“No podemos comprar los insumos básicos”, exclamó el director del Hospital de Clínicas de la UBA, Marcelo Melo, en el marco de una movilización y abrazo simbólico que se realizó alrededor del centro de salud para denunciar el recorte presupuestario y su impacto en la atención sanitaria. 

Melo advirtió que el atraso presupuestario del hospital es del 240% y el salarial del 50%. "Seguimos trabajando con el presupuesto del 2023″, describió. Por ese motivo, el centro sanitario funciona al 50% de su capacidad con suspensión de cirugías, incluídas las oncológicas en muchos casos, e internaciones. 

Durante la movilización de la que participaron alrededor de 5.000 personas, entre ellos estudiantes, residentes, trabajadores y profesionales de la salud, Melo resaltó que el Hospital de Clínicas es “un hospital universitario que cumple funciones de docencia, asistencial de las personas que no tienen cobertura médica y formadores de médicos”. 

"Aquí funcionan 39 residencias. Se forman doctores, bioquímicos, kinesiólogos y enfermeros que luego van a trabajar y enriquecer el sistema privado”, señaló. 

Como resultado del ajuste presupuestario a las universidades nacionales, el Hospital de Clínicas no puede acceder a insumos básicos. “Compramos menos anestesia, por lo que se realizan menos operaciones. Además, bajaron las internaciones y los tratamientos. Eso implica que los estudiantes tienen menos chance de aprender y de formarse", describió Melo. 

"El pedido de presupuesto no es solo algo coyuntural de este año. Es, también, pensando en el futuro. En generaciones que no se van a educar de la forma adecuada como profesionales de la salud”, concluyó.