El despacho de Gustavo Posse está muy tranquilo el viernes por la tarde. Las puertas abiertas al patio no interfieren con la entrevista y el intendente se precia de ese clima de calma que, asegura, se traslada al contacto diario con sus vecinos. Cerca de cumplir 24 al frente del municipio de San Isidro, Posse dice estar en una etapa “soñada” de su vida política, pero también se anima a mirar más allá. Sus obsesiones van desde la autonomía municipal hasta sentar un bonaerense en el Sillón de Dardo Rocha, algo que dice no ocurre hace más de dos décadas.

Los cuadros o fotos con barcos y el río le ganan las paredes del despacho a las habituales fotos políticas que los jefes comunales suelen elegir como decoración. La bandera nacional, la de San Isidro con hojas y flores de espinillo, retratos de la antigua catedral de la ciudad y un mapa con las seis localidades del distrito completan la escena. Posse se sienta en la cabecera de una larga mesa de madera pulida y comienza a responder una por una las múltiples preguntas que Diagonales llevó hasta su tierra. Habla despacio y pausado, como contagiado por el clima reinante, y alterna detalles de la jornada anterior, en la que recorrió San Martín con el posible candidato presidencial Gerardo Morales, con la situación actual del Club Atlético de San Isidro. Uno de los principales exponentes del radicalismo provincial se dispone para una charla extensa sobre la situación del país, la provincia y el papel de una UCR que quiere ser protagonista de lo que viene.

El hecho que marcó al país en las últimas semanas fue el intento de asesinato a CFK. ¿Qué opinás de lo que pasó y cómo siguió tratando el tema en la discusión social?

- Primero, todo lo que vi lo de la investigación muestra que el atentado existió. En eso, los argentinos que expresamos nuestra preocupación por la violencia y el riesgo que se corrió no nos equivocamos. Después, como pasa con todo en este Gobierno, a las horas hicieron todo para que pareciera que estuvo contado. El feriado al otro día era innecesario, el acto y la marcha eran innecesarios, la exigencia que tuvieron sobre el Congreso de la Nación y sobre las legislaturas, las sesiones especiales eran innecesarias. 

“Todo lo que vi de la investigación muestra que el atentado existió”. 

Era marcar posición todos sobre que no queremos eso y a trabajar, ir hacia delante. Ellos mismos son los que hacen que hace una parte de la ciudadanía que crea que está montado. Y no es así, no está montado, pero creo que intentan recuperar su tercio por vía de todo ese folclore.

El oficialismo comenzó a plantear la necesidad de un diálogo con la oposición para refundar un pacto democrático, pero hasta ahora no se pude avanza ¿Por qué?

- Porque la política no es diálogo de prepo, acuerdo de prepo, no es misa con bombos. Tienen que buscar los actores principales del oficialismo y la oposición, la responsabilidad principal es de las autoridades nacionales. Lo primero que tienen que ofrecer es una agenda, invitar a que la oposición la complemente y se logre una agenda común. Poca foto, tiene que ser un diálogo reservado para que el país siga caminando y nada se pare. La política requiere de esa técnica. 

“La política no es diálogo de prepo, acuerdo de prepo, no es misa con bombos”.

Creo que se necesita un acuerdo, sobretodo tenemos que pensar en nuestros connacionales que no pueden vivir con el hecho de que la crisis se comió la mitad del gobierno anterior, como vamos se va a comer todo este gobierno, y si sigue así parte del gobierno que viene, gobierne quien gobierne. Nosotros queremos ser gobierno el año que viene ¿qué mejor que se pueda avanzar en materia de temas sustanciales?

CFK habló el jueves y convocó al diálogo con los que piensan diferente. ¿Eso cambia la situación?

- Hay un avance en que Cristina haya llamado al diálogo. Ellos están en un momento de cohesión, que está bien, porque muchos de los problemas que tienen los argentinos provienen de los enfrentamientos en el FDT. Pero esa cuestión no significa que el acuerdo lo vayan a resolver ellos al interior. El acuerdo tiene que legar a todo el espectro de la sociedad argentina.

