Desde su despacho en el Senado de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner responde a la sentencia adoptada por los jueces Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso que decidieron condenarla a seis años de prisión e inhabilitación perpetua de cargos públicos por el delito de defraudación a la administración pública. 

“Yo, inocentemente hablé antes de ‘lawfare’ y ‘partido judicial’, pero esto es algo mucho más simple. Esta condena confirma la existencia de un Estado paralelo, de una mafia judicial”, lanzó la ex mandataria. 

“Yo no soy ni voy a ser mascota del poder así me condenen no a seis, sino a veinte años”, expresó desafiante. Además, puso fin al misterio sobre qué hará el próximo año. "No voy a ser candidata a nada en 2023. Termino el 10 de diciembre y me voy”, exclamó. 

La vicepresidenta Cristina Fernández sostuvo que tal cual lo había dicho, la sentencia en su contra "ya estaba escrita". "No es que fuéramos clarividentes, ni adivinos", aclaró, "pero si una causa en la cual un juez, el inefable Ercolini, se había declarado incompetente luego de una denuncia de diputados de la oposición por obras en Santa Cruz y la enviara a la provincia, y luego, 8 años después, la resucita cuando llega el Gobierno de (Mauricio) Macri, y las 51 o 49 obras que había mandado al sur, las trae de nuevo, aun habiendo sido sobreseídas, está claro que la idea era condenarme".

Respecto de la condena por defraudación a la administración pública en el marco de la adjudicación de 51 obras viales en la provincia de Santa Cruz entre 2003 y 2015, Fernández señaló: “Dicen que el delito lo cometí a través de la sanción de leyes. Yo no legislo, para eso están los diputados y los senadores. Y el Presidente de la República tampoco administra ni ejecuta el presupuesto”. 

"A lo largo del juicio tampoco se probó ninguna de las mentiras de los alegatos histriónicos de los fiscales. A tal punto que cuando les tocó replicar las pericias y los testimonios a lo largo del juicio, no pudieron replicar absolutamente nada", afirmó. 

Por otro lado, la ex mandataria insistió con la existencia de una mafia judiciales y aseguró que la confirmación de ello fue la filtración de un viaje de funcionarios porteños, magistrados, fiscales y exagentes de inteligencia a Lago Escondido y compartió textuales de la conversación. 

"Me condenan por 

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