Felisa Miceli: “Guzmán renunció para que no le explotaran en las manos las cosas que no resolvió”
La ex ministra de Economía de los años dorados de Néstor Kirchner y primera mujer de la historia en ocupar ese cargo conversó en exclusiva con Diagonales. Críticas a Guzmán, confianza en Batakis y un duro diagnóstico de la situación económica actual. ¿Dialoga con CFK?
Felisa Miceli atiende el teléfono y ante la primera pregunta recuerda orgullosa que ostenta un título que nadie podrá quitarle: haber sido la primera mujer al frente quizás del segundo cargo más caliente de este país debajo de la presidencia, el Ministerio de Economía. Su orgullo además puede encontrar justificación no sólo en ese hecho disruptivo de la historia, sino también en los resultados que obtuvo al frente de la cartera. Miceli fue la ministra que acompañó el pago adelantado de la deuda con el FMI en enero del 2006, episodio ya mítico en la liturgia kirchnerista. Ese mismo año, incluso con el pago al Fondo, las reservas del BCRA crecieron de 28 mil millones de dólares a unos 32 mil millones, la economía creció un 8,5% y cayeron los niveles de desempleo y pobreza.
Miceli llegó a ese lugar en reemplazo de Roberto Lavagna, con quien había trabajado en los años 90. Durante la gestión de Lavagna, Miceli fue representante del Ministerio de Economía ante el Banco Central y luego Presidenta del Banco Nación. Antes, entre 1983 y 1987, integró también el directorio del Banco de la Provincia de Buenos Aires. Su extensa y creciente carrera en la gestión pública de la economía se vio interrumpida por su renuncia en julio del 2007, a raíz de un episodio que fue juzgado y saldado por la justicia argentina. Miceli trabajó luego con las Madres de Plaza de Mayo, y nunca se alejó del kirchnerismo al cual reconoce como “mi lugar de pertenencia política e ideológicamente”. Aunque no se lo confirma a Diagonales, es indicada como una fuente de consulta y diálogo en materia económica de la propia CFK. Desde ese lugar califica de “pésima” la gestión de Martín Guzmán, a la cual no le reconoce ningún acierto, y confía en Batakis aunque advierte que “hay que darle tiempo”. Su análisis y pronóstico sobre la inflación, la necesidad de acumular reservas, el salario universal y la renta inesperada. ¿Batakis es una Ministra de CFK?
Fuiste la única Ministra de Economía de la historia hasta la designación de Batakis. ¿Qué te genera ver una mujer en ese uno de los lugares más determinantes del país?
- Tuve el privilegio de ser la primera mujer en ese cargo y la verdad que ver hoy a Batakis ahí me genera expectativas, pero no porque sea mujer sino porque tiene un manejo de mucha experiencia y conocimiento de la gestión económica y por lo tanto entiendo que puede desarrollar un plan que nos saque de este atolladero y esta situación difícil que estamos viviendo.
"Tuve el privilegio de ser la primera mujer en ese cargo y la verdad que ver hoy a Batakis ahí me genera expectativas".
Fundamentalmente por ser una economista que no es ortodoxa, que sabe considerar las distintas situaciones que vive el pueblo argentino.
Sin embargo sus primeras medidas fueron bastante ortodoxas
- Son medidas de ajuste fiscal, pero ella es mucho más amplia en sus conceptos, sus formas de encarar los problemas y las causas de la inflación, de la falta de reservas. Creo que hay que darle tiempo para que pueda trabajar sobre esos temas.
¿Ves un cambio de rumbo con Batakis al frente de Economía?
- Debería. Después de estos primeros días donde está tomando conocimiento del verdadero estado de situación, yo creo que tiene que elaborar un plan más abarcativo que las medidas que tomó el otro día, porque solo con lo que anunció no se enfrenta la solución a una crisis muy profunda que dejó Guzmán en todos los frentes.
"Solo con lo que anunció no se enfrenta la solución a una crisis muy profunda que dejó Guzmán en todos los frentes".
No están solucionados ninguno de los puntos importantes del equilibrio macroeconómico que se necesita, hay desequilibrios monetarios, cambiarios, fiscales, financieros de todo orden.
Tuviste posiciones muy críticas de la gestión de Martín Guzmán. Su renuncia, ¿abrió la posibilidad a rediscutir el rumbo económico o terminó generando un desorden peor para el oficialismo?
- Creo que abrió la posibilidad de reorientar el rumbo económico, de tomar medidas más integrales. Yo soy de las que piensa que Argentina necesita un plan económico. Me parece que a esta altura ya se acaban los tiempos, el FMI está equivocándose en las cuestiones que están firmadas en el acuerdo. Yo no digo que no hay que tener un acuerdo, pero Argentina tiene que conversar nuevas pautas.