“Hay un avance en que Cristina haya llamado al diálogo”. 

¿Qué pensás de la postura de algunos dirigentes de JxC, como Patricia Bullrich, que no repudiaron el atentado?

- Creo que hay que respetar, si ella decidió que no tenía que repudiarlo hay que respetarla, porque puede ser parte de la población que sintió que esto estaba armado.

“Bullrich puede ser parte de la población que sintió que esto (atentado a CFK) estaba armado”. 

Desde el radicalismo mostraron otra postura. ¿No creés que la UCR podría tener un gesto como el apoyo de Cafiero a Alfonsín en el levantamiento carapintada y mostrarse como un partido del diálogo y la democracia?

- El radicalismo siempre va a ser un partido que hace del diálogo una cultura. La UCR pagó los costos de la Reforma Constitucional de 1994, y sin eso hoy no habría CABA o no se hubiera frenado la 125 con el empate en el Senado por el tercer Senador. Eso fue fruto del acuerdo y el motor de ese acuerdo fue el radicalismo. Después pagamos el costo, surgieron nuevos partidos como el Frepaso y hasta el PRO, pero el radicalismo no mide los costos, lo mueven las convicciones. Hoy es un partido mucho más moderno, está más tranquilo. No tenemos el problema de vedetismo que tiene el FDT y otros partidos.

“El radicalismo siempre va a ser un partido que hace del diálogo una cultura”.

¿Vos te sentarías como un representante del radicalismo a dialogar con el oficialismo provincial?

- Primero tendrían que darse los pasos que te dije antes y luego que lo hagamos como JxC. El radicalismo no lo haría por sí mismo, el pro no debe hacerlo por sí mismo, tiene que ser en conjunto. Porque quienes nos votaron tienen puesta en nosotros una confianza y una preocupación a la vez, respecto de que nos mantengamos unidos. No hay la menor duda de que JxC se mantiene unido, pero también hay una preocupación y nosotros tenemos que mantener nuestro propio espacio.

En tu tuit de repudio dijiste “no podemos permitir que el odio sea el motor de nuestra sociedad”. Muchos sectores de JxC se resistieron a hablar de odio, o discursos de odio. ¿Cómo ves el clima político actual?

- Ya unos meses antes del intento atentado a Cristina todos, inclusive los más duros, los comunicadores también, ya se venía hablando de aflojar un cambio. Creo que se empezó a frenar tarde. Se siguió profundizando la grieta, a pesar de qué se quería frenar, y esto pudo dar lugar a qué personas que no están con su sentido común totalmente encendido hagan lo que hizo este Sabag Montiel. Y le pueden tocar a cualquiera. Entonces, la verdad que seguir tensando la cuerda no tiene ningún sentido. La gente ya sabe lo que va a votar. Tenemos que tener un proceso limpio en las PASO y dedicarnos a hablar de contenidos. El FDT, JxC, las autoridades nacionales y provinciales de hoy deberían centrarse en los contenidos.

“Seguir tensando la cuerda no tiene ningún sentido”. 

Dijiste que le puede tocar a cualquiera, ¿tenés miedo a partir de lo que pasó?

-La vida de los intendentes es de mucho contacto con los vecinos. La mía, particularmente en esta época, es soñada. Siempre me fue bien, pero en este momento, donde el año que viene cumplo 24 años como intendente, algo que jamás hubiera pensado que iba a vivir, la relación con los vecinos es bárbara.

¿Alguna vez te pasó que te amenazaron?

- Los episodios que tuve fueron telefónicos, gente que te entra el teléfono y te amenaza, que no necesariamente son de San Isidro, más bien son de otros lugares. También me ocurrió con mis hijos más chicos, a través de delitos virtuales, amenazas, pero se abrieron causas que tuvieron resultados positivos en la justicia, hay gente presa por eso. Soy abogado, sé cómo actuar en ese momento. Hoy es la justicia y la policía están muy preparadas respecto de lo tecnológico. Lo que yo le recomiendo siempre a cualquiera es que recurra a la Fiscalía de su lugar, lo que hay que hacer es hacer la denuncia.

