Frente a empresarios argentinos en el Coloquio de IDEA en Mar del Plata, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado Federico Sturzenegger solicitó a los presentes que “no pidan mas bajas de impuestos” y que, en cambio, reclamen una reducción mayor del gasto público. 

“El superávit se logró con baja de gasto, hay impuestos que han bajado incluso. Como hace rato que Argentina no tiene aceso al mercado, cada peso que el gobierno gasta alguien lo paga. Lo paga con impuestos o emisión monetaria. Cada peso que bajamos es un peso menos que el sector público le pide la sector privado”, argumentó.

“No nos pidan más bajar impuestos, porque si nos piden y el gasto se mantiene igual, a alguien se lo tienen que cobrar. Pídannos que bajemos el gasto. Por favor destierren y tachenlo, apóyennos en ese ejercicio de baja de gasto”, insistió.

El funcionario aseguró que la adminstración de Javier Milei redujo en un 30% las erogaciones totales del Estado nacional en diez meses y adelantó que el próximo paso será aplicar una “deep motosierra” (motosierra profunda). 

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Sturzenegger aseguró que para finales de 2024 el gasto público representará alrededor de 33 puntos del PBI, lo que implicaría una caída de siete puntos desde 40% el año anterior. “Estamos hace años hablando de que el gasto público es alto y que en su primer año de gestión hizo que el gasto baje a 33 puntos. Eso en sí es impresionante”, celebró y pidió aplausos a los empresarios.

Sin embargo, el ministro sostuvo que en los últimos meses ya se efectivizaron bajas de impuestos y enumeró: el impuesto inflacionario, el impuesto PAIS en un contexto de superávit, Bienes Personales, se ha extendido el monotributo lo que implica una baja en la carga tributaria, aranceles, ITI, costos de trámites y también la deuda pública". 

Sin embargo, lo cierto es que a diferencia de lo prometido en campaña, el Gobierno subió los impuestos para la mayoría de los ciudadanos. A las pocas semanas de la asunción de Milei, el Gobierno eliminó el programa “Compre sin IVA” que generaba la devolución del 21 por ciento del IVA de los productos de la Canasta Básica. 

A su vez, en el trancurso de los últimos meses, el Estado nacional subió los impuestos sobre el combustible, restitutó el impuesto a las Ganancias sobre un millón de trabajadores, duplicó la cuota del monotributo, aumentó las tasas aeroportuarias, las retenciones a las economías regionales, entre otros.

Incluso, en la “estimación de los recursos tributarios” del proyecto de Presupuesto 2025, Milei ratifica que el plan del Ejecutivo es subir los gravámenes el año próximo. En esta hoja de ruta, el Gobierno planea subir la presión impositiva del 22,37% del PIB en 2024 a 22,92% en 2025.

El Impuesto a las ganancias pasaría de de 4,42% del PIB en 2024 a 5,05% del PIB en 2025; los Derechos de Exportación (sector agrícola y productivo), de 0,96% a 1,43%; el Impuesto a los Combustibles, del 0,38% al 0,73%; y el Monotributo, del 0,04% a 0,09%. 

Por otro lado, respecto al ajuste futuro, Sturzenegger no brindó demasiados detalles pero lanzó un anticipo: “Hicimos un ejercicio: ¿Qué debería hacer un gobierno liberal? Dar créditos no es una tarea del gobierno, es del sector financiero”. 

“Si lo puede hacer el sector privado, no tiene por qué hacerlo el sector público”, añadió Sturzenegger entonces defendió lo que describió como las “dos ideas centrales” del “pensamiento de Milei”: el equilibrio fiscal y la libertad económica. 

"Subyacente a estas dos es el el convencimiento del derecho de propiedad, que es la única manera de tener una sociedad rica y próspera. No puede pasar con inestabilidad macro y que el Estado no te deje hacer uso de ese derecho”, aseveró.