El precandidato a la presidencia por el Frente de Todos Alberto Fernández; el aspirante a la Gobernación Axel Kicillof y su compañera de fórmula Verónica Magario, y el primero en la nómina de la lista de diputados nacionales Sergio Massa, se encontraron con 40 intendentes para ultimar detalles de la campaña.

A menos de un mes de las PASO, previstas para el 11 de agosto, los precandidatos del Frente de Todos recibieron el respaldo del jefe comunales, quienes buscan desde sus distritos sumar votos a esta fuerza y volver a ponerle el sello peronista  a la Provincia de Buenos Aires, una elección que se espera muy reñida.

"Fue una reunión excelente", consideró Kicillof tras el encuentro, en las oficinas de Alberto Fernández en el barrio porteño de San Telmo, donde hace dos semanas recibió a los gobernadores peronistas.  

Mientras desde el oficialismo buscan fomentar "la boleta completa" ante un posible corte de los intendentes de Cambiemos, Kicillof, aseguró que los suyos no recurrirán a esto, porque "hay mucha colaboración y acompañamiento". “El Gobierno tiene una intención, a partir de lo que está pasando con los sondeos, que reflejan el mal humor de la gente y su desilusión con su gestión, entonces ha optado por producir la idea de que va a haber corte de boleta a favor de Vidal”, aseguró. 

Respecto a la reunión, el ex Ministro de Economía detalló que, al igual que en La Plata, los intendentes llegaron a trasmitir sus inquietudes y a relatar las problemáticas que atraviesan sus distritos. “Estamos sorprendidos por lo que dice la Gobernadora en cuanto a que no hay desempleo porque venimos escuchando situaciones muy complejas de cada distrito, como Merlo, que pasó de alimentar de 1.300 a 40.000 personas. También planteamos las condiciones de las escuelas, la falta de nafta en los patrulleros y vimos cómo plantear los problemas serios de la Provincia en lugar de ir con la campaña sucia”, apuntó.

Respecto a la campaña, el precandidato a gobernador aseguró estar “muy bien y conforme con el desarrollo de la campaña” pero advirtió que se están haciendo “ajustes para evitar las distracciones que plantea el Gobierno porque no tienen propuestas y no quiere hablar del desastre que hicieron”.

En la misma sintonía Alberto Fernández, sostuvo que está "muy tranquilo" respecto a la estrategia electoral.  “La idea es ganar, ganar cuando los argentinos voten, pero estamos muy tranquilos. A los indecisos les digo lo de siempre, que piensen en el país en el que están viviendo, donde más de cuatro millones de personas cayeron en la pobreza y el desempleo aumenta”, dijo.

“Un nuevo gobierno de Macri solo va a entregarnos al FMI, con más ajuste, la reforma laboral y previsional. Nosotros tenemos mucho margen porque tenemos dignidad y sabemos que los que trabajan y los jubilados no tienen que pagar los platos que rompió Macri”, apuntó Fernández