Unos 90 intendentes referenciados principalmente en el peronismo y el radicalismo se congregaron esta tarde en La Plata para participar de una mega firma encabezada por el gobernador Axel Kicillof. La cita, convocada por motivo de la entrega de la tercera cuota del Fondo de Fortalecimiento Fiscal Municipal, deja una fuerte foto que muestra al Gobierno bonaerense y a jefes comunales propios y ajenos en un potente gesto de alineamiento. La Provincia renueva sus votos y llama a “ser un escudo” contra el ajuste nacional.

Con Kicillof, la vicegobernadora Verónica Magario y los ministros de Gobierno Carlos Bianco y de Economía Pablo López en el escenario, decenas de intendentes desfilaron esta tarde por el Palacio platense para aprobar la entrega de la tercera cuota del fondo bonaerense, que se traduce en agosto en el desembolso de un 30% del presupuesto total, por lo que con esta entrega la Provincia acumula unos $87.000 millones entregados a los municipios en lo que va del año. La lista de asistentes incluyó entre los jefes comunales a dirigentes del peronismo y del radicalismo, aunque el PRO se ausentó por críticas a supuestas demoras del programa.

“Se trata de fondos de libre disponibilidad, fondos para atender la complicada situación fiscal y financiera que estamos transitando. Estamos viendo una crisis y recesión muy severas, con caída de la actividad económica en torno al 30% en la construcción y en torno al 15% en la industria, en los sectores que más empleo generan en la Provincia. El consumo y la inversión también registran una caída de dos dígitos, y todo esto redunda en una pérdida de puestos de trabajo: ya hay más de 150.000 desempleados nuevos en la Provincia”, expresó López antes del acto de firma.

En ese marco, el ministro de Economía consideró que la situación “es producto de las medidas macroeconómicas y del ajuste del Gobierno” de Milei, al tiempo que remarcó que el programa de La Libertad Avanza es de una magnitud “inédita y nunca vista en la historia”. Ante ello, el funcionario invocó a que la Provincia de Buenos Aires “sea un escudo” contra las políticas nacionales; una consigna que fue reiterada luego por Kicillof durante su disertación: allí, el gobernador celebró la labor de López y advirtió que “no fue magia”, sino obra de un “Estado presente”.