Como ya es clásico en el peronismo, la “lealtad” siempre es motivo de discordia, en especial los termómetros electorales comienzan a calentar. Tal es así en la provincia de Tucumán, donde el reciente respaldo a Cristina Fernández de Kirchner por parte del gobernador Juan Manzur tomó por sorpresa a todo el escenario político.

Tras mantener las distancias con el kirchnerismo en los últimos tres años, Manzur llamó a la unidad con CFK durante la última semana. El gesto hizo eco hasta llegar al senador tucumano José Alperovich, referente “histórico” en la provincia, quien esta mañana no dejó pasar la oportunidad para enviarle un guiño al mandatario. ”Felicito a Manzur por escucharme: ahora él apoya a Cristina como la apoyé yo en todo momento”, dijo el legislador en diálogo con El Destape.

 Es que Manzur golpeó las puertas del peronismo K después de un largo recorrido donde pasó tanto por el diálogo moderado con el macrismo duro, para luego mostrarse junto al armado de la “avenida del medio” de Alternativa Federal de Massa y Urtubey. Esta semana, en tanto, Manzur convocó a al peronismo tucumano a bregar por la “unidad” pero detrás de la ex Presidenta. “Ella entiende la importancia de la unidad de nuestro espacio político. Estoy aquí para sumar y para colaborar con la unidad opositora al gobierno nacional que ella expresa”, señaló.

Llama la atención el rotundo cambio de perfil de Manzur, al coincidir con un escenario donde las encuestas esta semana comenzaron a mostrar a un Macri debilitado por los embates económicos del país y al peronismo alternativo aún sin mayores definiciones para terminar de convencer.

El actual gobernador tucumano había intentado ensayar acercamientos diplomáticos con Mauricio Macri durante sus primeros meses de gestión; en 2017 recibió al presidente en su provincia en el marco de inauguración de obras públicas, luego de tensar la cuerda en las elecciones de medio término. Fue el año pasado cuando Manzur decidió confrontar con Cambiemos y plegarse al peronismo “moderado” del interior del país, condensado en la propuesta de Massa, hecho que agitó el avispero en el kirchnerismo local, representado por Alperovich, que vio en el horizonte una interna entre el PJ y Unidad Ciudadana.

En ese sentido, la fiebre del peronismo que decidió desvincularse de la figura de CFK alarmó al kirchnerismo en todo el país. Sin quedarse atrás, Alperovich fue tajante con el gobierno de Manzur al definir que “no hay diferencias entre su gestión y la de Macri”.  

En tanto, la reciente partida de Manzur de Alternativa Federal -con una dura carta mediante- para convocar a la unidad detrás de Cristina y “porque todo lo demás es funcional a Macri”, fue recibida con tensión por el senador tucumano, cuando no con picardía. Y es que el propio Alperovich le echó en cara “la lealtad” esta mañana y definió: “Manzur cambió de parecer porque electoralmente no le estaba yendo bien, me encanta que ahora apoye a Cristina, muchos gobernadores de Alternativa Federal también la apoyan”.

 Por lo pronto, mientras Manzur y Alperovich ahora se torean en los medios, las encuestas marcan el rumbo de varios y las definiciones electorales esperan a la vuelta de la esquina. Cristina Fernández de Kirchner, mientras tanto, guarda silencio, suma adeptos y aumenta las incertidumbres sobre a quiénes subirá o bajará el pulgar.