Desdoblamiento: "Solo busca sacar ventaja política", definió el Defensor del Pueblo bonaerense
A través de un comunicado, Guido Lorenzino desestimó el plan de adelantamiento de elecciones y llamó a discutir los comicios "con seriedad" para que no "quede bajo especulaciones coyunturales".
La Defensoría del Pueblo de la Provincia manifestó su rechazo al proyecto de desdoblamiento electoral que se encuentra en plena discusión de cara a los comicios de este año. El titular del organismo, Guido Lorenzino, planteó el descargo a través de un comunicado que presentó ante la Bicameral de ayer y fue tajante al definir que la iniciativa respondía a una "necesidad de sacar ventaja política".
En el texto, el Defensor señaló: "(El desdoblamiento responde) una simple necesidad de sacar ventaja política, que nada tiene que ver con la búsqueda de un verdadero cambio del sistema democrático, o mejorar la manera en que votamos". Durante la Bicameral que sentó a discutir a 9 intendentes sobre el tema, las posiciones fueron variadas en el arco que incluyó a representantes tanto de Cambiemos, como del massismo, del PJ o el peronismo fiel a CFK.
En el marco de la discusión que encararon legisladores e intendentes bonaerenses, Lorenzino fue categórico y expresó: "La gente merece que sus representantes discutan seriamente cuál es el mejor modo de sufragar, que no quede bajo especulaciones coyunturales, debiendo darse previamente un profundo y amplio debate". El posicionamiento del Defensor del Pueblo fue recibido con diversos ánimos en el debate que divide aguas sobre la posibilidad de desenganchar a Provincia de Nación en las urnas.
En esta línea, Lorenzino remarcó que el desdoblamiento impondría en "pleno contexto de crisis" un sistema "más costoso y con las mismas falencias". En ese aspecto coincidió con lo expuesto en la cumbre de intendentes del PJ que tuvo lugar en Azul, en paralelo con la Bicameral, donde los alcaldes sostuvieron que el adelantamiento representaría "un despilfarro de $3.200 millones" por parte de Vidal.
En tanto, desde el sector de alcaldes plegados al kirchnerismo fueron más a fondo y definieron que el plan de desdoblamiento representa un "fraude electoral encubierto".