Mar del Plata denuncian que la barra brava de un equipo local actuó como fuerza de choque de la UTA para disipar una manifestación
Colectiveros se manifestaban para pedir el aumento del boleto y militantes para impedirlo, pero irrumpieron hinchas de Alvarado y hubo golpes y momentos de tensión
En la jornada de hoy, colectiveros de Mar del plata se congregaron en las inmediaciones del Concejo Deliberante local para exigir, con su presencia, a los ediles que efectivamente traten el aumento de los boletos de colectivo. Paralelamente, militantes pedían lo contrario y según denunciaron desde la organización Votamos Luchar, irrumpieron en la escena barras bravas del club, Alvarado y agredieron a los presentes para disipar la concentración.
El centro de la ciudad balnearia fue el escenario en el que se encontraron las dos posiciones sobre el aumento del boleto de colectivo. Por un lado, los choferes de la UTA que apoyan el aumento de boleto; por el otro, militantes de Votamos Luchar que rechazan la suba.
Los militantes, se concentraron en Mitre y 25 de Mayo para pintar colectivos que interrumpían el tránsito con las consignas que ellos defienden "no al aumento" y de repente comenzaron a divisar jóvenes con la camiseta del club de fútbol local, Alvarado, que estaban acompañando la manifestación en Luro e Irigoyen, frente a la Municipalidad.
Uno de los integrantes del Votamos Luchar, Ezequiel Francomano, le contó a Diagonales que mientras realizaban las pintadas percibieron que se acercaban "los barra brava de Alvarado" con una actitud particular que los instó a salir corriendo pero en ese entonces, comenzaron a agredirlos físicamente. "Nos están reprimiendo", contó en ese mismo momento.
Aparentemente, los hinchas habrían sido enviados por el Secretario General de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Sergio Medina, para dispersar la "contra-manifestación" y de ese modo alcanzar su objetivo que el Concejo Deliberante de luz verde para incrementar el pasaje de colectivo.
Más tarde, los agresores atacaron a un periodista de Canal 10 de esa ciudad, Samuel Zamorano y lo golpearon simplemente por cumplir con su rol, y filmar lo que acontecía. Al respecto explicó que "me identifiqué como periodista, pero no les importó" y detalló que le "pegaron algunas piñas y palazos cuando me tiré al piso", pero "por suerte estoy bien".