La reforma laboral impulsada desde el Ejecutivo será uno de los puntos de mayor debate de acá a fin de año. Luego de que el presidente, Mauricio Macri anunciara que se realiza para "avanzar hacia erradicar la pobreza", cambiando los marcos normativos en cuanto a las relaciones empleador-empleados, mucho se espera de la postura que adopte la Confederación General del Trabajo (CGT). El Consejo Directivo de la central obrera se opuso a la modificación de la Ley de Contrato de Trabajo aunque se muestra abierta al diálogo.

Para la Central Obrera, se trata de cuestiones "innegociables" y que atentan contra los derechos adquiridos por los trabajadores a través de años de lucha. Además, según analizan los gremialistas, las reformas forman parte de una escalada del Gobierno que avanza sobre el sindicalismo como objetivo final terminar con el peronismo.

“La CGT no aceptará cambios respecto de la filosofía del trabajo, la política de ‘deslaborización’, el banco de horas por un año, que impedirá el pago de las extras, el cálculo de las indemnizaciones y las pasantías”, dijo Héctor Daer.

Dentro de la CGT hay posturas más firmes y otras que apuntan a esperar a ver cómo avanza el Gobierno en cuanto a las negociaciones, pero la decisión respecto a las modificaciones en la Ley de Contratos de Trabajo fue unánime y de oposición.

La reunión encabezada por las cabezas del triunvirato, Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña se llevó a cabo en la sede de la calle Azopardo al 800 y durante más de tres horas analizaron el panorama nacional, además de esbozar una estrategia en caso de que el Ejecutivo intente avanzar con las reformas aunque el sindicalismo nacional se oponga de lleno.