Gabinete en revisión, intendentes en uso de licencia y los cálculos para 2023
Suena fuerte la salida de Juan Zabaleta y hay danza de posibles sucesores. Varios jefes comunales se ven ante la necesidad de volver a cuidar sus territorios, con un FDT tambaleante en la nación, ¿y en la provincia? El caso de Juntos por el Cambio.
El tema es recurrente ante cada turno electoral. A medida que se acerca el plazo de los comicios, intendentes, hombres fuertes y líderes políticos en sus territorios que abandonaron el terruño propio para una aventura política más allá de sus fronteras, comienzan a analizar la vuelta a casa. La maniobra tiene lógica casi en cualquier contexto. En política, nadie regala el capital propio a un sucesor para encumbrarlo y que luego lo termine destronando. Pero mucho más sentido tiene en un contexto como el actual, con un Gobierno nacional casi descontando una derrota electoral el año que viene y una provincia en disputa. Volver a lo seguro y a cuidar lo conquistado, cuidarlo frente a adversarios como frente a los propios, es la clave con la que habrá que mirar los movimientos de los intendentes en uso de licencia durante los próximos meses.
La lista que comienza con el Ministro de Desarrollo Social de la nación, Juan Zabaleta, cuya posible salida del gabinete suena como algo inminente, es larga y llega a ambos lados de la grieta. Ante las consultas de Diagonales, sin embargo, los entornos de los jefes comunales que emigraron, tanto a Nación como a Provincia, se mantienen herméticos con el tema y patean la pelota a la tribuna con la respuesta de cassette de que los funcionarios se encuentran concentrados en la gestión diaria y no miran más allá del día a día. Lo cierto es que, en los cálculos de los intendentes, nada pesa más que retener el distrito propio y alejar toda posibilidad de una derrota con la oposición o una interna con otra facción del oficialismo que ponga en riesgo su continuidad. Primero se retiene el municipio y después todo lo demás.
En las últimas horas la agenda política se colmó de rumores sobre una vuelta de Juan Zabaleta a Hurlingham como un hecho prácticamente consumado. El desgaste del Ministerio de Desarrollo Social en un contexto de crisis económica y permanente presión de los movimientos sociales y piqueteros no sería, sin embargo, el principal motivo. Cuando Zabaleta dejó Hurlingham en agosto del 2021 para reemplazar a Daniel Arroyo como ministro, la intendencia quedó en manos de Damian Selci, un referente de La Cámpora que había entrado en la lista de 2019 como cabeza del Concejo deliberante a raíz de un acuerdo entre Zabaleta y Máximo Kirchner. Hurlingham es uno de los distritos del conurbano que La Cámpora viene disputando hace tiempo, y el crecimiento de la organización tras su salida al gabinete nacional es algo que preocupa a Zabaleta.
El intendente en uso de licencia ya se había reunido con la mismísima CFK en mayo de este año, y desde ese momento se especula con que prepara su vuelta al distrito. La semana pasada, luego de la reunión que mantuvo Máximo Kirchner con referentes del peronismo provincial en un asado organizado por Martín Insaurralde en Lomas de Zamora, Zabaleta y el líder de La Cámpora se quedaron mano a mano después del encuentro y las versiones indican que estuvieron ajustando detalles para el retorno. A un hombre importante dentro de la estructura de Zabaleta se lo escuchó decir abiertamente en un evento reciente “en las próximas semanas estamos volviendo a Hurlingham”. La multiplicidad de versiones y rumores ya le dan un peso inocultable a la cuestión, y la pregunta que surge es cuál será la negociación en curso entre Máximo Kirchner y Zabaleta.
Dos nombres picaron en punta para la sucesión del oriundo de Hurlingham. Uno fue el de Victoria Tolosa Paz, actual diputada nacional que fuera cabeza de lista en la provincia en el 2021. Desde el entorno de la diputada afirmaron a Diagonales que “no hubo ofrecimiento concreto”, aunque “es lógico que suene porque tiene más de 20 años de recorrido en el área social”. Insistieron, por otro lado, en que Tolosa Paz “está abocada a su laburo parlamentario y caminar la provincia teniendo contacto con los sectores productivos, empresariales y políticos”. Tolosa Paz se encuentra actualmente en Brasil, invitada por el tribunal regional de San Pablo como observadora del proceso electoral, donde viajó en su carácter de Secretaria del Mercosur del PJ provincial.
