La cuarentena que se viene: el Gobierno afina los detalles del anuncio
Fernández se reunió con el comité de expertos en en salud, mientras que Kicillof hizo lo mismo y sumó a los intendentes
En medio de un aumento récord en la cantidad de contagios de coronavirus y en el número de fallecidos diarios, el Gobierno nacional ultima los detalles de la nueva fase que comenzará en el AMBA. Si bien aún no se conocen los detalles de esta etapa que comenzará el sábado próximo, sí se esperan mayores flexibilizaciones.
En ese marco, el Presidente Alberto Fernández llevó adelante una reunión con el comité de expertos que lo asesora regularmente, como ya es costumbre en los días previos a la finalización de una fase de la cuarentena. Durante el encuentro, escuchó atentamente en análisis epidemiológico y las recomendaciones de los especialistas.
Ayer se notificaron 4.250 casos nuevos en 24 horas, de ese total la mayor concentración se produce en el AMBA: 2.734 son habitantes de la provincia de Buenos Aires y 1.220, de la ciudad de Buenos Aires. En medio de la preocupación por la multiplicación de casos, ayer el gobernador Axel Kicillof; y el jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta acordaron una la reapertura de algunas actividades en el AMBA, bajo estrictos protocolos sanitarios.
En este contexto, durante la jornada de hoy Fernández escuchó a la embajadora especial de la OMS-OPS para América Latina y el Caribe, Mirta Roses, y a los especialistas Pedro Cahn, Ángela Spagnuolo de Gentile, Gustavo Lopardo, Pablo Bonvehi y Javier Farina.
Del análisis en Olivos sobre la situación epidemiológica del país, participaron también el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti; y los secretarios de Legal y Técnica, Vilma Ibarra, y general de la Presidencia, Julio Vitobello. Por su parte, el ministro de Salud, Ginés González García, afirmó una vez más que "no hay una vacuna mejor que el aislamiento" en las casas.
El infectólogo Tomás Orduna afirmó que la cifra de 4.250 nuevos infectados fue "una piña en los dientes" de cara a la siguiente fase. "Veníamos de siete u ocho días de un amesetamiento de entre 3.000, 3.500 (casos) y veíamos que eso podía ser, de alguna manera, estar en la cumbre; pero eso nos demostró que un día podemos subir 700, 800 casos justo cuando hay que decidir, o está decidido, el repuje final de cómo va a ser el arranque del fin de semana", explicó Orduna en declaraciones a la radio AM750.
Sin embargo, la presión social y económica obliga a los gobiernos a optar por una merma en las restricciones impuestas por la cuarentena y una reapertura gradual de actividades, bajo protocolos de higiene y seguridad lo más estrictos posibles.
Estas medidas de flexibilización se dan en un marco de acuerdo entre la Provincia y la Ciudad de Buenos Aires, pero la aplicación en cada región tendrá sus matices. Días atrás, el propio gobernador Kicillof sostuvo que las medidas en el Gran Buenos Aires "no van a ser idénticas" a las de Capital Federal, pero ratificó que "la decisión es coordinarlas" porque "no es sostenible que de un lado de la General Paz se abra todo y del otro lado nada".
Durante la tarde del jueves, el gobernador bonaerense encabezó un encuentro vía telefconferencia comité de expertos en materia sanitaria provincial, para analizar la situación a partir de los nuevos contagios. Además participaron más de 50 intendentes de distintas regiones de la provincia de Buenos Aires.
Estuvieron presentes el jefe de Gabinete, Carlos Bianco; el ministro de Salud, Daniel Gollan, y el viceministro Nicolás Kreplak; mientras que en forma remota estuvieron la vicegobernadora Verónica Magario, el presidente de la Cámara de Diputados, Federico Otermin, y la ministra de Gobierno, Teresa García.
“En la provincia de Buenos Aires estamos preocupados por la situación y seguimos en cuarentena”, señaló Kicillof y expresó “optimismo por el esfuerzo que están haciendo todos los bonaerenses”.
“Como Estado tenemos la responsabilidad de no dejar que el aislamiento se regule automáticamente. Con la presencia del Estado, nuestra cuarentena ha sido profundamente equitativa, igualitaria y justa”, agregó.
Por su parte, Gollan analizó los datos reportados con respecto al uso de plasma: “Estamos viendo empíricamente que muchos pacientes mejoran y con mucha rapidez”. Asimismo, señaló que “estamos mirando todos los indicadores para evitar la saturación del sistema”. Kreplak destacó el funcionamiento del sistema centralizado que permite asistir a los municipios: “Es un ejemplo de lo que estamos construyendo, no solo es el esfuerzo cuantitativo sino el esfuerzo de organización, que nos permite seguir avanzando en la capacidad de respuesta”.
Durante sus intervenciones y de cara a la flexibilización gradual, los expertos coincidieron en la necesidad de reforzar el uso de tapa-bocas y las medidas de higiene. Además sugirieron continuar mejorando los sistemas de rastreo para aislar a los pacientes y sus contactos estrechos ante los primeros síntomas. En medio de una escalada de casos y una reapertura de actividades, los especialistas hacen hincapié en las medidas de cuidado, prevención y la importancia de la conciencia social.
En ese sentido, desde el Ejecutivo bonaerense explicaron que, como la flexibilización será escalonada, la reapertura de las 1.600 industrias ubicadas en el AMBA "será lo primero". No obstante, aclararon desde el entorno de Kicillof que todas las habilitaciones se llevarán adelante "con mucha cautela porque si se vuelve a vivir un salto exponencial en las variables, hay que volver a poner otro freno como el actual".