En una jornada de sol y previo al Día de la Lealtad Peronista, Unidad Ciudadana cerró la campaña electoral frente a una verdadera multitud en el estadio de Racing Club. En lo que se vivió como una fiesta, con bandas en vivo, animadores y con numerosas familias que se acercaron a acompañar a Cristina Fernández de Kirchner, el espacio político que ganó las primarias pidió “fuerza y acompañamiento” en las urnas. "Ningún candidato de Unidad Ciudadana levantará la mano contra los intereses del pueblo", lanzó.

Rodeada de todos los principales candidatos a senadores y diputados, con intendentes y referentes distritales y frente a los militantes, la candidata a primera senadora por la provincia de Buenos Aires pronunció un discurso orientado a pedir el voto para Unidad Ciudadana.

“Hoy tenemos un Gobierno que prometió el oro y el moro, prometió pobreza cero, que no habría tarifazos, que ningún trabajador pagaría impuesto a las ganancias, que todo lo bueno se iba a respetar y que sólo se cambiaría lo que estaba mal, y hoy aquí después de veinte meses de Gobierno podemos comprobar que la única lealtad de Macri es a los grupos concentrados de la economía, es a las mineras, lealtad a los fondos buitres, lealtad a su familia, a sus amigos y a sus socios”, dijo con dureza CFK.

Para la ex Presidenta, “ser peronista hoy es decir ‘basta ya Macri con tanta malaria para el pueblo”’. Y preguntó a los presentes: “Si Perón y Evita estuviera aquí, ¿a quien votarian? Evita a Cristina, Perón a Taiana y los dos juntos a Unidad Ciudadana”.

En un momento, CFK le habló a amplios sectores para que acompañen con el voto a su espacio y señaló que “aunque no seas peronista, te tenés que dar cuenta que lo que está pasando en la Argentina no es bueno. No se puede ir por la vida endeudándose de la manera en que los estamos haciendo. Ya lo vivimos. No hay que ser peronista para acordarse de eso, basta con ser argentino y tener memoria”.

Para la candidata a Senadora es momento de “reflexionar” y que es tiempo de “poner un límite”. Además lanzó: “no dejemos que estas políticas avancen. Estamos a tiempo de decir, ‘así no’, no es cuestión de partidos, es cuestión de sentido común y patria”.

Crítica de la reforma laboral que planea el Gobierno, CFK cuestionó las medidas de flexibilización laboral y recordó que cuando era diputada a fines de la década del '90 intentó impedir la reforma de Antonio Erman González.

Al final de su intervención, la ex Presienta comenzó a quedarse sin voz, por lo que cerró: "Me quedo sin vos pero con todo el corazón de ustedes, para ponerlo en las urnas y llenarlos de ilusiones, de sueños y de amor a la patria".