"Argentina necesita un plan económico".
Tenemos que pensar que el acuerdo se negoció antes de la guerra y cambió todo el panorama internacional, entonces ese es un motivo muy claro para renegociar las cuestiones que están incluidas ahí.
Hace un tiempo dijiste que fuimos a negociar en diciembre con el Fondo con una derrota electoral encima y sin un dólar en el Banco Central. ¿Cuál fue a tu criterio el principal error en la negociación de la deuda de Guzmán?
- Creo que el principal error fue no haber acumulado reservas en el Banco Central para fortalecerse, porque con esa fortaleza uno va a negociar más tranquilo, en el Fondo no te pueden decir hace esto, esto y esto, porque ya se sabe que el país tiene una capacidad para enfrentar y resolver problemas. Igualmente creo que aunque hubiéramos juntado reservas nunca hubiéramos podido pagarle la deuda al FMI, y esa es la irresponsabilidad y lo que significó ese brutal endeudamiento al que nos sometió el gobierno de Macri hacia el futuro.
"Hubo un error muy grave en el manejo de la política de reservas y por eso estamos como estamos".
Pero me parece importante destacar que tuvimos dos años de excelente superávit comercial y que, por lo tanto, era un momento muy apropiado para construir esa fortaleza. No se hizo y estamos pagando las consecuencias de esas malas resoluciones.
¿Por qué creés que renunció Guzmán?
- Para mí su renuncia tiene que ver con que no le explotaran en la mano las cosas que él no resolvió, porque ahora esas cuestiones tienen que ser resueltas sí o sí, había que asumir las consecuencias de lo que había decidido previamente y creo que él no quiso hacerlo. Quizás por una cuestión de mantener su prestigio como académico.
"Para mí la renuncia de Guzmán tiene que ver con que no le explotaran en la mano las cosas que él no resolvió".
Su gestión como Ministro yo la califico como pésima, porque no le veo ningún acierto en ningún área, y esto da la pauta de que un académico no necesariamente es un buen gestor de la política económica.
Más allá de los malos resultados de Guzmán, ¿no termina siendo también en algún punto un chivo expiatorio que se lleva toda la responsabilidad de una interna más amplia y profunda?
- Es su responsabilidad como Ministro decirle al Presidente lo que se puede y lo que no se puede hacer. Creo que pasa por las ideas que le llevó al Presidente, no que el Presidente le dijera que no a la idea de acumular reservas, por ejemplo. La ciudadanía tiene que saber que acá se utilizaron dólares que son muy escasos, lo muestra la medida reciente de subir el impuesto para que alguien que compra en dólares pueda acceder a ellos.
Son medidas que son como parches, cada vez se van agregando más restricciones como parches que se van poniendo a algo que está roto para tirar un poquito más, no para salir adelante. Entonces me parece que esto Guzmán nunca lo resolvió, y si el Presidente lo hubiera entendido no creo que lo hubiese permitido. La política de Guzmán significó que a los ciudadanos de a pie los dólares nos salgan ahora 290 pesos y a las grandes corporaciones 130, entonces las prioridades que se fijaron están mal.
"La política de Guzmán significó que a los ciudadanos de a pie los dólares nos salgan ahora 290 pesos y a las grandes corporaciones 130".
Se vendieron un montón de dólares del Banco Central para salvar la brecha, quiere decir que se pusieron a disposición de los fondos especulativos que salían de la Argentina. En fin, creo que hubo un error muy grave en el manejo de la política de reservas y por eso estamos como estamos.
¿Hay margen hoy en día para no hacer un ajuste con esa situación que describís?
- No, por eso considero correctas las primeras medidas de Batakis. Son de ajuste fiscal pero creo que deben tomarse, hay que ordenar lo fiscal, necesitamos un Estado que tenga solvencia. Es un Estado que tiene un gran endeudamiento en pesos, ¿dónde se vio un Tesoro buscando fondos todas las semanas desesperadamente? Por eso creo que es también muy acertada la medida de crear un comité asesor para que haga propuestas para resolver este tema. Evidentemente la Ministra encontró un panorama muy complicado y para resolverlo va a necesitar tiempo, por lo menos para ofrecer soluciones. Hay que pensar que además de lo fiscal el país está en vilo con el tema inflacionario, con el tema cambiario, por la pobreza. Hay que buscar la manera de integrar toda la política económica para que en un futuro no tan lejano vayan dando resultados.
