Por quinta vez en lo que va del año, los vecinos de Mar del Plata amanecieron con bolsas de basura en la calle, por cuarto día en consecutivo. El conflicto entre el intendente Carlos Arroyo y los recolectores de basura ha tenido varios capítulos en lo que va del año. Sin embargo, la falta de recolección de basura que aqueja hoy a los marplatenses no se debe a falta de pago, ni negociaciones salariales con los recolectores, sino con la Policía bonaerense.

Según precisaron desde el municipio, las fuerzas de seguridad se niegan a prestar sus servicios en el predio de disposición final de los residuos y piden un aumento de los montos que cobran por la vigilancia del lugar. Las fuerzas buscan aumentar el monto que cobran por la vigilancia de 77 a 145 pesos por hora, además de exigir al municipio que se ponga al día con pagos adeudados

“La actitud de la Policía es incomprensible”, afirmó el secretario de Gobierno de Mar del Plata, Alejandro Vicente y explicó: “Estamos tratando de destrabarlo. Sigue muy dura la posición de la Policía de no prestar el servicio cuando les exigimos el cumplimiento del deber. Se trata de un servicio público esencial y es incomprensible. No hay ningún tipo de justificativo. Han tenido una actitud fulera con la ciudad, con la gente. No tienen conciencia de lo que significa un servicio público esencia donde está en juego la salud humana y la higiene de la ciudad. Un disparate”.

En diálogo con el portal 0223, el funcionario precisó además que “salvo con la Gobernadora, hablamos con todos los ministros y todos tiran la pelota a la Policía, que nos dicen que `cambiaron de destinos y tienen otros destinos que prestar´”.

“¿Adónde tienen que prestar servicios?. Son dos por turno. Acá no hay problemas con falta de pago, está todo al día”, cuestionó Vicente.

Consultado acerca de la posibilidad que la Policía Local pueda suplir la falta de seguridad en el predio, Vicente aclaró que “en principio no se puede, porque hay que crear una excepción pero estamos evaluando eso. Esperemos que hoy pueda solucionarse”, concluyó el funcionario.

La nueva edición del conflicto comenzó el pasado viernes y se prolongó durante todo el fin de semana, lo que provocó que las calles de la ciudad quedaran colmadas de residuos. Anoche se arribó a un acuerdo parcial, por el cual se logró que hubiera recolección sólo en el área del microcentro y en algunos barrios.