Milei pidió la “liberación inmediata” del gendarme en Venezuela y llamó “dictador criminal” a Maduro
El Presidente rompió el silencio sobre el caso de Nahuel Gallo y acusó un “secuestro ilegal” a cargo de las fuerzas bolivarianas: “Agotaremos todas las vías diplomáticas para devolverlo sano y salvo”.
Otra crisis diplomática para cerrar el primer año de Gobierno de La Libertad Avanza (LLA) toca la puerta de la Rosada: tras la detención del gendarme argentino Nahuel Gallo en Venezuela, el presidente Javier Milei arremetió con dureza contra la gestión bolivariana y aseguró que se trata de un “secuestro ilegal”, al tiempo que exigió la “liberación inmediata” del agente y aseveró: “Fue detenido por las fuerzas a cargo del dictador criminal Nicolás Maduro”.
Justo antes de dar comienzo al acto que encabezó este martes en El Palomar, el jefe de Estado se tomó treinta segundos para referirse al que ha sido uno de los temas más calientes de la agenda gubernamental de la última semana: la detención del gendarme Gallo en Venezuela, que ayer fue confirmada por el ministro del Interior y Justicia bolivariano Diosdado Cabello: “¿A qué venía a Venezuela? Todos ponen una fachada, tenían su novia, su novio… Les dolió porque venía a cumplir una misión”.
Ante ello, esta tarde Milei disparó: “En primer lugar, y antes de comenzar el discurso, quiero referirme al secuestro ilegal de Nahuel Gallo en Venezuela. Fue detenido por las fuerzas de seguridad a cargo del dictador criminal Nicolás Maduro por el único delito de visitar a su pareja y a su hijo. Exigimos su liberación inmediata”. Las declaraciones se enmarcan en las realizadas por la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y el canciller Gerardo Werthein en las últimas horas, todos quienes pidieron la liberación del agente.
Luego, el Presidente prometió agotar “todas las vías diplomáticas para devolverlo sano y salvo a la Argentina”. Pese a su severidad, las declaraciones implican en la práctica cierta desaceleración y opción por la diplomacia en contraste con el camino que había tomado la discusión en los últimos días, en los que se llegó a barajar términos bélicos ante la escalada del conflicto. En esa línea se encontraron por caso los dichos de Bullrich de esta mañana, cuando sostuvo que el país “no se va a quedar callado” porque la detención implica un acto “casi de guerra”.