Diputados: El Gobierno festejó la aprobación de La Ley Bases y el Paquete Fiscal
La Cámara Baja aprobó la restitución de Ganancias y la suba de Bienes Personales
Tras más de seis meses de idas y vueltas, negociaciones y rosca, el Gobierno festejó la sanción de la Ley Bases y el Paquete Fiscal tras una larga sesión en Diputados para realizar la revisión final de ambos proyectos. La Cámara Baja aprobó la reversión del Impuesto a las Ganancias y la suba del piso de Bienes Personales.
La jornada legislativa comenzó cerca del mediodía tras la discusión de cuestiones de privilegio y cambios de bancas. Con alrededor de 40 expositores anotados, se espera que el debate se extendió por más de 12 horas.
Con un presunto piso de 140 apoyos, el oficialismo asegura tener los números garantizados para aprobar la Ley Bases con los cambios que recibió el proyecto en el Senado; sin embargo, su mayor preocupación pasa por las modificaciones al Impuesto a las Ganancias, resistidas por gran parte del arco político. Por el momento, el poroteo prematuro muestra una evidente paridad en la repartición de votos.
Previamente, ante la falta de consensos, el Gobierno de Javier Milei se vio obligado a excluir a Aerolíneas Argentinas, el Correo y RTA de la lista de empresas estatales a privatizar. Además, el Senado también eliminó la suspensión de la derogación de la moratoria que estaba incluida en la Ley Bases y La Libertad Avanza tampoco cuenta con los apoyos necesarios para volver a incluir esos puntos.
Sin embargo, el interés del oficialismo se centra en el Paquete fiscal, especialmente, en la restitución del Impuesto a las Ganancias y la suba del piso de Bienes Personales. Para ello, los libertarios deberán negociar con otras fuerzas. Como se mencionó, el conflicto se espera en la discusión particular, donde el oficialismo necesita del voto de peronistas para avanzar con su objetivo.
El proyecto fija el piso del Impuesto a las Ganancias a partir de 1.800.000 pesos en bruto para las personas solteras y de 2.200.000 pesos para las casadas. Así, casi un millón de trabajadores y jubilados que estaban exentos, volverían a pagar el tributo.