“Los episodios de amenaza que tuve fueron telefónicos y con mis hijos de delitos virtuales. Hay gente presa por eso”.

Sergio Massa fue vecino tuyo como intendente, ¿qué opinás de su gestión económica?

- El primer tema que lo retrasó a Sergio fue tener cohesión adentro del FDT, las aprobaciones de Alberto y Cristina. Para los argentinos es un problema que les cueste como les cuesta ponerse de acuerdo. Llegó a Estados Unidos al límite, porque todo el procedimiento con la mesa de enlace no es algo sencillo.

“A Sergio (Massa) lo retrasó tener cohesión adentro del FdT”. 

 Se hizo cargo de Economía ya con el BCRA desabastecido de reservas. Creo que intenta medidas que en lo inmediato van a abastecer a la economía de divisas. Pero lo votado ayer es un problema, porque aumenta la presión fiscal y puede colaborar con frenar la economía.

¿Cómo cómo afecta el contexto inflacionario en la gestión cotidiana de un municipio?

-Es terrible, porque no podés mandar en las facturas el aumento real de la inflación. Además, la inflación de un municipio es mayor a la inflación general, está muy ligada al dólar por insumos como el hierro, cemento, polímeros, etc. Es terrible porque vas desactualizando los ingresos del municipio. Los municipios no mandamos la cuenta mensual sino la de dos meses, y no podés agredir al vecino con la inflación de dos meses. Acá lo resolvimos con que no entra gente en la administración central, excepto reemplazos necesarios. Al inicio de la democracia, la administración central representaba más del 78% del presupuesto municipal, hoy es el menos del 7%.  Se trabaja hoy con mucha tecnología y menos cantidad de personas, y también muy agradecidos por tener un personal que sirve a todos los vecinos con una dificultad muy grande respecto a sus ingresos y los costos de vida.

Estuviste con Gerardo Morales en San Martín. ¿Es tu candidato a Presidente?

-Él va a decidir su candidatura o no más adelante. Lo que decimos es que para nosotros es un capital. Un radical que pasó todo, fue militante de la Franja Morada, legislador, pasó por el Consejo de la Magistratura, comisiones bicamerales muy importantes, es constructor de Cambiemos y JxC, Gobernador por dos periodos en una provincia declarada inviable. En siete años produjo un cambio muy fuerte en el norte argentino. Se enfrentó a Milagro Sala. Transformó una economía totalmente dependiente de lo que le mandara la nación, 32 años de déficit fiscal y logró una provincia equilibrada, con inversión privada fortísima en lo que tiene que ver con la energía. Además, que siendo gobernador le dedique tanto tiempo a la provincia y al conurbano, acompañarnos en las barriadas, nosotros tenemos que poder aprovecharlo.

Hay otras figuras del radicalismo que tienen esa misma aspiración, por ejemplo Facundo Manes, el Gobernador Valdés, Alfredo Cornejo tal vez. ¿Cómo se va a ordenar todo el radicalismo tras un solo candidato?

-Valdés tiene todavía responsabilidades como gobernador casi por dos años. Tanto Gerardo como Facundo los dos son muy buenos candidatos. En el caso de Gerardo tiene la contextura el hombre de Estado, la planificación, la cabeza. Y en el caso de Facundo, es el radical disruptivo, que por eso también tiene resultados. Lo importante es que tengamos candidatos a presidente, a gobernador, a intendentes, ir armando una cantera para que el radicalismo no se apague nunca, tal como lo quiere la gente, un radicalismo que lucha por el poder y busca el equilibrio.

¿Pensás que tienen que presentar una fórmula 100% radical o ves la posibilidad de lista cruzada con el PRO?

