Burrata, virus woke y Four Seasons: Los bizarros detalles de la cita entre Milei y Meloni

El extenso programa de citas entre el presidente Javier Milei y la primera ministra de Italia Giorgia Meloni tuvo de todo: una cena privada en la Quinta de Olivos, secretos en el hall de entrada de la Casa Rosada, una salida top al Teatro Coliseo y hasta un inesperado regalo sacado de la liturgia libertaria. Entre la burrata, las risas y la estadía en el Four Seasons, la agenda política que compartieron en las últimas horas los jefes de Estado dista de cualquier viaje bilateral tradicional.

Todo comenzó este martes por la noche, cuando la mandataria europea arribó a Buenos Aires. De inmediato viajó hacia Olivos, donde fue recibida con una exclusiva cena privada. Se sirvió burrata como entrada, lomo con puré de papa y de batata como plato principal, y posteriormente un postre dulce para cerrar la noche. Salvo a sus perros, que estaban en algún rincón de la Residencia Oficial, el Presidente llevó a toda su familia al banquete: a Karina Milei, su hermana; y a Amalia “Yuyito” González, su pareja, quien pidió un menú vegetariano.

Tras el evento privado, la jefa de Estado italiana se marchó al hotel Four Seasons de Recoleta, donde pasó la noche. La seguidilla de citas continuó esta mañana con la aparición de Meloni en la Casa Rosada, donde protagonizó un extraño intercambio en medio del hall de entrada: la escena fue tomada por varias cámaras televisivas y mostró a Milei “secreteando” y haciéndole comentarios al oído a la primera ministra. Momentos después, ambos dejaron el Palacio de Gobierno a las carcajadas.

Pasado el mediodía, los dirigentes compartieron una conferencia donde coincidieron en luchar contra el “virus woke”, antes de fundirse en un abrazo en pleno escenario. Más tarde, salieron a saludar al balcón de la Casa Rosada, y luego posaron con el flamante regalo que recibió Meloni: un “mini Milei” que levanta por los aires una motosierra. Finalmente, cerraron la gira con una visita de lujo al Teatro Coliseo, donde asistieron a una cena de gala en honor a la primera ministra italiana. Un programa de actividades por demás extraño.