La Comisión Provincial por la Memoria presentó el primer registro público de casos de violencia policial
Ante la falta de datos oficiales confiables, se lanzó el primer registro digital que documenta las prácticas abusivas por parte de la policía
En la jornada de Capacitación para la Lucha contra la Violencia Institucional que tuvo lugar en el auditorio de la Facultad de Psicología de la UNLP, ante la falta de datos confiables, se lanzó el primer registro público y digital de casos de violencia policial que atentan contra los derechos humanos.
Se trata de un insumo que permite intervenir y discutir políticas de seguridad para prevenir este tipo de prácticas. De esa manera, todos aquellos que hayan sido víctimas del abuso de autoridad por parte de efectivos policiales, podrán realizar su denuncia en el siguiente enlace http//registrodeviolenciapolicial.comisionporlamemoria.org.
Del encuentro de capacitación participaron más de 400 referentes territoriales de más de 60 ciudades diferentes de la provincia de Buenos Aires y en ese marco, el presidente de la CPM, Víctor Mendibil, señaló que "se están cumpliendo 30 años de la masacre de Budge, 30 años de esa lucha de los familiares y del barrio que permitió condenar a los responsables, y hoy seguimos luchando".
Además, adviritó que "aunque quieran meternos el miedo para desorganizarnos, nosotros vamos a quebrar, desde el territorio, esa política de disciplinamiento. Este encuentro es la demostración de que no van a poder",
El registro de casos de violencia policial tiene por objetivo sistematizar datos sobre la política criminal, herramienta fundamental para fortalecer la capacidad de acción de las organizaciones para la promoción y defensa de los derechos humanos.
Al respecto, la directora de la CPM, Sandra Raggio, contó que "este registro nos brindará la posibilidad de trazar un mapa de las violencias que las policías despliegan en toda la provincia de Buenos Aires". A la vez que "entender las prácticas y dinámicas particulares de cada territorio".
Finalmente, expresó que "ante la falta de datos públicos fiables, somos nosotros, las organizaciones, quienes vamos a producir datos para ir a discutir las políticas de seguridad desde una perspectiva en derechos humanos".