La gestión Batakis atraviesa la primera tormenta: remarcaciones, desabastecimiento y “golpe de mercado”
Ninguna variable de la macro se modificó, pero julio vino con aumentos de precios por encima de los pronósticos. “Todo indica que los precios de los alimentos se aceleraron en los últimos días”, dijeron a Diagonales.
La mayoría de los consultores pronosticaban un número de inflación estable del 4 por ciento mensual, pero los primeros días de julio ya tiraron ese pronóstico a la basura. Este martes, la Confederación General de Almaceneros de la Argentina denunció que las distribuidoras mayoristas trasladaron aumentos de entre el 15% y el 40% en distintos productos de la canasta básica durante los tres primeros días de esta semana, en que debutó Silvina Batakis al frente de Economía tras la denuncia de Martín Guzmán.
“¿Cómo van a subir las cosas un 40 por ciento si el dólar no subió un 40 por ciento?”, se preguntó esta mañana el presidente de esa entidad, Héctor González Paván, que nuclea a pequeños comerciantes. “Hay especulación”, agregó en referencia a que, pese al cambio de funcionarios en la conducción de Economía, no hubo otro indicador que haya provocado la estampida de precios en tan poco tiempo, como puede ser una devaluación, cosa que no sucedió.
“Junio nos dio parecido a mayo, 4.16 por ciento de aumento en la canasta básica. Pero ya con lo que observamos los últimos días del mes pasado y estos primeros de julio, todo indica que los precios de los alimentos se aceleraron”, dijeron a Diagonales desde Instituto de Investigación Social Económica y Política Ciudadana ISEPCi, que mide todos los meses la variación de los alimentos en los comercios de cercanía del conurbano.
El ex secretario de Comercio, Guillermo Hang, no pudo haber elegido mejor día para presentar su renuncia luego de apenas 44 días en el cargo: este miércoles se registraron fuertes remarcaciones en casi todos los rubros de consumo interno, que ya se arrastraban desde el lunes, y comenzaron a denunciarse faltantes y desabastecimiento en productos básicos, como el aceite.
“Hay un golpe de mercado, pero no es nuevo”, resumió en diálogo con este medio Osvaldo Bassano, presidente de la Asociación de Defensa de Usuarios y Consumidores (ADUC). “Son las mismas empresas monopólicas de siempre las que están detrás de estos aumentos, y buscan lo de siempre: rentabilidad en dólares y gobernar, marcar la agenda económica”, sostuvo. “Piensan que así perjudican al gobierno, pero perjudican a todo el pueblo, a los consumidores, e infectan el mercado”, agregó.
Hang renunció a su cargo en medio de la negociación del Gobierno con un grupo de empresas para relanzar el programa Precios Cuidados. El Ejecutivo busca a priori reducir el número de productos (son 1231 los vigentes), pero las empresas presionan para elevar los precios.
Para Bassano, el Gobierno “tiene las herramientas para hacer mucho más”. “Hay que aplicar la ley de góndolas, la ley de abastecimiento y avanzar en serio en sancionar a los empresarios que especulan con el hambre de la gente”, advirtió.
Respecto de las remarcaciones, la Federación de Comercio e Industria de la Ciudad de Buenos Aires (Fecoba) detalló que hay rubros donde directamente “no hay precios de referencia”. “No hay precios porque se está esperando a ver qué pasa. Para el pequeño comercio, de barrio, el stock es su capital y lo requiere para poder pagar servicios, alquileres e impuestos. Tiene que sentirse seguro de que lo que está vendiendo luego lo va a poder reponer”, dijo su titular, Fabián Castillo, quien además es vicepresidente de la CAME.
Según González Paván, solo en estos últimos tres días, “en gaseosas hubo aumentos del 10 por ciento; en lácteos, 7 por ciento y en limpieza 12”. “¡Están todos locos!”, denunció.
“Hay un grupo de inmorales que conspiran contra el consumidor”, agregó Bassano. “Como Miguel Braun, que debe estar remarcando, y puede hacerlo porque tiene una posición monopólica en el sur, mientras se ríe de todos”.