La Justicia otorgó salidas transitorias al ex militar que se apropió de Victoria Donda
El represor Adolfo Donda, condenado a prisión perpetua por sus crímenes en la dictadura, fue beneficiado por la Cámara Federal de Casación Penal.
La Justicia benefició con salidas transitorias al represor condenado a prisión perpetua Adolfo Donda, reconocido por ser el apropiador de la identidad de la titular del INADI, Victoria Donda. La decisión fue tomada por la Cámara Federal de Casación Penal, mediante una resolución firmada por los jueces Carlos Mahiques, Guillermo Yacobucci y Ángela Ledesma.
De esta manera, Adolfo Miguel Donda tendrá ahora la posibilidad de salir de prisión. Será el Tribunal Oral Federal 5 el que deberá pautar qué medidas de control tendrá que acatar el represor cuando salga de la Unidad 31 de Ezeiza. Desde el lado de la defensa de Donda, está registrado que estuvo más de 20 años de prisión efectiva: cuatro meses en 1987 y en la cárcel desde el 16 de septiembre de 2003.
Cabe recordar que Donda era el jefe de operaciones del Grupo de tareas 3.3 de la ESMA y Segundo Jefe de Inteligencia. Hermano de José María Donda y cuñado de María Hilda Pérez, padres de la mencionada Victoria Donda, desaparecidos en 1977. El ex militar está acusado de haber participado de la retención, ocultamiento y entrega de su sobrina, que nació durante el cautiverio en la ESMA y fue entregada al exprefecto Juan Azic.
En tanto, desde el Gobierno ya salieron a manifestar su malestar por esta decisión de la Justicia para beneficiar al represor condenado. La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación indicaron: “La SDH Argentina expresa su preocupación por la decisión de la Sala II de la Cámara de Casación de otorgar salidas transitorias al represor Adolfo Donda apenas dos semanas antes de comenzar a ser juzgado por la apropiación de su sobrina, la titular del INADI, Victoria Donda”. El mensaje, divulgado en redes sociales, fue replicado en su cuenta por la propia funcionaria.
El represor, vale aclarar, fue enjuiciado por unos 62 delitos de lesa humanidad, entre los que se incluyen secuestros y homicidios. Quedó libre tras la sanción de la Ley de Obediencia Debida, pero cuando esta normativa fue declarada nula por el Congreso e inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia en 2005, volvió a ser procesado. El 26 de octubre de 2011 fue condenado por el Tribunal Oral Federal N°5 a prisión perpetua e inhabilitación absoluta y perpetua por considerarlo coautor penalmente responsable en orden al delito de privación ilegítima, secuestros, tormentos, y homicidios.