El otro candidato para la sucesión es un intendente en uso de licencia que también deberá resolver pronto si retorna o no a su distrito. Se trata de Ariel Sujarchuk, jefe comunal de Escobar, que dejó la intendencia para hacerse cargo del Ente Nacional de Control y Gestión de la Vía Navegable y recientemente pasó a la estructura del Ministerio de Economía como Secretario de Economía del Conocimiento. Sujarchuk tiene más ordenadas las cosas en su distrito que Zabaleta, donde dejó a Beto Ramil como intendente interino, un hombre de su estructura que le responde al punto tal que en la descripción de sus redes sociales tiene fotos de perfil con Sujarchuk y hasta un link al perfil del jefe comunal en uso de licencia.
Sujarchuk comparte el vínculo de la Primera Sección electoral con el tigrense Sergio Massa, y si bien no es orgánico al Frente Renovador juega políticamente con el Ministro de Economía, que fue quien lo metió en Economía del Conocimiento. Su posible salto a Desarrollo Social sería un fuerte avance de Massa en la interna del FDT, a costa de Alberto Fernández que estaría resignando a uno de sus principales laderos con la ida de Zabaleta. En los pasillos de la secretaría de Economía del Conocimiento circuló la versión sobre la posible salida de Sujarchuk, sobre quien se dice que pidió 7 mil millones de pesos para seguir en la secretaría. Al parecer la gestión en general está bastante estancada, y el jefe comunal de Escobar recortó distintas áreas para volcar todo al programa “Argentina Programa”, con el que prometió formar unos 70 mil nuevos programadores, algo que en la secretaría estiman imposible y que a lo sumo se cumplirá en un 10%. Lo concreto es que hoy por hoy los fondos del área se manejan con discrecionalidad y se orientan a criterio de Sujarchuk.
La Primera Sección electoral es la región con más casos de intendentes que se fueron y hoy tienen entre sus cálculos pegar la vuelta. Otro ejemplo en la plana nacional es el del ministro de Obra Pública, Gabriel Katopodis. El oriundo de San Martín, al igual que Zabaleta y Sujarchuk, nunca dejó de mirar de cerca lo que sucede en su distrito y, en línea con el jefe comunal de Escobar, dejó parada una estructura propia en la que nadie disputa su conducción. El intendente, Fernando Moreira, es hombre suyo y su propia esposa, Nancy Cappelloni es Concejala del distrito y participa de la gestión diaria. Una vuelta de Katopodis no representaría ningún problema en este sentido.
También de la Primera Sección, el jefe comunal de Malvinas Argentinas, Leo Nardini, saltó a la gestión provincial luego de la derrota en las PASO 2021 en lo que fue un importante arribo de intendentes y referencias del peronismo provincial al gabinete de Kicillof, impulsado por Máximo Kirchner. Nardini, hoy al frente de Infraestructura en la provincia, es la referencia indiscutida en su distrito, donde destronó tras 25 años de gestión a Jesús Cariglino en 2015 y fue reelecto con el 68% en 2019, marcando una de las mejores elecciones del peronismo en el conurbano. Junto con el referente histórico y hoy senador provincial, Luis Omar Vivona, conducen el peronismo del distrito sin ningún atisbo de interna posible. La referencia más evidente de esto es un hashtag que sigue utilizando la intendenta interina, Noelia Correa: #LeoEsNoe.
En el entorno del ministro de Infraestructura se mostraron herméticos ante la consulta de Diagonales sobre un posible retorno al distrito. Sin embargo, resulta difícil pensar otro lugar de relevancia que puedan ofrecerle al joven dirigente de 42 años, con una clara proyección dentro del peronismo. Con una nueva reelección habilitada, parece imposible que Nardini pueda aceptar una candidatura a diputado provincial el año que viene, o que se juegue a seguir como ministro en un segundo mandato de Kicillof que, hoy por hoy, todavía es algo a conquistar.
Merlo también forma parte de la Primera y tiene un intendente en uso de Licencia. Se trata de Gustavo Menéndez, hoy al frente del Grupo Bapro, el grupo empresarial del Banco Provincia. La intendencia de Merlo quedó a cargo de su hermana, Karina Menéndez, por lo que su vuelta el año que viene estaría casi descontada.
