El municipio del norte de la Provincia de Buenos Aires Salto vive nuevamente momentos preocupantes. Tras las históricas inundaciones de los últimos años, el distrito ya tiene más de 400 evacuados y el Río Salto superó los nueve metros lo que obligó a la gobernadora María Eugenia Vidal a visitar la zona para tomar conocimiento de la situación.

El agua en la Provincia es un problema que viene creciendo y son varios los distritos que se ven afectados ante cada lluvia, que revalsa los ríos, anega rutas y en algunos casos se inundan zonas urbanas, lo que deja pérdidas económicas y personales.

En 2015, Salto vivió la peor inundación de su historia cuando el río Arrecifes llegó a los 9,30 metros y dejó todo un barrio debajo del agua. En aquella oportunidad hubo más de 1.000 vecinos evacuados o autoevacuados y 5.000 vecinos afectados.

Ahora, la situación es similar y el agua continúa subiendo. Está cortada la ruta 32 a la altura del puente del Hotel Rio y en Pergamino, que se encuentra al norte de Salto, se preparan para un avance del agua que podría volver a perjudicarlos. A pesar de que cortaron el alerta vigente, miran de reojo la situación hídrica.

El intendente Ricardo Alessandro describió el fenómeno que azota nuevamente a la ciudad y donde parece que muy de a poco todo se va llenando de agua. A Saltociudad, el jefe comunal dijo que "estamos muy preocupados y trabajando en la evacuación en seco de las familias que pueden verse afectadas por la crecida del río. Desde Rojas nos mantienen informados sobre el agua que estaría viniendo y es mucha".

El Gobierno Nacional se comprometió a invertir mil millones de pesos para prevenir inundaciones, luego de una reunión mantenida entre los ministros del Interior, Obras Públicas y Vivienda, Rogelio Frigerio, y de Agroindustria, Ricardo Buryaile; el secretario de Interior, Sebastián García De Luca; y el subsecretario de Recursos Hídricos, Pablo Bereciartua.