Garro busca desligarse de sus razias contra el trabajo sexual y ahora sostiene que “es legítimo”
Tras una gestión signada por fuertes acciones represivas contra la comunidad trans y de trabajadoras sexuales, el intendente platense busca adoptar un perfil de conciliación
A pesar de haber iniciado su gestión municipal afirmando que “los travestis andan en bolas y están en todo el tema de la droga”, el intendente platense Julio Garro ahora querer desligarse de su historial de acciones represivas contra las zonas rojas de la ciudad y hasta declaró que el “trabajo sexual es legítimo”.
En declaraciones brindadas este martes a 221 Radio, Garro volvió a insistir sobre su agenda de lucha “contra el narcomenudeo” pero decidió separarlo del ámbito del trabajo sexual, un criterio que marcó buena parte de sus políticas de seguridad en la ciudad. A la instalación de cámaras de seguridad, luces y posta de vigilancia en las zonas lindantes a 1 y 66, se han combinado con un aumento de los últimos años de detenciones y razias permanentes a la población traversti de la zona.
“Queremos terminar con el narcomenudeo. El trabajo sexual es legítimo, pero no queremos que se cruce con la droga y para eso tienen que estar seguras”, expresó el mandatario macrista, quien ahora busca mostrar un perfil de conciliación dentro del debate por el trabajo sexual callejero en la capital bonaerense.
En ese sentido, el jefe Comunal expresó que “el traslado de la zona roja no debe pasar de este año. Tiene que ser un lugar iluminado, seguro y que nadie pueda quejarse ni se sienta molestado”, en relación a los múltiples debates sobre el tema en la ciudad.
Cabe señalar que han sido múltiples las críticas de organizaciones de la diversidad hacia el proyecto de Garro sobre la mentada zona roja del casco céntrico, por considerarlo un plan para “crear un ghetto” para la comunidad trans. Este punto ha sido coincidente con el rechazo al discutido Código de Convivencia que impulsa el macrismo platense, que no sólo limitaría la presencia en el espacio público de trabajadores callejeros, sino que hasta criminalizaría a los sectores más vulnerables dentro de la ciudad.
“Le decimos No al gueto de Garro respecto a la creación de una zona roja para que lxs travestis y trans ejerzan la prostitución. Porque estas medidas atrasan como sociedad volviendo a criminalizar a las personas travestis y trans limitando el uso del espacio público y se desentiende sobre la implementación de políticas públicas, en relación al cupo laboral travesti trans”, expresó el comunicado leído durante la 6ta Marcha de la Gorra, desarrollada en 2021 en la capital bonaerense.
En tanto, los diversos operativos y políticas de seguridad desplegados por Garro a lo largo de su gestión dejaron la fuerte impronta de la figura “narcotravesti” que el propio intendente supo instalar en su primera llegada al poder.
“No se me ocurre darle trabajo a un travesti”, fueron las palabras del propio Garro durante una entrevista radial a la misma emisora platense 221, en plena etapa de campaña en 2015, y remarcó que lo que sí podría hacer es “darles una mano desde lo psicológico, desde lo médico”.
“Si avalo eso, tendría que avalar a los delincuentes. Los travestis andan en bolas, y están también en todo el tema de la droga”. Las palabras de Garro generaron un repudio inmediato en su momento y sellaron el perfil represivo que luego adoptaría en su gestión.