Con el desembarco de las fuerzas federales en la provincia de Buenos Aires y algunos casos delictivos mediáticos que tuvieron trascendencia nacional, la inseguridad volvió a instalarse como uno de los temas de mayor preocupación por parte de intendentes y autoridades gubernamentales.  

Lo cierto es que al principio del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio que se instaló en el país a partir del 20 de marzo pasado, la cantidad de delitos había disminuido notoriamente, en especial, en comparación con el mismo período de 2019. Sin embargo, en los últimos dos meses esa tendencia comenzó a revertirse.

Fue el propio secretario de Seguridad de la Nación, Eduardo Villalba, quien aseguró que advierten una "mayor violencia" en los delitos contra la propiedad y que observan una "suba" de casos en las estadísticas de los últimos 60 días.

"De acuerdo a los reportes que tenemos en donde están nuestras fuerzas federales, subieron los delitos contra la propiedad en general, el robo, esos mismos delitos realizados en el contexto de un mismo barrio” explicó el funcionario a Radio La Red y agregó que “en varios casos con mucha violencia, con uso de armas".

En ese sentido, contó que desde la cartera de Seguridad advierten "una situación crítica, en algunas provincias más que en otras", como "en el Área Metropolitana de Buenos Aires, donde siempre es mayor por la concentración de gente".

En ese sentido, representantes de la Federación Económica de la Provincia de Buenos Aires (FEBA) exigieron un protocolo de seguridad esencial para la región del AMBA. Es que desde la entidad aseguran que, a partir de la reapertura de comercios en el marco de la cuarentena, han sufrido alrededor de 1600 robos.

Por su parte, Camilo Alberto Kahale, presidente de FEBA,  afirmó que “la inseguridad es el golpe de gracia que está terminando de matar a las pymes”.

“El comercio que pudo abrir después de estar varias semanas cerrado, hoy no supera el 30% de las ventas que registraba antes. Y si encima le roban la recaudación, se termina de fundir”, afirmó el titular de la entidad.

Desde el gobierno de la provincia de Buenos Aires y Nación, comenzó a realizarse un trabajo conjunto que incluye el despliegue de las fuerzas federales en el territorio bonaerense, que incluirá la presencia de tres mil efectivos en total.

No obstante, las cifras muestran que con el paso de la cuarentena, la inseguridad ha crecido. En la Provincia de Buenos Aires, la Procuración General realizó un relevamiento de las causas judiciales iniciadas en el periodo del 20 de marzo hasta el 25 de junio, y realizó una comparación con los números del año anterior.

Según se desprende de los datos del Ministerio Público Fiscal, los delitos cometidos por adultos mayores descendieron en un 60% entre marzo y abril, en comparación a 2019; un 49% en mayo; y un 44% en junio.

Sin embargo, cabe destacar que las cifras no llegaron a igual las del año pasado. En 2020, desde el comienzo del ASPO hasta el 25 de junio en la provincia se cometieron 524 homicidios, de ellos 12 fueron en ocasión de robo. Mientras tanto, durante ese mismo tiempo en 2019, se perpetraron 818 homicidios, aunque en este caso, sólo 7 de los mismos fueron durante un robo.

Por otro lado, los delitos contra la integridad sexual también disminuyeron en relación al año anterior. En 2020 hubo 3.435 causas iniciadas en la Provincia, mientras que en 2019, hubo 5.673.

Finalmente, el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, había hecho una serie de declaraciones mediáticas sobre el aumento del delito de supervivencia, como puede ser el hurto. En 2020, hubo 11.481 casos que llegaron a la Justicia; mientras que en el mismo periodo de 2019, el número total de hurtos fue de 24.426.

Lo que se desprende de las estadísticas entonces, es que la cantidad de delitos durante la cuarentena ha disminuido en comparación a los meses de marzo, abril, mayo y junio del año pasado. Sin embargo, también es cierto que hay una escalada de delitos, especialmente contra la propiedad, y un aumento en la violencia de los mismos en los últimos dos meses.

Por su parte, Eduardo Villalba aseguró que desde el Ministerio están atentos a la situación "para que esto no tome una escalada mayor y no nos encontremos en octubre o noviembre con una situación más crítica".