Con planes, pero “sin intermediarios”: JxC definió la política social de un potencial gobierno en 2023
La plana mayor de la oposición, sin Macri, definió los ejes centrales de lo que sería su política social si vuelve a la Rosada. Hubo “consenso” entre Larreta, Morales, Pichetto y Bullrich.
Reunida en La Matanza y sin Mauricio Macri, la plana mayor de Juntos por el Cambio consensuó este viernes lo más parecido a un eje programático en materia de políticas sociales de cara a un potencial gobierno a partir de 2023. Al menos en los papeles, la idea general que se impuso sostiene la importancia del rol del Estado para “atacar la pobreza estructural” y dista bastante de algunos discursos públicos recientes de varios dirigentes del ala dura que incluso formaron parte de la mesa, como Patricia Bullrich o Miguel Ángel Pichetto. Mantener los planes sociales, aunque “de manera directa, sin intermediarios” y “formalizar el trabajo de los sectores populares”, son las propuestas más concretas, y dan cuenta de que, al menos en ese apartado, la visión se acerca mucho más a la idea despliega Horacio Rodríguez Larreta en la gestión porteña.
“Se logró una unidad de criterio en materia social entre todas las fuerzas, lo que para nosotros es un gran paso sobre todo pensando en posibles planes de gobierno”, describió en diálogo con Diagonales la ministra de Desarrollo y Hábitat de la Ciudad, María Migliore, una de las protagonistas del encuentro y del comunicado final, que fue bautizado “Políticas Sociales para la libertad y el desarrollo”.
Para la ministra, fue “un paso adelante” que los think-tank del Pro, la UCR y el peronismo liberal de Pichetto acordaran “que el Estado tiene que ser el eje articulador de la política social”. Otro punto de acuerdo pasó por la idea de que “el ordenador tiene que ser el trabajo”, algo en lo que desde el Ejecutivo porteño se insiste como un mantra, bajo la premisa de incentivar al sector privado a vincularse con las cooperativas de la Economía Popular mediante incentivos fiscales. Eso quedó plasmado en una ley porteña, que fue acompañada por las organizaciones sociales y elogiada por varios de sus dirigentes, como Juan Grabois.
El punto que más disputa con el rumbo del actual Gobierno en materia social tiene que ver con el manejo de los programas como el Potenciar Trabajo, creado durante el propio gobierno de Cambiemos y que hoy tiene más de un millón doscientos mil beneficiarios en todo el país. La propuesta pasa por discutir la “intermediación” de las organizaciones sociales, las mismas que hoy manejan buena parte de las secretarías del ministerio de Desarrollo Social y que tuvieron una relación entre tensa y abierta a la negociación con la ex ministra, Carolina Stanley.
“La persistencia del fenómeno de la pobreza, evidencia la necesidad de reformas profundas en la política social para cambiar esta realidad”, dice al respecto el documento, que critica que la orientación del gasto “no logró resolver el problema de la pobreza”. Pero nada dice de cortar los planes de cuajo, como proponen algunos dirigentes más cercanos al sector libertario encabezado por Javier Milei. La ausencia de Macri reforzó ese carácter centrista del documento final.
Del encuentro formaron parte, además, dirigentes como Diego Santilli, Cristian Ritondo y Alejandro Finocchiaro (hizo de local), por el Pro; Gerardo Morales, Alfredo Cornejo y Mario Negri, por la UCR; y Héctor “Toty” Flores y Fernando Sánchez, por la CC.
De todos modos, según el propio documento, las políticas en ese aspecto estarán atadas a la macro. “Entendemos que no se puede cambiar esta realidad sin una macroeconomía ordenada y un plan de crecimiento y desarrollo claro, que contemple reformas estructurales que potencien capacidades productivas del sector privado. Pero con eso solo no alcanza”, dice.
Mientras los dirigentes estaban reunidos, el presidente Alberto Fernández le reclamó públicamente a la oposición aportar los números en el Congreso para poder subir retenciones, una salida posible al aumento desmedido de precios en alimentos, que hoy golpea más que ningún otro factor en los índices de pobreza. Pero las palabras del presidente no tuvieron ningún eco en ese punto.
El que salió a responderle fue Mario Negri. No vamos a votar la suba de retenciones ni de otro impuesto. El Presidente confunde inflación con suba de algunos precios relativos. No se les cae una idea, sólo buscan aumentar la recaudación a costa del sector que más produce. Dejen de expoliar al campo y armen un plan serio”.