Es ya una frase patentada por la heterodoxia económica que la inflación es un fenómeno multicausal. Para vos, ¿cuál es la principal causa del proceso inflacionario actual?
- En este momento la principal causa es la incertidumbre, la falta de dólares en el Banco Central que provoca una presión devaluatoria, una situación en la que todo el mundo está esperando que haya una devaluación y por lo tanto las empresas, los comercios, las PyMES, todo el mundo remarca por si acaso. Hasta los profesionales aumentan sus honorarios por si acaso. Todo aumenta en un por si acaso permanente porque no hay credibilidad. El principal problema de hoy es recuperar esta situación de credibilidad, que solo se logra si podemos presentar un plan completo que los agentes económicos vayan dándose cuenta que es cumplible, que tenga anclaje en la realidad, que no estamos todos los días tomando una medida de parche para cambiar una cosa por otra. A medida que eso se tranquilice se podrán ir atacando otras cuestiones de la inflación en simultáneo.
¿Cómo cuáles?
- Por ejemplo la emisión monetaria, tanto la del BCRA para los bancos a través de las Lelics como que se hace para el Tesoro. Tenemos que atacar también las posiciones dominantes desde las cuales las empresas cometen abusos con una buena Ley, por ejemplo con esto que dijo la Ministra de poner en marcha el Tribunal de Defensa de la Competencia.
"Tenemos que atacar las posiciones dominantes desde las cuales las empresas cometen abusos".
La inflación importada, si no se pueden poner retenciones porque no da la situación política hay otras maneras, puede participar el Estado en el mercado de granos reservando una parte a precios más bajos para la población. También se puede crear el impuesto a la renta inesperada como están haciendo otros países y con esa recaudación compensar a los usuarios de servicios públicos, a los consumidores de alimentos o a los fabricantes para que bajen los precios. Es decir, si la inflación es multicausal hay que atacar las causas en simultáneo, dándole prioridad a la construcción de confianza y expectativas.
¿Hasta dónde ves que pueda llegar el proceso inflacionario este año?
- Hablé de un 80% y me decían que me quedaba corta. Eso en caso de ser optimista, de que se van a encontrar algunos caminos para revertir esta situación. Ya sabemos que los aumentos de este mes sumados a los aumentos de tarifas van a ser muy altos.
"Espero que se tomen las medidas que hacen falta para que se vaya desacelerando la inflación".
El índice de junio ya fue alto. Hay que buscar la manera de encaminar esto para que en unos meses vaya hacia otro lado porque sino puede acelerarse. Espero que no, que se tomen las medidas que hacen falta para que se vaya desacelerando.
¿Qué opinás del planteo de algunos movimientos sociales, particularmente de Juan Gabois, de financiar un salario universal con un aumento del 5% de las retenciones a la soja?
- Creo que está bien discutir instrumentos, mecanismos de transferencia de recursos públicos hacia los más necesitados. Siempre eso me parece correcto, y tiene que ser algo transitorio mientras dure la crisis y hasta que se genere empleo genuino con salarios dignos. Creo que cualquier forma de financiamiento es buena, esa es una y puede haber otras, hablábamos recién de la renta inesperada por ejemplo. Yo no sé si en este momento, con una Ministra que está asumiendo, se van a tomar el análisis de esas medidas tan rápidamente. Pero es una medida más para ir teniéndola en reserva e ir analizando sus costos, sus alcances, etc.
Que Batakis sea la nueva Ministra, ¿significa que el pensamiento económico de CFK será el imperante desde ahora?
- Lo desconozco. Yo creo que Batakis representa también el pensamiento del Presidente. No veo que sea muy distinto de lo que el Presidente piensa. Me parece, por lo que leo en los medios, que ha habido coincidencia en su designación y ojalá así sea.
"Yo creo que Batakis representa el pensamiento del Presidente".
Eso me hace ser optimista en cuanto a que va a haber más cauce político y menos ruido en torno a la figura de la Ministra.
Se te nombra como una persona de diálogo con la vicepresidenta, ¿estás en contacto con ella?
- Bueno, yo no estoy facultada para avanzar en esas cuestiones. Lo importante es saber que yo estoy para colaborar y para dar mi opinión en distintos temas, y ya se sabe que políticamente el kirchnerismo es mi sector de pertenencia, al que yo adhiero ideológicamente y para el cual estoy a disposición siempre.
¿Cuál tiene que ser la propuesta política y económica del FDT para el 2023, año electoral?
-Atacar la inflación, cuidar las reservas, generar algunas acciones que tiendan concretamente a mejorar la situación de la gente. Evitar que estos desequilibrios macroeconómicos sigan afectando tanto la vida de la gente, básicamente eso.