Sonrisas de cierre en La Feliz
El Frente de Todos cierra la campaña hoy en Mar del Plata. Alberto Fernández concentró su presencia los últimos días en municipios bonaerenses donde hay expectativa de recuperar el distrito. Habla Fernanda Raverta
La fórmula presidencial y bonaerense del Frente de Todos eligió la ciudad de Mar del Plata para hacer el cierre de la campaña electoral. Una decisión territorial que elude el clásico escenario de La Matanza como telón de fondo proselitista. El objetivo de recalar en la capital turística bonaerense está en línea con la hoja de ruta diseñada por el bunker de calle México para organizar las últimas apariciones públicas de Alberto Fernández 2019.
El escenario del acto que comenzará alrededor de las 17 horas será montado sobre la rambla. La idea de los organizadores es llenar con la presencia de la gente una extensión que va del playón de Almirante Brown hasta la zona donde reposan los lobos marinos.
Es un espacio grande, acordonado de un lado por la fachada del histórico edificio señorial del Casino y del otro por el azul del mar, pero igualmente esperan poder completarlo. Las últimas encuestas que maneja el equipo de Fernanda Raverta dibujan una sonrisa en el Frente de Todos de Mar del Plata, que aspira a recuperar la conducción del municipio.
En principio los oradores serían cuatro. Tomaran la palabra los candidatos del segmento presidencial de la boleta, Alberto Fernández y Cristina Fernández. Luego hablará el aspirante a gobernador Axel Kiciloff. La lista de oradores será cerrada presumiblemente por la joven dirigente de La Cámpora, la candidata a Intendenta Fernanda Raverta.
En comunicación con Diagonales la licenciada en Trabajo Social explica el significado político de que sea su terruño la última estación de la campaña de Alberto y Cristina. “La decisión de llevar adelante el cierre de la campaña en nuestra ciudad es una muestra de la importancia de Mar del Plata para el país y la Provincia. Alberto Fernández ya había planteado la idea de federalizar la gestión y puso a Mar del Plata como una de las futuras capitales alternativas como representación de la realidad de los distritos del interior de la provincia. De esto hablamos cuando mencionamos la necesidad de articular a partir del 10 de diciembre un país, una provincia y una ciudad en sintonía. De eso hablamos cuando mencionamos la necesidad de gestar un proyecto nacional con los ojos puestos en cada provincia y en cada ciudad. Un proyecto de país donde los marplatenses y batanenses tengamos un rol activo y protagónico impulsando un trabajo coordinado entre la Nación y la Provincia”, expresa Raverta.
Previo a Mar del Plata el tour político electoral de Alberto Fernández priorizó su presencia en ciudades de la provincia de Buenos Aires donde el peronismo tiene expectativas de recuperar la administración política de esos distritos. El candidato presidencial justicialista dejó un lugar en la agenda de su última semana para decir presente en Olavarría, Bahía Blanca y la ya mencionada Mar Del Plata. Tres ciudades importantes, tanto por su perfil productivo y por su cantidad de habitantes, que hoy son gobernadas por dirigentes de Juntos por el Cambio. La posibilidad de que el Frente de Todos vuelva a conducir el destino político de esas ciudades es perfectamente posible a partir del próximo domingo. En Bahía Blanca la diferencia que obtuvo el intendente Héctor Gay en las PASO sobre Federico Susbielles (Frente de Todos) fue de apenas 2.400 votos, sobre un padrón de casi 200 mil electores. Mientras que en Olavarría, el justicialista Federico Aguilera quedó a 2.600 votos del intendente de Cambiemos Ezequiel Galli, pero en un padrón de 95 mil electores.
Por último, tras el acto de hoy en Mar del Plata, el ex Jefe de Gabinete y hoy candidato presidencial Alberto Fernández tiene decidido frenar durante 48 horas el frenesí ritmo de vida proselitista y recluirse ante los más cercanos. Según pudo corroborar Diagonales Alberto Fernández ya decidió que el día sábado almorzará con amigos. Aún no tiene decidido el lugar y con quienes disfrutará esa comida y lo que promete su entorno será una charla distendida. Desde el bunker de México dejan entender que es un descanso necesario. A partir del día domingo, seguramente, el trajín diario de Alberto Fernández cobrará una mayor intensidad.