Más al sur del conurbano también abundan los ejemplos. El más resonante es el del Jefe de Gabinete provincial, Martín Insaurralde, quien arribó junto a Nardini al Ejecutivo provincial luego de las PASO 2021. Insaurralde es la mano derecha de Máximo Kirchner en el peronismo provincial, lo cual le garantiza no tener conflictos con La Cámpora, tiene una espada suya como Federico Otermín en la Presidencia de la Cámara de Diputados de la provincia, y dejó a una Concejala de su estructura, Marina Lesci, como intendenta interina. Las aspiraciones de Insaurralde a la gobernación bonaerense vienen de larga data, y el lomense tiene el número puesto para ser el candidato de los intendentes en el caso que haya internas. Pero si avanza la suspensión de las PASO, como todo daría a indicar, el intendente en uso de licencia no tendría ningún conflicto político para retornar a su distrito y asegurarse una trinchera al menos por cuatro años más.
En una situación similar está Jorge Ferraresi, jefe comunal con licencia de Avellaneda que dejó su distrito para migrar al Ministerio de Hábitat de la Nación. Hombre de fuerte relación con el kirchnerismo, tuvo un acercamiento con el albertismo en la crisis política tras las PASO 2021 pero rápidamente volvió a alinearse y no tiene mayores disputas en su territorio. En su lugar quedó Alejo Chornobroff, hombre de su estructura y con la esposa de Ferraresi, Magdalena Sierra, como Jefa de Gabinete.
Mariano Cascallares es otro caso del sur bonaerense de un posible retorno. Intendente de Almirante Brown entre 2015 y 2021, el año pasado Cascallares reforzó la lista de diputados provinciales de la Tercera Sección electoral y dejó en su cargo como intendente interino a Juan Fabiani. Pero nunca se alejó del día a día del distrito y su vuelta en el 2023 es casi un número puesto, a pesar de que tiene mandato como diputado hasta el 2025. Como jefe político del distrito, Cascallares seguramente buscará que el nombre de la reelección sea el suyo y no el de ningún emisario.
Del otro lado de la grieta, existe también un caso amarillo que habrá que seguir de cerca e laño que viene. Se trata del actual ministro de Gobierno porteño e intendente en uso de licencia de Vicente López, Jorge Macri. El año pasado, Macri fue el principal detractor del salto de Diego Santilli sobre la General Paz para encabezar la lista de Juntos. Su cálculo era concreto: si le iba bien, sería difícil negarle en el 2023 una candidatura a gobernador, algo que siempre fue la máxima aspiración del primo del ex presidente.
Perdida esa batalla, Jorge Macri negoció con Larreta su pasa a la CABA, apuntando a suceder al actual Jefe de Gobierno porteño y dejó como intendenta interina a Soledad Martínez, ex presidenta de la juventud del PRO que en 2019 encabezó la lista de Concejales del distrito. Si bien Martínez responde directamente a Macri y un eventual retorno no sería un problema político en el distrito para el actual ministro de Gobierno, la intención del jefe comunal de Vicente López siempre fue darle vuelo a Martínez y enfocarse en su propia proyección por fuera del municipio.
Con el florecimiento de candidatos posibles a la gobernación en Juntos, ya parece imposible que Jorge Macri intente recuperar ese liderazgo de las figuras provinciales del PRO que ostentó hasta el año pasado. Pero la novedad es el conflicto que puede abrirse en la CABA a partir del acercamiento de Rodríguez Larreta con Martín Lousteau, el número puesto del radicalismo para una candidatura porteña. Las versiones hablan de que el Jefe de Gobierno estaría dispuesto a negociar la jefatura de la CABA con la UCR para sellar un apoyo del partido a su candidatura presidencial. En ese caso Jorge Macri quedaría desdibujado o debería competir en una interna con Lousteau. En esa clave hay que leer el reciente apoyo de su primo, Mauricio, a su candidatura a Jefe de Gobierno para el 2023. En el entorno de Jorge Macri expresaron en reiteradas ocasiones a Diagonales que la vuelta a Vicente López no era una opción, pero la nueva situación en la rosca nacional de JxC quizás haga revisar ese planteo.