Desde principio de su mandato, la gobernadora María Eugenia Vidal supo que sola no iba a poder gobernar la provincia de Buenos Aires. Fue así como comenzó a tejer alianzas con distintos sectores a través de distintos mecanismos. De esta manera pudo sacar leyes trascendentales para su gestión como fue el Presupuesto 2016 con el adjunto endeudamiento, el cual contó con el consenso del massismo y de un amplio sector del peronismo. 

Sin duda, la alianza más fuerte que logró construir la mandataria provincial fue con Sergio Massa. Hoy, a pesar de cientos de rumores respecto a un alejamiento de Vidal por conocer las ambiciones del legislador de cara a las próximas  elecciones, la realidad muestra que se siguen encontrando e "intercambiando favores". 

En este contexto de negociaciones por el Presupuesto 2017, María Eugenia Vidal mantuvo un encuentro con Sergio Massa para charlar algunos puntos del proyecto y para lograr cerrar un acuerdo. En los próximos días, mantendría un segundo encuentro para poner punto final a esta  historia que a pesar de algunas complejidades, siempre se supo que iba a terminar favoreciendo lo que pretende la  mandataria provincial que es que aprueben el presupuesto. 

A cambio de esto, seguramente Massa le pida a Vidal ocupar algunos lugares libres y buscar cerrar un acuerdo en el recambio legislativo, ya que el massista Jorge Sarghini dejará la presidencia. 

Es decir que con este panorama, el peronismo vuelve a quedar un tanto relegado, a pesar de que desde el Grupo Fénix y los Esmeralda, buscarán también tener un protagonismo importante en estas negociaciones.