisladora suplente, Micaela Morán. La Sección está compuesta por 15 distritos del norte de la Provincia, y pone en juego 11 bancas, de las cuales actualmente 6 están en poder de JxC y 5 del FdT.

La Tercera sección se compone de 19 distritos del sur del conurbano, y es una de las más importantes, tanto en cantidad de electores como en cantidad de bancas a repartir. De las 46 butacas para diputados en juego este año, 18 corresponden a la Tercera, que es la única donde actualmente todos los partidos tienen representación. Diez bancas corresponden hoy al FdT, cuatro a JxC, dos a Cambio Federal, una a 17 de Noviembre y una al FIT. Aquí el oficialismo buscará sostener y hasta ampliar esa supremacía, ya que JxC debe defender su excelente elección de 2017. Ganar una o hasta dos bancas nuevas es la aspiración del peronismo, que tiene como actores principales al sector más puro del kirchnerismo y a los Intendentes del PJ.

Por los primeros, el nombre es el del matancero Facundo Tignanelli, titular del bloque del FdT, responsable bonaerense de La Cámpora, y hombre de máxima confianza de Máximo Kirchner. Por el lado de los Intendentes, Martín Insaurralde es la figura central, luego de haber ordenado la relación ente Kirchner y los jefes comunales, trazando el camino del líder de La Cámpora hacia la jefatura del PJ provincial. Su espada es Federico Otermín, electo en 2017 y Presidente de la Cámara baja desde 2019, otro nombre pesado en juego este 2021.

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Por la Sexta sección, que comprende los 22 distritos del sur de la Provincia, se eligen 11 diputados. Actualmente, la división es idéntica la se la Segunda: 6 escaños para JxC y 5 para el peronismo. Pero la particularidad es que, de esas 5 bancas hoy oficialistas, 3 corresponden al kirchnerismo y las otras dos fueron obtenidas en 2017 por el massismo bajo la alianza 1País, que juntó al Frente Renovador con el Gen de Margarita Stolbizer, hoy en el armado del macrismo. El Diputado Carlos “Cuto” Moreno volvería a encabezar la lista como lo hizo en 2017 bajo el ala de CFK y el respaldo de La Cámpora. Fernanda Bevilacqua también renovaría. La diputada obtuvo su banca por 1País hace cuatro años, y proviene de un partido vecinalista cercano a las filas de Sergio Massa.

De ahí para abajo, la discusión está abierta. Massa quiere retener la segunda banca obtenida en 2017, pero los lugares son pocos. Por la Cámpora no puede renovar Gabriel Godoy, principal armador kirchnerista del sur bonaerense, y ese lugar podría para la bahiense Maite Alvado,  directora de Asociaciones Civiles y Mutuales de la provincia de Buenos Aires. Entre los Intendentes también hay un cierto ruido. En 2019, un grupo encabezado por Jorge Ferraresi (hoy Ministro de Hábitat) y Mario Secco trabajaron para la candidatura de Verónica Magario, mientras que Martín Insaurralde impulsó su propia postulación Cada sector tiene sus aspirantes para los pocos lugares que quedan a repartir. De los 22 municipios que componen la sección, ocho corresponden al oficialismo, tres están en manos de movimientos vecinalistas, y 10 son gobernados por JxC.

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La Octava sección, con La Plata como principal territorio, renueva 6 bancas en esta elección. La Diputada Florencia Saintout debe renovar su banca elegida en 2017, y sería un número puesto incluso pensando en la proyección al 2023 y la disputa por la Intendencia frente al macrismo y Julio Garro. Lo que no pudo ser en 2019 a raíz de la multiplicidad de ofertas electorales y la falta de unificación, hoy aparece como un panorama más saldado por la práctica desde la oposición en plena pandemia.

En concreto, las tensiones entre ese sector del kirchnerismo encabezado por Saintout y el ala de Victoria Tolosa Paz, encontraron en la oposición a la segunda gestión de Garro un eje de unidad y coordinación. Y hoy, además, los lugares a discutir no se pisan. Mientras Saintout seguiría en el plano provincial, Tolosa Paz suena como uno de los nombres fuertes para la lista nacional, bajo el ala del Presidente Alberto Fernández, quien sería su impulsor. Por otro lado, el sector del ex Intendente Bruera también aspira ser parte de la repartija, y la muñeca política de los armadores de las listas peronistas será clave para perfilar una disputa a fondo con el macrismo que hoy conduce el municipio.

En la disputa por la cámara baja el oficialismo bonaerense se juega una partida importante. Sostener o aumentar las bancas son objetivos prioritarios para consolidarse en el plano legislativo. Se enfrentará, además, a una oposición que debe revalidar sus mejores números y carga con ese riesgo. En plena crisis, una oportunidad de oro para el peronismo en su casa matriz.