Tras el trágico final del show del Indio Solari que le costó la vida de al menos dos personas, el intendente de Olavarría, Ezequiel Galli afirmó que "lo que sucedió fue un desmadre total", ya que se estimaba que asistirían entre 160 a 170 mil personas, pero la cifra fue de más de 350 mil.

Además, el Jefe Comunal confirmó que se registraron dos muertos y señaló que está abocado a facilitar el regreso a sus hogares a los cientos de jóvenes que quedaron varados en la ciudad. 

Uno de los fallecidos es Fernando León, oriundo de la localidad bonaerense de Los Polvorines, de 42 años, en tanto que el otro aún no identificado oficialmente- murió por un paro cardíaco durante el recital.

Mediante una conferencia de prensa, Galli admitió que la situación "se nos fue de las manos", al tiempo que aclaró que la responsabilidad de lo que ocurrió dentro del predio La Colmena es de la productora que organizó el show, en tanto que el municipio debía controlar la calle y el sistema de salud.

Asimismo, remarcó que en lo que respecta al municipio, la seguridad externa "estaba preparado para la mitad de gente de la que llegó" y por ello "la situación se colapsó a la salida", mientras que el servicio de salud que se dispuso fue eficiente, "con mucha gente atendiendo los cuatro hospitales, dos de ellos móviles cerca del lugar" donde se realizó el show.

Por último, aclaró que el predio donde se realizó el recital "no es municipal, está judicializado -es de los acreedores-, con un contrato de alquiler firmado a una empresa privada, que tenía que llevar adelante el show".