La cruzada de Mauricio Macri y Patricia Bullrich para sumar adhesiones a su plan de apoyo al candidato a la presidencia por La Libertad Avanza (LLA) Javier Milei, luego de la noche del “pacto de Acassuso”, deambula por la cornisa.

Reina una mirada escéptica y, en algunos casos, de rechazo directo ya no solo entre los  jefes comunales de la Provincia de Buenos Aires que responden a la UCR, sino también en el mismísimo PRO, a los intentos de ambos dirigentes promover respaldos grandilocuentes por el líder ultralibertario.

De lo recogido en charlas informales y también on the record por Diagonales queda en limpio un mensaje: los intendentes ven que no tienen necesidad de posicionarse y dejan ese espinoso asunto a la “política de más arriba”.

El escándalo y la convulsión política desatada por el descalce macrista de Juntos por el Cambio (JxC) generó un parte aguas a las pocas horas de conocerse el acuerdo del martes por la medianoche. Fueron los dirigentes radicales a nivel nacional, encabezados por Gerardo Morales y Martín Lousteau, los que acumulaban fuertes tensiones con el ala de los “halcones” y primero pusieron el grito en el cielo.

Junto con el diputado nacional Emiliano Yacobitti, fueron los principales apuntados por la crítica del expresidente Macri, que los acusó de “tranzar” con el ministro candidato de Unión por la Patria (UP) Sergio Massa. Esto le valió un comunicado de la UCR nacional que reforzó su llamado a mantenerse “sin cooptación por parte del kirchnerismo ni de la extrema derecha”.

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Unión Cívica Radical on Twitter / X

En su llamado a mantener la “neutralidad” entre Massa y Milei, durante la conferencia de prensa en el comité Nacional de la calle Alsina, “echaron” a Macri y Bullrich de JxC. Además se mostraron furiosos porque la excandidata presidencial se había arrogado ser la portadora de los más de seis millones de votos que cosechó la coalición el último domingo.

A este planteo de equidistancia se sumaron otras figuras nacionales de la UCR más ligadas con los “duros” del PRO, como el gobernador electo de Mendoza Alfredo Cornejo y el diputado cordobés Mario Negri. Desde esta ala, plantean mayor distanciamiento con respecto de la figura de Massa. Pero la plana nacional radical parecería haber cerrado filas, a pesar de esta disparidad en el énfasis de la delimitación con el candidato de UP.

Por el lado del PRO, no todos siguieron a Macri y Bullrich. Ya son varios los dirigentes nacionales del bando “moderado” que se pronunciaron a favor de la neutralidad en la contienda presidencial. El ex contrincante presidencial de la interna de JxC Horacio Rodríguez Larreta y la exgobernadora bonaerense María Eugenia Vidal son las caras visibles del enojo por la táctica de los “halcones” de su espacio.

Se les suman a estos representantes partidarios en la negativa a inclinarse por Milei el nuevo grupo de diez gobernadores cambiemistas que anunciaron su preferencia por la neutralidad.

En Diputados, con Cristian Ritondo a la caza de adherentes “libertarios por el cambio”, se estima que sería la mitad de los 93 nuevos representantes legislativos los que apoyarían la cruzada mileista. En el Senado, las aspiraciones de Macri y Bullrich son más esquivas: solo tres de los seis integrantes de la bancada de JxC dejó a un lado la neutralidad para apoyar a LLA.     

El sinsabor que quedó, no solo para el radicalismo si no también para varios PRO, también llegó al territorio bonaerense.

MACRI Y BULLRICH NO CONSIGUEN ADEPTOS EN LA PROVINCIA

Tal como se esperaba, luego del pronunciamiento en contra del apoyo de JxC a Milei por parte de la UCR a nivel nacional, restaba esperar que los integrantes bonaerenses del partido “boinablanca” se plegaran al pie de la letra del documento.

