El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, fue ungido esta tarde como presidente de la Federación Argentina de Municipios (FAM), que nuclea a los intendentes peronistas de todo el país. El acto se celebró en el auditorio de Tecnópolis, desde donde el también vicepresidente del PJ bonaerense aprovechó para pedirle al Gobierno dejar de lado las internas y apostar “a la unidad programática” para volver a “generar esperanza, como lo hicimos en 2019”. También hizo de portavoz de un reclamo compartido con la mayoría de los jefes comunales del conurbano: una mayor interlocución política con la Rosada. “Llegó la hora de escuchar a los intendentes y a las intendentas”, pidió. 

“Esta nueva conformación de la FAM es un símbolo del federalismo: están representadas absolutamente todas las provincias argentinas”, dijo Espinoza mientras señalaba el auditorio. “Pero también de la búsqueda de acuerdos. Los intendentes dimos un ejemplo de consenso y de unidad. No fue magia”, disparó, en clara referencia al reclamo de varios de sus compañeros de gestión que se agarran la cabeza cada vez que la interna del Gobierno escala en intensidad, sobre todo en un contexto muy complicado para dar respuestas concretas y efectivas ante la inflación y la situación económica de las familias más humildes. 

“Nuestra vocación y nuestra tarea es escuchar la voz del pueblo, nos dedicamos hacemos eso, incluso en nuestras casas, cuando salimos bien temprano a la mañana y cuando volvemos, bien tarde. Por eso queremos ser el puente entre los vecinos y los lugares de decisión”, pidió, en un mensaje directo hacia la Rosada. 

Ese reclamo de una mayor escucha está sobre la mesa desde fines de marzo, cuando el propio Espinoza reunió en su municipio a los intendentes del Frente de Todos de la primera y la tercera sección, encuentro del que salió un documento muy duro contra el Gobierno, con dos ejes centrales: el combate de la inflación en los territorios (con los recursos necesarios) y la exigencia de un canal de diálogo político con la Rosada. 

Por eso, el marco de la asamblea de la FAM era el ideal para alzar la voz. Siguieron el discurso desde la fila el Jefe de Gabinete, Juan Manzur y el ministro de Interior, Wado de Pedro, los dos dirigentes de Nación más cercanos. El gobernador de la Provincia, Axel Kicillof, llegó para el cierre. 

También pasaron por el acto el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, y varios de los intendentes que habían participado de la reunión de marzo en La Matanza, desde Mayra Mendoza (Quilmes) hasta Lucas Ghi (Morón). No faltaron Leo Nardini (Malvinas Argentinas, hoy ministro de obra pública de la Provincia) ni Gabriel Katopodis, ministro de Obras Públicas de Nación. 

Hubo, sí, una ausencia resonante: la del ex intendente de Hurlingham y actual ministro de Desarrollo Social, Juanchi Zabaleta. El representante del “albertismo” en el mundo de los jefes comunales perdió la batalla interna por el cargo con el propio Espinoza.   

“Estoy estirando para esperar a Axel”, bromeó el intendente de La Matanza cuando se notaba que el discurso se extendía más de lo necesario. Al jefe comunal se lo vio locuaz y a los abrazos. “Axel llega en diez, te escuchó todo el mundo”, dijo más tarde cuando uno de sus asistentes desde la primera fila confirmaba que el gobernador estaba en camino. También aprovechó para agradecer públicamente a Wado De Pedro: “Sin vos hoy no estaría acá”, dijo. 

Kicillof, a su turno, devolvió gentilezas. “Quiero agradecer la resistencia que los intendentes encabezaron durante los años del macrismo”, dijo y nombró a su vice, Verónica Magario, quien presidió la FAM entre 2016 y 2019. “Sepan que para lo que necesiten estamos”, agregó el gobernador. 

“Después de cuatro años del peor gobierno de la historia, después de la pandemia y ahora a pesar de la guerra, la economía crece. El país crece, pero todavía no  logramos ver ese crecimiento en todo su esplendor. Vamos a hacer todo lo posible para que ese crecimiento llegue a todos y todas”, remarcó Espinoza. 

“Cometimos errores, aprendimos y los corregimos. Así ganamos 2019 y eso es lo que tenemos que volver a hacer. Los trabajadores tienen que unirse, como decía Perón. Vamos a defender todos los días al gobierno de Alberto Fernández y de Cristina, que hizo ese gesto de corazón para que el pueblo pueda volver a gobernar la Argentina. Estamos en eso, hay que salir del desánimo. Vamos a sacar a la argentina de este momento. Y lo vamos a hacer con acuerdos programáticos y unidad de acción”, cerró.