-Tengo entendido que ambos precandidatos dijeron que no tienen problema en llevar un buen candidato o candidata del PRO como vice. Hoy el partido es plural, no necesitas poner dos radicales para mostrar que sos radical. Lo que hay que hacer es abrirse. No creo que haya listas solamente con radicales

El radicalismo expresó muchas veces haber sido excluido de las decisiones de gobierno en lo que fueron las gestiones de Cambiemos en Nación y PBA. ¿Qué certezas tienen de que eso no vuelva a ser así bajo una eventual presidencia del PRO?

-El radicalismo fue muy generoso en el congreso de Gualeguaychú, cuando dijo “candidato a presidente extrapartidarios con exclusividad, Mauricio Macri”, algo que jamás ningún partido hizo. Eso fue hasta un poco naif, no se habló de cómo conformar un gobierno. Pero la queja siendo gobierno era que el criterio de selección debe ser sobre la base de los mejores, y eso es lo que no se dio. Es obvio que el gabinete no fue armado con los mejores. Sacaron a Pratt Gay en un buen momento y un tiempo después fueron a buscar un ministro economía un programa de cable. Por eso se expresó el radicalismo, que igualmente se expresó hacia dentro, con prudencia. Allí estuvo el error, porque estos problemas no se arreglan en un periodo, se requiere volver a ganar. Y el principal fracaso de Mauricio Macri fue no haber vuelto a ganar. Al quedar a mitad de camino, volvió Cristina y todo para atrás.

¿Cómo ves al Gobernador Kicillof y su gestión en la provincia?

- Vienen del centro. Desde Duhalde todos los gobernadores vinieron de la Capital, no podés obligar a que alguien quiera lo que no conoce. Cumplen su función bastante aislados. Al haber sido ministro de economía conoce perfectamente que a la Provincia la puede sostener con lo que le llega de Nación, y al estar respaldado por Cristina, está tranquilo. Por eso se mantiene aislado, no nos da bola a ninguno.

¿A ningún opositor?

- Nada, ni propios ni ajenos, en ese sentido es parejito, no discrimina

¿Cambió algo la incorporación de intendentes al Gabinete el año pasado?

-Mejoró su equipo. Pasar de quién no conoce la provincia de Buenos Aires para dirigirla, que intenta hacer lo mejor pero resulta que no conoce ni ama el lugar, y después reemplazarlo por intendentes, obviamente vienen que se ponen la camiseta y van a mejorar el equipo. Pero se le fue el 60% del tiempo del mandato. Y ahora, lógicamente, los intendentes vuelven a suposiciones por el riesgo electoral.

“Kicillof no conoce ni ama el lugar (la Provincia)”. 

Hace algunas semanas hubo una polémica porque intendentes del PRO denunciaron discriminación por parte del Gobierno PBA en obras, y varios intendentes radicales se diferenciaron de ese planteo. ¿Se equivocó el PRO en esa denuncia?

-En los fondos del FIM es parejito, nos retrasó a todos. Yo acá presente todos los requisitos y todavía no se hizo el depósito del dinero, que dicen que está en la tesorería provincial. El dinero que nos corresponde a nosotros y a todos los municipios. Cada vez que dejan la guita en el banco al 70% anual, están usándole el dinero a los vecinos de cada uno de los municipios. Creo que hacen eso, y a algunos municipios propios, más ligados a La Cámpora, los abastecen de obras llevadas adelante por la provincia en particular y fondos nacionales.

Desde el oficialismo dicen que hoy hay más obras que nunca en la Provincia, ¿qué le respondes a eso?

-Que nunca van a llegar al nivel de obras del anterior gobierno provincial, no hay manera. Por ahora le va a costar mucho mejorar al gobierno anterior.

¿Querés ser el candidato a gobernador por el radicalismo?

