El desorden que reinaba en el oficialismo hasta hace poco más de un día parece haberse acomodado tras la jugada sorpresiva que depositó a Sergio Massa y Agustín Rossi en la boleta presidencial. La fórmula de unidad resolvió no solamente la coexistencia de los distintos actores de Unión por la Patria en las candidaturas nacionales, sino que permitió abrir el juego a internas en varios distritos en los que hubiera sido difícil que no quedara un tendal de heridos sin PASO. Con la posibilidad de que las distintas listas tributen a las candidaturas de Kicillof y Massa, las primarias de los municipios se tornaron una herramienta de contención a los diversos sectores de UP.

Quizás el caso más emblemático sea el de La Matanza. En “la capital nacional del peronismo”, el Movimiento Evita venía planteado hace tiempo en que le permitieran presenta la candidatura de Patricia Cubría. La diputada provincial y pareja de Emilio Pérsico enfrentará finalmente a Fernando Espinoza, que irá por un nuevo mandato. Las negociaciones para destrabar las tensiones con el PJ, que buscaba evitar las PASO como en 2021, año en que presionó hasta bajarla la lista al Evita, incluyeron la intermediación del propio Máximo Kirchner. El Evita consiguió así una de las candidaturas que más le importaban, y será un actor relevante en el operativo para conseguir votos que también vayan para Massa y Kicillof.

Otro de los municipios donde el Movimiento Evita apostaba fuerte a una candidatura propia es San Martín. Allí, el actual diputado nacional y amigo de Máximo Kirchner, Leonardo Grosso, firmó la candidatura al frente de su espacio, Futuro San Martín, y competirá con el actual intendente, Fernando Moreira. Quien fuera el reemplazante de Gabriel Katopodis en la intendencia, deberá revalidar su lugar en una interna que promete ser competitiva a partir de un importante conjunto de actores que vienen integrando el espacio de Grosso y que plantean la necesidad de una renovación en un distrito que atraviesa graves problemáticas en materias de seguridad.

Pero el Evita no sólo irá a disputar intendencias en municipios del PJ, sino que deberá revalidar la que hoy detenta Mariel Fernández en Moreno. En ese importante distrito del conurbano, sectores del PJ de los ex intendentes Mariano West y Ernesto Lombardi articularon con el Frente Renovador, y el dirigente del partido massista Damián Contreras competirá con la jefa comunal del Evita en las PASO de agosto.

El Frente Renovador también se jugó un pleno en su municipio madre. Este sábado se oficializó la candidatura de Malena Galmarini a la intendencia de Tigre. La titular de AySA y pareja de Sergio Massa buscará recuperar para el FR el distrito que dio nacimiento al partido y que hoy gobierna Julio Zamora. Tras semanas de especulaciones y rumores sobre un posible salto a la fórmula provincial con Kicillof, finalmente se concretó lo que Galmarini y su equipo comunicaron siempre como su decisión prioritaria: competir con Zamora en el municipio del norte del conurbano, en una interna que será para alquilar balcones y sin dudas una de las más atractivas en el peronismo.

Y si de internas atractivas se trata, habrá que prestar especial atención a lo que suceda en Hurlingham. Allí, La Cámpora va por todo en una alianza junto al Frente Renovador, Kolina, Patria Grande de Juan Grabois, La Corriente Nacional de la Militancia de Agustín Rossi, Nuevo Encuentro y otros sectores, a disputar el distrito con Juan Zabaleta. El candidato de La Cámpora será Damián Selci, quien asumió la intendencia en forma interina durante el año en que Zabaleta partió al gobierno nacional para desempeñarse como ministro de Desarrollo Social de Alberto Fernández. La disputa entre Selci y Zabaleta viene de larga data, y el retorno del intendente luego de su paso por Desarrollo contó incluso con la intervención directa de CFK, que permitió la vuelta de quien fuera una de las patas más fuertes de un albertismo incipiente en la PBA. Las PASO de agosto marcarán un nuevo episodio en la saga de esta interna.

Un municipio que tendrá un cambio importante será Ituzaingó. Luego de 28 año de mandato, Alberto Descalzo dejará de ser intendente el 10 de diciembre. Su hijo y actual jefe de gabinete del distrito, Pablo Descalzo, será el candidato para sucederlo. Deberá enfrentar en las urnas a Natalia Peluso, quien se presentó con la lista de Enamorate Ituzaingó. De esta forma, salga como salga la PASO en el distrito, uno de los históricos barones del conurbano aún en el poder abandonará la jefatura comunal que detentó durante casi tres décadas desde el 10 de diciembre de 1995.