Con las reformas laboral y previsional ya listas para ser discutidas en el Congreso de la Nación, el oficialismo buscará el acompañamiento para estas medidas que considera clave. La jefa del bloque de diputados, Graciela Camaño adelantó que el massismo no acompañará los proyectos porque los consideran un "ajuste brutal".

"Vamos a defender los intereses de los jubilados y los trabajadores", dijo la diputada, que adjudicó esas reformas a presuntas imposiciones al Gobierno por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI). Además, la Diputada aseguró que estas medidas "figuran en el paper del FMI" y que son impuestas al Gobierno.

Dura de la reforma laboral, en declaraciones a Radio EL Mundo, Camaño aseguró que el blanqueo para el trabajo no registrado y los beneficios a los empleadores  lo que hace es "resolverle el problema a los empresarios que evaden".

También cuestionó duramente la reforma jubilatoria y señaló que quienes terminarán pagando los recortes serán los jubilados.

Con la izquierda, el massismo y parte del peronismo en contra de las iniciativas oficiales, el Presidente deberá ceder a modificaciones y recurrir a negociaciones para poder aplicar las reformas que prevé y que considera de gran importancia para atraer inversiones en el país.