El intendente de Olavarría, Ezequiel Galli, fue víctima de un delito informático y lo publicó en sus redes sociales para alertar a la población. De esta manera,  el mandatario informó sobre un nuevo tipo de “cuento del tío”. 

En este caso, las víctimas fueron el mandatario comunal y su esposa, a quien le hackearon la cuenta de Whatsapp. La persona que llevó adelante el delito informático, se hizo pasar por la pareja de Galli utilizando su número de teléfono. 

Cerca de las 10 de la noche de ayer, el intendente recibió un mensaje de su esposa en el que le pedía los números de una tarjeta de crédito. Galli le preguntó para qué los necesitaba y su interlocutor respondió que era "una sorpresa".

El jefe comunal no sospechó, dado que el mensaje le llegó del número de su pareja, y efectivamente envió la información que le habían pedido. Luego y durante al menos dos horas, el intendente recibió capturas de pantalla sobre su información bancaria, créditos y resúmenes de la tarjeta de crédito.

En ese momento, Galli se comunicó con la empresa prestadora de la línea, informó sobre lo sucedido e inmediatamente le asignaron otro número de teléfono a la esposa del intendente.