Caputo anunció una extensión del antiguo acuerdo con el FMI por 4700 millones de dólares
El ministro de Economía y el titular del Banco Central Santiago Bausili celebraron que el organismo internacional desembolsará más dinero para cumplir con los esquemas de pago por los próximos cuatro meses. Omisión de la alerta social que remarcó el FMI en su comunicado oficial y amenaza si no se aprueba la ley “Ómnibus”.
El oficialismo festeja el acuerdo por 4700 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en el marco de la séptima revisión de facilidades extendidas que la entidad realiza con la Argentina.
El equipo técnico del organismo, que se encuentra en la Argentina desde el viernes pasado, enviará la recomendación para que el board defina el préstamo a finales de enero con “las nuevas metas”. Pero es solo cuestión de días para que se llegue a buen puerto y el presidente Javier Milei, que no participó de ninguno de los encuentros con los emisarios del Fondo, sonría por unas horas.
Con esta suma el Gobierno afrontará las deudas de capital de los meses de diciembre del año pasado, y los de enero y abril de este 2024. Se trata de lo adeudado con la CAF por USD 920 millones, que se le pidieron prestado para pagar los vencimientos de diciembre. También se usara para abonar a fin de mes USD 1.950 millones y una suma similar en abril. A este número, se le suman los vencimientos de intereses de febrero, pero esto nos será afrontado con dinero de este acuerdo.
El ministro de Economía Luis Caputo y el titular del Banco Central Santiago Bausili señalaron en conferencia de prensa que este “no es un acuerdo nuevo”. “Se ha reflotado el acuerdo anterior que estaba caído por el incumplimiento de las metas”, expresó Caputo en el comienzo de su alocución.
Inmediatamente después, “Toto” buscó redoblar la apuesta e introdujo la variable de ajuste “extra” que se comprometió a llevar adelante.
“Reflotar este acuerdo requería un mayor compromiso para compensar la pérdida de credibilidad, en particular ocurrida los últimos dos trimestres”, aseguró el exministro de Mauricio Macri, que también aclaró que tampoco se trata de “plata nueva” el acuerdo contraído.
“Un acuerdo nuevo hubiera implicado mucho mayor tiempo y dada la situación de crisis por un pago al Fondo mismo a la semana de haber asumido, no estaba la plata. Entonces la alternativa más viable fue lo que hemos hecho para garantizar que no haya sobresaltos en los próximos cuatro meses”, se justificó Caputo, que no descartó que el organismo internacional pueda aceptar “un nuevo acuerdo” más adelante.
Caputo volvió a con su prédica sobre la “adicción” al gasto público y al déficit fiscal, y destacó que hay “plena confianza” de que las medidas de ajuste de shock los conducirán “por el camino correcto”.
El presidente del BCRA Bausili, que en principio no iba a formar parte de la conferencia, indicó que “la mayoría” de las medidas tomadas por Milei desde su arribo a la Casa Rosada “van en línea con los objetivos de un acuerdo como este”.
Y allí enumeró los puntos de acuerdo entre las visiones del Gobierno y del FMI: “la reconstitución del balance del BCRA, la recomposición de reservas, el ancla fiscal como centro del balance general macroeconómico, y que esto nos lleve a una reducción de la inflación con equilibrio macroeconómico”.
Caputo remarcó que la Ley Ómnibus de Reforma del Estado “sienta las bases para la construcción del país”. “Desde que perdimos esas bases, somos un país pobre”, enfatizó, y reiteró que las medidas que Milei tomó desde su asunción es lo que la sociedad “acompaña”. “La duda es si los políticos van a estar a la altura de las circunstancias”, chicaneó.
Además confirmó la reunión de su cartera con los bancos en las que se “exploraron posibilidades de administración de pasivos” y tanto él como Bausili se desentendieron cuando fueron indagados por la situación de las jubilaciones, vapuleadas por la inflación. “Nuestra intención es proteger a los jubilados y no vamos a permitir que caiga su poder adquisitivo”, mantuvieron.
“Se alcanzaron entendimientos sobre un conjunto reforzado de políticas para restaurar la estabilidad macroeconómica y volver a encarrilar el programa actual, ya que los objetivos clave del programa no se alcanzaron por amplios márgenes debido a los graves reveses políticos del gobierno anterior”, informó el Fondo en su comunicado oficial, en línea con lo replicado por Presidencia.
Pero la diferencia es en lo que callan. El FMI publicó en su comunicado un apartado que desde La Libertad Avanza obviaron. En el texto del organismo señalan que las condiciones sociales en la Argentina van a empeorar, para luego, eventualmente, mejorar.