La gobernadora María Eugenia Vidal comenzó un marzo por demás caliente, enfrentando el conflicto con los docentes y la decisión de convocar a un paro de 48 horas por parte de estos trabajadores sumados a los estatales, los médicos y los judiciales. Es decir que practicamente la Provincia se vio paralizada ayer y hoy ocurrirá algo similar. 

Si bien desde el gobierno provincial optaron por agradecer a aquellos que no habían adherido al paro e intentaron dividir a los trabajadores en su lucha, los números reflejaron un importante acatamiento a la medida de fuerza. Cerca de un 90% adhirió a la decisión de sus representantes gremiales.

El porcentaje para el día de hoy se espera que sea similar o incluso mayor, teniendo en cuenta que se realizará la  movilización convocada a nivel nacional por la Confederación General del Trabajo (CGT). Asimismo, los sindicatos docentes definirán cuál será el plan de lucha que llevarán a cabo a nivel provincial. 

Lo antes señalado es una preocupación para el gobierno de Vidal, ya que este paro de 48 horas fue una adhesión a la medida convocada por CTERA ante la falta de convocatoria a una paritaria nacional que fije el piso salarial para todo el país. Es decir que aún no se ha realizado una medida de fuerza específica que rechace de manera concreta la oferta de la Provincia del 18% de aumento en cuatro cuotas. 

Docentes, estatales, judiciales y médicos buscan perforar el 18% de aumento propuesto por la administración provincial y para eso no encuentran otro camino que el de la lucha para ser escuchados.