Es el caso de Miguel Fernández, excandidato a vicegobernador en la fórmula de JxC con el “halcón” de confianza de Macri, Néstor Grindetti. Fernández también es Presidente del Foro de Intendentes partidario e intendente de Trenque Laquen y se desmarcó de los dos oponentes del desempate de noviembre.

“No voy a acompañar ninguna de las opciones que referencia a Massa y Milei. La sociedad nos otorgó como fuerza política el mandato de ser oposición a nivel provincial y nacional”, destacó. Consultado por Diagonales, Fernández avizora un “nuevo y más horizontal” JxC, ya sin la presencia de Macri y Bullrich. “Sin dudas lo veo más transversal y de pares”, planteó. Además, al cierre de esta nota, comentó que no había tenido oportunidad de hablar con su ex socio Grindetti sobre esta cuestión.

Por el lado de los intendentes electos para nuevos cargos a partir del 10 de diciembre, la situación gira en la misma órbita: prescindencia absoluta a tomar partido. Esto es compartido por parte de los 27 jefes comunales radicales, tanto del Conurbano, como del resto de latitudes de la Provincia.

En cuanto al PRO bonaerense, se estimaba que con la influencia de Grindetti y Ritondo, no tardaría en florecer un buen número de aliados para la campaña del conjunto libertario en el balotaje contra Massa. Pero allí también se respira neutralidad.

De las 15 intendencias bonaerenses que el partido amarillo pudo hacerse en las elecciones del domingo pasado, solo Fernanda Astorino de Capitán Sarmiento, manifestó estar a favor de Milei. El caso de Astorino tiene relación directa con la posición del intendente actual del partido y extitular de la cartera de Energía de Macri, Javier Iguacel.

El también exadministrador general de Vialidad Nacional apoyará a Milei, y no solo mantiene buen vínculo con Macri. Casi entra como candidato a gobernador bonaerense en JxC, hasta que Bullrich se inclinó por Grindetti, y su nombre también se había considerado para las listas de LLA antes de las PASO.

Diagonales consultó en el equipo de la jefa comunal electa de Vicente López, Soledad Martínez, y la respuesta fue la misma que en el caso de los radicales. “(Soledad) no se pronunció al respecto, pero está en línea general con el resto de los intendentes. Los intendentes, en general, no tienen necesidad de salir a apoyar a nadie, el gobernador ya está asignado y nuestra candidata presidencial lamentablemente perdió. Hoy hay más rosca política por arriba que por abajo”.

Cabe destacar que Martínez cuenta con la plena confianza de Jorge Macri, que saltó de la intendencia de ese partido hacia la Ciudad de Buenos Aires y también fue electo como jefe de Gobierno. La palabra de la sucesora del primo de Mauricio es esperada para determinar cuál es la postura del sector más afín al expresidente en el Conurbano. El alcalde porteño electo para suceder a Larreta el 10 de diciembre tampoco se expresó sobre este caliente debate interno

Los espacios dentro de JxC que responden a otros signos políticos, como el peronismo republicano, se mantienen en esta misma línea de abstención. Un ejemplo de esto ocurre en San Miguel.

Allí, el intendente electo Jaime Méndez, aliado del actual senador provincial y exjefe comunal Joaquín De La Torre, optó por no meterse en la polémica nacional y sigue sin pronunciarse hasta que “todo se reacomode”. De La Torre también había sido barajado como posible candidato a gobernador y se estimaba que ambos podrían haber tomado partido en favor de la causa macrista. Pero nada de eso sucedió.

Incluso desde el entorno de De la Torre tuvieron que aclarar que la visita de Sergio Massa esta semana a San Miguel para la inauguración de una escuela técnica no tenía que ver con ningún tipo de acercamiento de Méndez a UP. “Lo de Massa fue un acto institucional nada más”.

En la lectura entre líneas, quedaba claro que lo de “tranzar” con el ministro candidato, Macri solo se lo endilgaba a la UCR.