Cuando parecía que las posiciones se acercaban entre las tres patas del peronismo bonaerense en pos de una unidad hacia los comicios de este año, un nuevo bombazo sacudió este miércoles el mapa provincial. La senadora kirchnerista Teresa García, que responde directamente a CFK, presentó un proyecto en el Senado bonaerense para establecer la concurrencia entre las elecciones para cargos provinciales y nacionales.

En concreto, esto significa prácticamente una declaración de guerra contra el gobernador, ya que bloquearía la potestad del Ejecutivo para fijar la fecha de las elecciones provinciales. Kicillof está decidido a desdoblar y encarar una campaña centrada en la gestión provincial y en la que la agenda se centre en las discusiones bonaerenses. Si la Legislatura aprobase el proyecto de García, la fecha de las elecciones quedaría unificada para el día de las nacionales.

El proyecto kirchnerista “dinamita los puentes que estaban avanzando en el diálogo”

Este planteo es defendido a ultranza por el kirchnerismo, con CFK a la cabeza, bajo el concepto de que es necesario nacionalizar la elección para discutir con el modelo de Milei. En el kicillofismo el planteo es que esa discusión tiene que darse desde el contraste del modelo de gestión bonaerense con la deserción del Gobierno nacional de sus responsabilidades. 

Con las diferentes posturas sobre la mesa, los diálogos entre el kicillofismo, el kirchnerismo y el Frente Renovador pasaron de un pantano total a ciertos avances en las últimas semanas. La intención del peronismo bonaerense es arribar a una solución consensuada que evite una guerra cuyos efectos pueden ser incalculables. Sin embargo, en el entorno del gobernador la nueva movida del kirchnerismo cayó como un bombazo que aleja esa posibilidad.

El proyecto kirchnerista “dinamita los puentes que estaban avanzando en el diálogo”

En La Plata interpretaron el proyecto presentado por García como “una decisión intempestiva que dinamita los puentes que estaban avanzado en el diálogo”. Esos avances, a su vez, venían dándose “en pos de la unidad”. Ahora el escenario se reconfigura y habrá que ver cuánto sigue apretando el cristinismo para trabar la posibilidad del desdoblamiento. 

En ese sentido, el tuit de Mayra Mendoza replicando el proyecto de García permite avisar de una conflictividad creciente: “Coherencia para defender a nuestro pueblo de tanta irracionalidad”, expresó la intendenta de Quilmes y referenta de La Cámpora en relación al planteo de la senadora. La irracionalidad, se desprende, sería en este caso el desdoblamiento de las elecciones bonaerenses de las nacionales por primera vez desde la vuelta de la democracia.

X de Mayra Mendoza ☀️

Kicillof, por su parte, sigue teniendo en su poder la decisión de desdoblar, y si aún no avanzó en ese sentido es porque en el Gobierno bonaerense apelaban a un acuerdo parlamentario para suspender primero las PASO. El riesgo está en que si el gobernador desdobla primero y luego La Cámpora y Frente Renovador no ponen los votos en la Legislatura para la suspensión de las primarias, los bonaerenses deberán ir a votar tres veces: PASO y generales para los cargos provinciales, y generales para los cargos nacionales.

Claramente esto representaría un alto costo para Kicillof, tanto político como económico y logístico. Sin embargo, cerca del gobernador sostienen que si bien “no hay que tomar decisiones a las apuradas”, tampoco puede descartarse ningún escenario. Y le cantan retruco a sus aliados del peronismo, dejando en claro que la decisión por el desdoblamiento está tomada: “Serán 3 elecciones si así lo quieren”.

Legisladores del Movimiento Derecho al Futuro, el flamante armado del kicillofismo, presentaron por su cuenta un proyecto para suspender las PASO y fijar el cronograma electoral. Lo hicieron el jueves pasado, cuando en una sesión que podría haber decidido la suspensión, los diputados que responden a Máximo Kirchner y los de Sergio Massa no dieron quórum, demorando una definición central para el gobernador. De esta forma, con el de García ya son 3 los proyectos en la Legislatura que proponen la suspensión de las primarias, ya que el massista Rubén Eslaiman había presentado uno propio en acuerdo con Kicillof. 

El proyecto kirchnerista “dinamita los puentes que estaban avanzando en el diálogo”

Ayer también se conoció una carta emitida por el radicalismo bonaerense, en la que el partido se manifestó a favor de las suspensión de las PASO y del desdoblamiento de los comicios, argumentando en línea con Kicillof sobre la necesidad de centrar el el debate electoral en una agenda bonaerense y no nacionalizar las discusiones. Así, la suspensión de las primarias es ya un consenso generalizado entre todas las fuerzas de la PBA, ya que el PRO y los libertarios se manifestaron también en esa línea.

El debate de fondo entonces pasa ahora por el desdoblamiento, y la clave estará en la posibilidad de que el peronismo se ponga de acuerdo. Si eso no sucede, Kicillof podrá desdoblar, arriesgándose a pagar el costo de que la PBA sea uno de los únicos distritos con primarias en este 2025. O podrá terminar aceptando la definición de CFK de nacionalizar los comicios provinciales y que se vote una sola vez en octubre. De fondo, la clave que parece estar jugándose es hasta qué punto la ex presidenta presionará al gobernador para imponer su conducción única en el peronismo, y si Kicillof terminará de emanciparse completamente de los condicionamientos de la titular del PJ. 

Queda poco tiempo para una decisión trascendental para el futuro del peronismo. Luego del vacío del cristinismo en la sesión del jueves pasado y el proyecto presentado este martes, la definición de ese sector parece ser inamovible y la pelota está en la cancha del gobernador.