-Estoy ciento por ciento concentrado en mi doble tarea de ser intendente de San Isidro y ser constructor de juntos por el cambio. Si vos me preguntás si califico para ser gobernador, te dijo que sí. Estoy preparado, en política las cosas no se imponen sino que se desarrolla un camino que fundamentalmente está dado por lograr los consensos. Llegado el momento se tomará la decisión. Hoy estoy construyendo los consensos necesarios para devolverle a los bonaerenses la estima perdida de que los gobiernan sin ser del lugar, con escaso conocimiento. Los intendentes que somos del lugar, gobernamos y tenemos resultados, tenemos preparación para eso. Lo más importante es tener esas acreditaciones para ser gobernador.

¿Cómo quedó la relación con Abad después de la interna del año pasado, que tuvo momentos picantes?

-La interna no fue picante, fue muy movilizadora. Nosotros produjimos esa interna y votaron 130.000 afiliados de manera voluntaria, lo cual es muy bueno. Lo único picante es que cuando llegó el momento de hacerse las listas en las PASO, resultó que hubo 45 distritos radicales, 45 comités que se quedaron sin candidato, no pudieron tener listas. Y también el hecho de qué se pusieran candidatos a legisladores provinciales que no venían del radicalismo, no tenían volumen para atraer votos, es decir, no tenía ni un sentido táctico ni un sentido estratégico, y a las horas no estaban más. Todos los que se incorporaron de afuera el radicalismo ninguno quedó en el radicalismo. Ahora tenemos voluntad de que haya listas de unidad. Pero no puede volverse a darse lo anterior.

Si Facundo Manes no fuera candidato presidente, ¿lo ves en carrera para ser gobernador de la provincia Buenos Aires?

-No creo que ni él ni Gerardo Morales una vez tomada la decisión de candidatearse a presidente se bajen de ahí. Ninguno de los dos es una persona de amagar.

Dijiste que querías listas cruzadas para ampliar, ¿qué referente del PRO te gustaría que te acompañe como vice en una fórmula si fueras vos el candidato?

-No te puedo responder porque estoy en la tarea de resolver el camino crítico para producir los consensos para llegar a esa situación. Lo que quiero es devolverle la estima a los bonaerenses y que tengan un gobernador de la provincia.

Se instaló el debate sobre una posible suspensión de las PASO. El propio Morales criticó al kirchnerismo por querer cambiar las reglas del juego, pero cruzó a Macri por criticar al radicalismo de Chubut en el mismo sentido. ¿Qué hay que hacer con las PASO?

-A nosotros nos convienen frente a quienes queremos ganarle a la elección. Porque sino se produciría una diáspora dentro de la oposición. Pero las PASO fueron impuestas por Néstor Kirchner para plegar la provincia a la nación. El principal problema que tienen es la obligatoriedad, es polémico hacer ir a votar a la gente a internas partidarias. De hecho, hay una cifra de gente que no va a votar a las PASO y si a las generales. Nosotros tenemos que luchar porque permanezcan, hasta que se encuentre un mejor sistema para ganar la elección, lo digo con sinceridad. Además el FDT no puede deshacerse de las PASO porque son quienes las impusieron. Después está la discusión por las autonomías municipales, donde lo mínimo que puede tener un vecino es elegir su fecha para elegir su intendente y sus concejales. ¿Por qué lo tenés que discutir en el medio de la guerra de las galaxias de la elección presidencial, provincial y municipal, todo a la vez? Son derechos constitucionales y hay que respetarlos, están en el derecho amparado, el derecho a la autonomía municipal. Pero hablar de autonomía municipal con gobernadores que vienen de la Capital es hablar en otro idioma, no está en su nomenclatura.

¿Qué cambiarías en la PBA?

-La provincia tiene que encaminarse a una fortísima descentralización y las autonomías municipales, para que cada municipio pueda hacer una carta orgánica y no depender de una carta orgánica central que fue hecha en la época de los conservadores. La autonomía es fundamental para la descentralización y que la provincia pase a tener una actividad rectora, no una actividad de imposición. Es imposible pensar que de las torres en la plata se puede dirigir la totalidad de la provincia. La provincia debe ser viable, hoy todavía no lo es. Y hay que terminar con la mega ciudad, que es miseria y hacinamiento.