Marche una docena de viajes al exterior para el presidente Javier Milei, quien tiene planeado concluir el miércoles argentino a bordo de un avión con destino a Francia en medio de una rimbombante polémica y en plena crisis con su vice Victoria Villarruel. La gira tendrá al mandatario en suelo parisino hasta el sábado, con las principales paradas de la gira establecidas en la inauguración de los Juegos Olímpicos (JJOO) y, al día siguiente, en una reunión bilateral con su par local Emmanuel Macron.

Doce travesías al exterior en siete meses y medio de mandato es el parte oficial de la actividad turística del presidente, que ha logrado sumar millas aéreas por montones durante el comienzo de su período al frente del Poder Ejecutivo y guarda entre sus destinos favoritos a Europa. El viejo continente lo recibirá mañana por la tarde para asistir, el viernes, a la ceremonia de apertura de los Juegos, donde será acompañado por su hermana y Secretaria General Karina Milei y por el secretario de Ambiente, Turismo y Deportes Daniel Scioli.

Curiosamente, el exgobernador bonaerense no ha confirmado más detalles sobre su agenda personal en París. En cuanto a “El Jefe”, entretanto, se espera que participe junto al mandatario nacional del encuentro con su homólogo francés Macron también el viernes. La cita, que será la primera bilateral de Milei en su mandato, se desarrollará en el Palacio Eliseo de París y no se extenderá por más de una hora, ya que para más tarde el presidente tiene pautado mantener una cumbre con empresarios del país galo.

De más está decir que la gira se encuentra marcada por un fuerte escándalo que agitó las relación diplomática entre los dos estados en los últimos días. Todo comenzó con la canción que entonó la Selección Argentina de fútbol tras obtener el título de la Copa América 2024: el cántico incluía frases racistas contra los jugadores y la población francesa y provocó un sinfín de repercusiones que inundaron pronto el terreno político. En ese marco, la más resonante de las consecuencias se vio en un tweet de la vicepresidenta Villarruel.

“Ningún país colonialista nos va a amedrentar por una canción de cancha. No vamos a tolerar que nos impongan una forma de vida”, expresó la dirigente liberal en un mensaje que provocó rispideces en el cuerpo diplomático parisino. Enseguida, los Milei se despegaron del comentario e incluso Karina pidió disculpas formales ante los representantes franceses. El episodio fue la gota que colmó el vaso de las internas entre la vice y el presidente, que por el momento “no se hablan” y mantienen agendas separadas mientras las diferencias afloran.